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Las juventudes socialistas estrenan estilo: de los jóvenes de clase al baile maorí
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Las juventudes socialistas estrenan estilo: de los jóvenes de clase al baile maorí

En un pasado, las Juventudes Socialistas (JJSS) eran una mosca borriquera para el PSOE. Hasta el propio Felipe González vio temblar su liderazgo cuando sus cachorros

Foto: Las juventudes socialistas estrenan estilo: de los jóvenes de clase al baile maorí
Las juventudes socialistas estrenan estilo: de los jóvenes de clase al baile maorí

En un pasado, las Juventudes Socialistas (JJSS) eran una mosca borriquera para el PSOE. Hasta el propio Felipe González vio temblar su liderazgo cuando sus cachorros le plantaron cara con motivo del referéndum sobre el ingreso de España en la OTAN, allá por 1986. Pero, con el cambio de siglo, la organización se ha convertido en un movimiento cómodo para el poder socialista. Hoy viernes inicia su XXIII Congreso Federal con un polémico vídeo en el que se representan a sí mismos como unos jugadores de rugby que lanzan un balón-misil contra un dirigible con la caricatura de Mariano Rajoy, el presidente del PP.

El Congreso de los jóvenes socialistas contará en su apertura con la presencia del ex presidente González y del secretario de Organización del PSOE, José Blanco. Tras años de actuación silente, las JJSS han logrado llamar la atención con el vídeo que evoca el marketing de los mensajes SMS y de los videojuegos. Así, los argumentos de clase de la organización fundada por Tomás Meabe han dado paso a unos comics manga, donde los jugadores de The New Reds no esgrimen retórica alguna, sino que actúan a la defensiva frente al PP después de arrancarse con un baile guerrero maorí, el Haka, al estilo del famoso equipo de rugby de los All Blacks.

En la ponencia política que se presenta a debate en el Congreso tampoco hay argumentos contrarios al poder de José Luis Rodríguez Zapatero. En realidad, la dirección de las Juventudes Socialistas es tan afín al Gobierno que en su propuesta no se destila ni una sola crítica a estos tres años de socialismo. “Los y las jóvenes”, porque esta expresión salpimenta todo el documento, solo abundan sobre reflexiones universales: “Apostamos por una política de juventud innovadora que gobierne con y para los y las jóvenes como ciudadanas y ciudadanos de pleno derecho”.

Lo más revolucionario de la ponencia política es una reivindicación para que en España haya empleo de calidad y una vivienda asequible. El documento a debatir en el Congreso reconoce el elevado precio de las casas, pero defiende las medidas puestas en marcha por Zapatero que “tienen y han de tener un impacto directo en la disminución de la precariedad laboral y en la lucha contra la especulación del suelo”.

En este sentido, las JJSS expresan su confianza en el Gobierno, porque está comprometido “con los y las jóvenes” y “está respondiendo a la demanda de los y las ciudadanos y ciudadanas, creando por primera vez un apartado específico para jóvenes, que son el 80% de los perceptores de las ayudas previstas y que definitivamente ha favorecido el profundo cambio que ha experimentado la política de vivienda en nuestro país en los últimos dos años”.

Las JJSS destacan que sus principales preocupaciones son los problemas “reales” de la juventud, entre los que destacan el empleo, la vivienda, la emancipación y la educación de calidad. También proponen un “Pacto por el Ocio, Tiempo Libre y Consumo Saludable entre las administraciones y los/as propios jóvenes”.

Fueron clave en el triunfo de ZP

En un pasado, las Juventudes Socialistas (JJSS) eran una mosca borriquera para el PSOE. Hasta el propio Felipe González vio temblar su liderazgo cuando sus cachorros le plantaron cara con motivo del referéndum sobre el ingreso de España en la OTAN, allá por 1986. Pero, con el cambio de siglo, la organización se ha convertido en un movimiento cómodo para el poder socialista. Hoy viernes inicia su XXIII Congreso Federal con un polémico vídeo en el que se representan a sí mismos como unos jugadores de rugby que lanzan un balón-misil contra un dirigible con la caricatura de Mariano Rajoy, el presidente del PP.