Zapatero 'manda callar' a Chávez: no habrá rueda de prensa conjunta tras su cita en Moncloa

Casi dos años después del "¿Por qué no te callas?", uno de los exabruptos más celebrados y mediáticos de las últimas décadas, el Rey recibe hoy en el palacio de La Zarzuela al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que antes se reunirá en La Moncloa con José Luis Rodríguez Zapatero. Pero ninguno de sus dos anfitriones concederá al líder bolivariano más protagonismo del estrictamente necesario: posarán con él ante las cámaras, pero, por expreso deseo del Gobierno, no habrá comparecencia ante los periodistas, ni conjunta ni por separado.

Chávez recala hoy en Madrid para una breve escala de 12 horas no prevista al inicio de la gira que le ha llevado por Libia, Argelia, Siria, Irán, Turkmenistán, Bielorrusia y Rusia, con una parada -tampoco prevista- en Italia para asistir en Venecia al estreno del documental South of the border, obra del cineasta Oliver Stone y en el que Chávez y su revolución bolivariana salen muy bien parados.

La breve e inesperada visita del presidente venezolano, una iniciativa del propio Chávez -que pidió ser recibido por don Juan Carlos y Zapatero-, ha pillado con el pie cambiado al Gobierno, que en privado no oculta su incomodidad por la llegada del controvertido caudillo latinoamericano.

Pero Zapatero no podía hacerle el feo de negarse a recibirle, ni siquiera con el argumento de que sus ya cerrados compromisos nacionales e internacionales hacían sumamente difícil el encuentro: el presidente del Gobierno regresó anoche de Italia, tras su reunión con Silvio Berlusconi en Cerdeña; esta mañana presidirá en La Moncloa la reunión del Consejo de Ministros; luego se entrevistará con Chavez durante apenas 45 minutos, y a continuación viajará a París, donde será recibido por Nicolas Sarkozy en El Elíseo.

"Apretada agenda"

Fuentes de La Moncloa aseguraron ayer a El Confidencial que la "apretada agenda" de Zapatero es, precisamente, la razón por la que ambos mandatarios no comparecerán ante los periodistas en rueda de prensa, que sí se celebró durante las anteriores visitas de Chávez, la última el pasado año. Pero la realidad, según las fuentes diplomáticas consultadas, es que Zapatero ha querido saltarse un trámite que, tratándose de un personaje político tan peculiar como Chávez, puede deparar sorpresas no siempre agradables.

De hecho, el embajador venezolano en España, Isaías Rodríguez, aseguró el pasado miércoles que el encuentro de hoy entre Zapatero y Chávez permitiría a ambos mandatarios "unir voces en contra del acuerdo Colombia-Estados Unidos", una afirmación que ha causado cierto estupor en la diplomacia española.

Madrid no ha cuestionado en ningún momento el pacto suscrito por el presidente colombiano, Álvaro Uribe, con el Gobierno estadounidense para la cesión de varias bases militares en suelo colombiano al Ejército norteamericano con el supuesto objetivo de combatir el terrorismo y el narcotráfico, un acuerdo que sí ha cosechado feroces críticas por parte de numerosos dirigentes latinoamericanos, Chávez entre ellos.

Un portavoz de la embajada venezolana en Madrid confirmó a El Confidencial que el formato del encuentro entre Zapatero y Chávez, sin comparecencia conjunta ante los medios de comunicación, fue impuesto por La Moncloa. Por eso, el mismo portavoz añadió que "es probable" que el presidente venezolano responda a las preguntas de los periodistas tras sus reuniones con Zapatero y el Rey, en un escenario aún por decidir y que, lógicamente, no sería ni La Zarzuela ni La Moncloa.