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“Espero que, aunque sea en el último minuto, el Tribunal Constitucional legalice Sortu”
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'EL CONFIDENCIAL' ENTREVISTA A ÍÑIGO URKULLU, PRESIDENTE DEL PNV

“Espero que, aunque sea en el último minuto, el Tribunal Constitucional legalice Sortu”

Defiende la legalización de Sortu y su presencia en las elecciones del próximo 22 de mayo para avanzar en la normalización política del País Vasco, y

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“Espero que, aunque sea en el último minuto, el Tribunal Constitucional legalice Sortu”

Defiende la legalización de Sortu y su presencia en las elecciones del próximo 22 de mayo para avanzar en la normalización política del País Vasco, y está convencido de que la decisión no la tomará el Tribunal Supremo, sino el Constitucional. Íñigo Urkullu adelanta que si la izquierda abertzale pasa el filtro de los tribunales, el PNV pedirá un adelanto de las autonómicas para que tenga presencia también en el Parlamento vasco. En caso contrario, no descarta que ETA rompa la tregua y la banda sufra una escisión. Con Mariano Rajoy se trata poco… de momento, pero quiere normalizar la relación de su partido con el PP, y si gana las generales no se cierra a dar su apoyo a los populares. Ya lo hizo, dice, Xabier Arzallus con José María Aznar en 1996.

Hace un año me decía en otra entrevista que no creía que la izquierda abertzale fuera capaz de romper amarras con ETA.

Han pasado muchas cosas desde entonces, entre otras un proceso de evolución de la izquierda abertzale hacia la convicción de que no tiene sentido seguir justificando la violencia para conseguir objetivos políticos. Ha marcado distancias con ETA y ahora apuesta por las vías políticas, pero no entro en la interpretación de si ha roto o no amarras.

El lehendakari Patxi López se desmarca del discurso oficial del partido y del Gobierno, y dice que Sortu no es ETA y que no se puede condicionar su legalización con la desaparición de la banda; y Jesús Eguiguren, presidente del PSE, acusa al presidente Rodríguez Zapatero de falta de valentía para encarar el fin de la violencia. El PSE ha cambiado el paso.

(Largo silencio) Rodríguez Zapatero dice ahora que, mientras ETA exista, Sortu tendrá muy difícil ser legal, pero en otras ocasiones ha valorado de manera positiva los pronunciamientos de la izquierda abertzale. Por ejemplo, cuando ETA anunció la tregua el pasado 10 de enero, el vicepresidente Rubalcaba dijo que la decisión no era irrelevante. Mi impresión es que el Gobierno y el PSOE se mueven en función de las circunstancias y, en consecuencia, también lo hace el PSE.

No puede negar que los socialistas vascos han cambiado su discurso.

Lo que está ocurriendo me parece un juego, entre comillas, del lehendakari López. Hoy dice una cosa y mañana otra, pero su posición es descargar en los tribunales la decisión final sobre la legalización de Sortu. Su planteamiento es que los tribunales ilegalizaron a Batasuna y deben ser ellos los que decidan ahora si la izquierda abertzale vuelve a ser legal.

¿Cree que Sortu va a pasar el filtro del Tribunal Supremo?

Lo que espero es que, aunque sea en el último minuto, el Tribunal Constitucional, no el Tribunal Supremo, dé por válida la inscripción de Sortu en el Registro de Partidos Políticos del Ministerio del Interior.

Si no es así y no pasan el filtro del Supremo ni del Constitucional ¿cree que ETA podría romper la tregua?

En el comunicado de tregua, ETA se sigue erigiendo en agente político y, además, rehúye en su redacción el término irreversible. Creo que no es descartable una escisión, no de ETA con el mundo de Batasuna que quiere hacer política, sino en la propia ETA, lo que tendría, a su vez, consecuencias en la izquierda abertzale. La amenaza de la vuelta a la violencia está ahí.

¿A quién perjudica y a quién beneficia la presencia de Sortu en las elecciones municipales y forales, al margen, obviamente, de a la propia izquierda abertzale?

Ese es un juego perverso. El PSE dice que por qué nos interesa que Sortu sea legal si es a nosotros a quienes perjudica su presencia en los comicios, y otros dicen lo contrario, que nos beneficia. Pues ni una cosa ni otra. Dependerá de cada municipio, de cada territorio, porque la realidad política y sociológica es muy plural. Afecta, no digo que beneficie o perjudique, a todos los partidos sin excepción, porque habría una opción más en el escaparate para que los ciudadanos elijan.

¿No le parece que haría muy difícil trasladar el pacto de Gobierno PSE-PP a los ayuntamientos y diputaciones?

La presencia de un partido más hace que todos podamos tener menos escaños, pero lo que está claro es que, si Sortu es legal y tiene presencia en las instituciones, es muy probable que PSE y PP ya no sumen la mayoría absoluta, como ocurrió en las autonómicas de 2009.

¿Va a pedir el PNV un adelanto electoral para que Sortu esté representado en el Parlamento Vasco si es legalizada?

No es una cuestión de causa efecto. La reflexión es otra: si se presenta a las elecciones del 22 de mayo es que es legal, y si es legal es que cumple los requisitos que exige la ley y, en ese caso, si queremos avanzar en un proceso de normalización política, cuyo ámbito es el Parlamento vasco, lo conveniente es que Sortu participe. Desde este planteamiento, sería mejor no esperar hasta 2013 para convocar las autonómicas.

Dicho más claro: si Sortu es legalizado y se presenta a las municipales, el PNV va pedir un adelanto electoral.

Pero lo que no quiero es que se interprete que el PNV pide la disolución del Parlamento porque PSE y PP gobiernan con un cambalache que ha sido posible por la ausencia de la izquierda abertzale en las instituciones. El planteamiento es que, si tenemos la posibilidad en un proceso de normalización en la convivencia, lo mejor sería tratarlo en el Parlamento, y debería estar Sortu. 

Si hay adelanto electoral, ¿tienen candidato a lehendakari?

No, todavía no.

Pues les puede pillar el toro.

No, qué va. El Euskadi Buru Batzar (ejecutiva nacional) tiene la facultad de proponer un candidato, aunque cualquier afiliado puede presentar otros nombres.

¿Cuándo fue la última vez que vio a Rodríguez Zapatero?

Hace dos meses, para hablar de la situación económica.

¿Le vio con voluntad de volver a ser el candidato del PSOE?

No lo sé, pero me llama la atención que el PSOE, y él personalmente, estén dejando pasar tanto tiempo con la polémica de si se presenta o no, porque no ayuda a la imagen del propio Rodríguez Zapatero.

El PNV sostuvo a este Gobierno con su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado y un acuerdo de estabilidad por el que su partido iba a apoyar toda la batería de medidas económicas que tenía previstas.

Eso no es cierto. Alcanzamos un acuerdo presupuestario que tenía como consecuencia la estabilidad del Gobierno, y como contrapartida el traspaso de las competencias pendientes del Estatuto de Gobierno, la tasación de esas transferencias, el compromiso de llevarlas a cabo en 2011, más cuatro o cinco proyectos estratégicos por importe de 112 millones de euros.

Le han apoyado, por ejemplo, en la impopular reforma laboral.  

No hemos apoyado, nos abstuvimos, como hizo el PP.

La abstención equivale al apoyo porque la reforma salió adelante.

El Gobierno ha contado con el voto de CiU y CC en otras cuestiones.

Le hago la pregunta de otra manera, ¿está de acuerdo con la reforma laboral y la de las pensiones?

Votamos en contra del plan de ajuste presentado por el Gobierno en mayo del año pasado, que fue finalmente aprobado. Votamos en contra del límite de gasto en julio, que también fue aprobado. Ese es el marco económico en el que se ha movido el Gobierno. El PNV no ha votado ni a favor de la congelación ni de la disminución de sueldos, ni nada por el estilo. Nos abstuvimos en la reforma laboral y en lo que se ha llamado Acuerdo Social, y ahora, por ejemplo, estamos en posición de no votar a favor del reforzamiento del sistema financiero. No somos el sostén ni el apoyo obligado al PSOE.

¿Qué tal se lleva con Mariano Rajoy?

Tuvimos un encuentro el año pasado y posteriormente alguna conversación telefónica. Es un trato espaciado en el tiempo, pero mi intención es normalizar la relación con el PP.

¿Hasta el punto de apoyarlo si ganan las generales?

La normalización de relaciones con el PP es un camino que hay que andar, pero la historia está ahí y el PNV votó a favor de la investidura de Aznar como presidente del Gobierno en las elecciones de 1996.

Buena foto la de Arzallus con Aznar.

Además, el acuerdo se alcanzó en la sede del PP en la calle Génova. Después rompimos relaciones con nuestra salida de la Internacional Demócrata Cristina y por las acusaciones de connivencia del PNV con el terrorismo. Ahora, lo primero es intentar normalizar la relación, y el futuro ya veremos cómo se escribe.   

 

 

Defiende la legalización de Sortu y su presencia en las elecciones del próximo 22 de mayo para avanzar en la normalización política del País Vasco, y está convencido de que la decisión no la tomará el Tribunal Supremo, sino el Constitucional. Íñigo Urkullu adelanta que si la izquierda abertzale pasa el filtro de los tribunales, el PNV pedirá un adelanto de las autonómicas para que tenga presencia también en el Parlamento vasco. En caso contrario, no descarta que ETA rompa la tregua y la banda sufra una escisión. Con Mariano Rajoy se trata poco… de momento, pero quiere normalizar la relación de su partido con el PP, y si gana las generales no se cierra a dar su apoyo a los populares. Ya lo hizo, dice, Xabier Arzallus con José María Aznar en 1996.

Iñigo Urkullu PNV