El Congreso avala la misión española en Libia con sólo tres votos en contra

El pleno del Congreso ha autorizado hoy la participación española en la intervención militar internacional en Libia con sólo tres votos en contra, los de los diputados de IU y BNG. De los 340 diputados presentes en el hemiciclo, 336 han votado a favor de la participación española, 3 han expresado su rechazo y ha habido una abstención.

Antes de la votación, Zapatero había solicitado el apoyo de la Cámara defendiendo la legalidad de la intervención. Muamar Gadafi carece de "toda legitimidad" y representa "una amenaza" para su pueblo , pero España "no pretende la expulsión del coronel" del Gobierno de Libia. Con esa aparente contradicción, José Luis Rodríguez Zapatero justificaba en el Congreso la participación militar de nuestro país en la crisis libia, que se prolongará durante un mes para asegurar la zona de exclusión aérea y tres meses para garantizar el embargo de armas.

Zapatero ha apelado al principio de la "responsabilidad de proteger" a la población civil libia, y ha asegurado, para marcar claras distancias con el conflicto de Irak, que la participación de las Fuerzas Armadas españolas en esta crisis se basa en razones "humanitarias" y en el paraguas de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, además de en el "respaldo expreso" de los países árabes y africanos y de la UE.

El presidente del Gobierno ha enmarcado la decisión de la comunidad internacional de intervenir en Libia en un "contexto histórico" que ha calificado de "primavera árabe", en alusión a las revueltas en Túnez y Egipto que acabaron con la caída de los dictadores de ambos países. "La valentía y el espíritu cívico" demostrados por tunecinos y egipcios, ha dicho Zapatero, "han sido una demostración palpable de que el progreso y la libertad son también causas del mundo árabe, y que se pueden hacer valer pacíficamente".

Zapatero, tras detallar los medios militares que el Gobierno español ha puesto a disposición de la operación Amanecer de la Odisea -500 efectivos, cuatro aviones de combate, uno de reabastecimiento en vuelo, otro de vigilancia marítima, una fragata y un submarino-, ha asegurado que el período inicial de un mes para el cierre del espacio aéreo libio y tres meses para el control del embargo es revisable. Y que "si las necesidades de la operación lo exigiesen", volverá a solicitar la autorización del Congreso para prorrogar la participación española.