IU alarga la agonía de Vara y se da un plazo de tres semanas para deshojar la margarita de Extremadura

Izquierda Unida de Extremadura, la gran revelación en estas elecciones por su actitud hostil hacia el PSOE, se da un plazo de tres semanas para deshojar la margarita de la Junta, en donde el socialista Guillermo Fernández Vara ve peligrar sus opciones de volver a gobernar. El coordinador regional de IU, Pedro Escobar, está dispuesto a escuchar las “razones” del coordinador federal, Cayo Lara, en la reunión a puerta cerrada que hoy mantienen en Madrid todos los coordinadores del partido para valorar los resultados. Pero desde Extremadura siguen reclamando el derecho a la última palabra. Una decisión que el partido quiere someter incluso a referéndum entre todos sus militantes para que sean ellos los que decidan con qué apuesta se quedan. 

Escobar está dispuesto a copiar el estilo asambleario de las plataformas del 15-M para resolver el entuerto político, “un proceso difícil”, como ha reconocido el propio Cayo Lara. Todos los militantes de IU recibirían una carta en la que se le preguntará por las alternativas, y también por la posibilidad de entrar a formar parte de un gobierno socialista y, sobre todo, qué exigencias se deben plantear a cambio.

El coordinador explicó ayer que su organización es la que tiene más peso, frente a la federal, en la decisión de permitir o no con sus tres diputados que el Partido Popular (PP) gobierne en la comunidad autónoma. Y ya ha avisado que las cosas no se ven igual desde Madrid que desde Extremadura. Porque su sola abstención bastaría para que el PP de José Antonio Monago y sus 32 diputados puedan hacerse, por primera vez en la historia, con la presidencia de la comunidad. 

El líder extremeño de IU no oculta su desencanto con los socialistas y con el propio Fernández Vara, que ha ninguneado a la formación durante los últimos años y, por ello, se permite ahora tensar la cuerda hasta el extremo.  Para él, “Vara es un cadáver político”, como llegó a decir ayer. "Lo que yo quiero es que dentro de cuatro años los ciudadanos extremeños y por extensión toda España diga: menos mal que ahí ha estado Izquierda Unida, que ha mantenido la opción a la izquierda" y "ha evitado y ha hecho determinadas cosas", añadió.

El debate sobre qué hacer seguirá hasta la reunión del consejo político prevista para el 4 de junio, según han apuntado fuentes de IU federal. Para la formación comunista, una de sus bazas es el compromiso de los partidos para reforma de la ley electoral y rebajar el porcentaje de voto necesario para entrar en la Asamblea. Algo que les perjudicó en las elecciones de 2007 y les borró del hemiciclo regional. 

Tras insistir en que no tienen "prisa", ha recordado que el plazo para la constitución del Gobierno extremeño termina el 20 de junio y que podría darse la circunstancia de que IU no tomara una decisión hasta horas antes de que termine ese plazo. Sin embargo, fuentes de IU federal siguen sosteniendo que la organización Extremeña debe acatar las directrices que fueron marcadas en el consejo político que se encargó de definir la estrategia electoral del pasado febrero, entre las que se incluye el impedir gobiernos del PP.