Rosa Díez a Zapatero: “Haga lo que hace la gente después de despedirse: marcharse”

La portavoz de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, ha protagonizado el enfrentamiento más tenso de la mañana en la segunda sesión del debate del estado de la nación, centrada en los grupos minoritarios. La ex diputada socialista ha culpado directamente a Rodríguez Zapatero de que Bildu esté hoy en las instituciones del País Vasco y Navarra y le ha animado a que tenga un último “gesto patriótico” como presidente convocando ya las elecciones. “Usted ya se ha despedido, se despidió ayer. Haga lo que suele hacer la gente después de despedirse, marcharse", ha dicho.

La diputada ha culpado a Zapatero de dejar el país en una situación de “emergencia nacional” y de ser, también, el principal responsable de la presencia de Bildu en las instituciones vascas y navarras y, en este sentido, ha encrespado los ánimos de la bancada socialista con la referencia que ha hecho a una carta escrita por Rubén Múgica, hijo del concejal socialista asesinado por ETA. La ha citado para señalar sobre Bildu que “los responsables tienen nombre y apellido. El principal responsable es usted, y no habrá días en el calendario para perdonar lo que ha hecho".

"La consecuencia no puede ser más desoladora", ha continuado la diputada, quien ha señalado que "ya hay bajas democráticas, ya hay concejales que han dimitido ante la presión; ya desaparecen los símbolos del orden constitucional de las instituciones vascas; ya se jalean a los terroristas en las calles; ya se empieza a escribir el relato perverso en el que los terroristas y las víctimas son iguales".

El momento más débil de ETA

La mañana, con un claro sabor a despedida del presidente, también ha servido para abordar el estado actual de la lucha contra ETA, en este caso por la intervención del diputado regionalista de UPN, Carlos Salvador, que le ha afeado, durante la última tregua con ETA, aceptase hablar de Navarra con la banda y ahora sea "rehén" de los partidos que reclaman "un día sí y otro también su independencia de España".

El presidente ha sacado pecho del trabajo desarrollado en este sentido durante su mandato y, sin citar a Rubalcaba, ha presumido de haber llevado a ETA “a la posición más débil de su historia”. Zapatero ha explicado que a pesar de ha tenido que escuchar "muchas cosas injustas" durante el diálogo con la banda que "con el tiempo" han demostrado ser -ha dicho- "una gran falsedad". "El grupo socialista y el Gobierno fueron acusados de vender Navarra y eso era una gran falsedad, como el tiempo y la historia han demostrado".

El diputado navarro ha apelado a espacios de consenso, que aún están sin explorar, y un modelo de país "al que querer", al tiempo que ha asegurado que su partido, en ningún caso, actuará con ánimo restrictivo ni para alimentar revanchas.

El “plato no agradable” de la jubilación a los 67

El debate, más relajado con el resto de los portavoces, incluido Salvador, ha servido también para que Zapatero confiese, en su réplica a Francisco Jorquera, del BNG, que el aumento de la edad de jubilación hasta los 67 años "no es un plato agradable" y a "nadie le gusta", pero ha sido una imposición de la "realidad demográfica", ya que si no se actuaba sobre el sistema "en diez o quince años, no salían las cuentas para pagar las pensiones".

El portavoz del BNG ha exigido también al Gobierno la supresión de las diputaciones provinciales. Una necesidad en la que el presidente parece coincidir al señalar que el esquema institucional actual no puede continuar "tal y como está ahora". El presidente ha admitido, sin embargo, que se trata de "un debate para la próxima legislatura" y por lo tanto: "No me corresponde pronunciarme".