Rajoy rectifica para evitar el limbo legal tras la votación de investidura

Mariano Rajoy explicó el miércoles en Onda Cero que aún no era posible recurrir ante el Tribunal Constitucional porque no se había producido un acto administrativo de convocatoria del pleno, con formato de investidura no presencial y delegación de voto de los fugados. Sin embargo, este jueves el presidente del Gobierno ha rectificado y ha precipitado los trámites para intentar evitar el limbo legal e institucional que se produciría si se lleva a cabo la investidura y se suspende la toma de posesión, tras el recurso y la suspensión por el Constitucional.

La admisión a trámite del recurso en los próximos días lleva aparejada la suspensión automática del pleno de investidura y, por tanto, del pleno con Puigdemont como candidato. La presentación del recurso requiere obligatoriamente el paso previo dado ayer por Rajoy de pedir un informe al Consejo de Estado para posteriormente tramitar la impugnación ante el Tribunal Constitucional.

Esa situación de limbo institucional había provocado en los últimos días preocupación en el Gobierno y en el Tribunal Constitucional, después de que el 'expresident' de la Generalitat hubiera retirado su petición de voto delegado.

Al ser preguntado por Carlos Alsina por el recurso, Rajoy aseguró que lo haría "después del acto administrativo que lo motivara. No podemos actuar por declaraciones en unos medios. Decir que Puigdemont va a comparecer no podemos recurrirlo". Es decir, que actuaría cuando "la Mesa confirme que el señor Puigdemont puede actuar de esta manera". Desde esas declaraciones al anuncio de hoy no hay acto administrativo alguno, porque la Mesa del Parlament no ha tomado ninguna decisión formal y, sin embargo, el presidente del Gobierno anuncia el inicio de proceso del recurso.

TE PUEDE INTERESAR

El Gobierno amenaza a Torrent con el TC para que presente otro candidato

Ángel Collado

La propia vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, ha anunciado que recurre los anuncios de los días 22 y 23 de enero, es decir, previos a las palabras de Rajoy. El 23 de enero, el Boletín Oficial del Parlament publicaba la propuesta de Puigdemont como candidato, es decir, un día antes de que Rajoy asegurara que es preciso esperar al acto administrativo a impugnar.

Tampoco hay constancia de que Puigdemont no vaya a comparecer en el pleno, ni decisión alguna del Parlament de permitir una investidura no presencial. El recurso futuro se basa en la hipótesis no comprobada de que Puigdemont no acuda al Parlament. Eso es lo que hace discutible e insólito el recurso.

TE PUEDE INTERESAR

Rajoy asegura que irá al Constitucional si Puigdemont intenta ser investido a distancia

EC

El Gobierno ya había anunciado antes que actuaría para suspender el pleno de investidura en cuanto se autorizara el voto delegado de los fugados o se estableciera un formato de investidura no presencial. Puigdemont solicitó delegar el voto, pero luego lo retiró, lo que hizo imposible ese recurso. Fuentes del Constitucional admitían también que no hay acto administrativo que recurrir y explicaban que tendrían que actuar de forma inmediata en el momento en que arrancara el pleno, quizá sin tiempo para recibir un recurso, admitirlo a trámite y suspender la votación, Es decir, hubieran tenido que actuar entre la votación y la publicación del decreto de toma de posesión.

Cuando se produzca la admisión a tramite, el Constitucional suspenderá el pleno y Roger Torrent deberá elegir si presenta otro candidato pero, en todo caso, se frena el pleno Y corren los dos meses para la repetición de elecciones si no hay una investidura antes.

Esta vía de la suspensión por el Constitucional era deseada por sectores independentistas y del PDeCAT para elegir un candidato distinto a Puigdemont, pero el expresidente la rechazó al retirar su petición de delegación de voto. Torrent tiene intención de cumplir la suspensión si la decreta el Constitucional y eso abre la puerta a que proponga otro candidato, como desean ERC y parte del PdeCAT.​