Las conversaciones de Cospedal y Villarejo, prescritas para la Justicia

Las conversaciones mantenidas en el año 2009 entre el comisario Villarejo y la entonces responsable del PP, María Dolores de Cospedal, evidencian la comisión por parte de los interlocutores del encuentro —cuyos audios ha desvelado 'Moncloa.com'— de uno o varios delitos que, sin embargo, tendrán poco recorrido en los tribunales. Según informan a El Confidencial fuentes jurídicas, la posible revelación de secretos y la obstrucción a la Justicia que comete, al menos, el policía en las charlas hasta ahora publicadas no puede investigarse porque prescriben a los cinco años.

Durante el encuentro celebrado en la sede del PP en la calle Génova de Madrid, el comisario da cuenta a la ex secretaria general del PP de los avances en la instrucción e investigación de la trama Gürtel. No solo explica el alcance del material con que cuentan la Policía, la Fiscalía Anticorrupción y el juzgado, que entonces dirigía el juez inhabilitado Baltasar Garzón, si no que relata varios intentos para torpedear su desarrollo. Desde la destrucción del 'pendrive' que contenía toda la información B de las empresas de Francisco Correa hasta la elaboración de listas de regalos para los políticos populares valecianos, los audios reflejan detalles que encajarían en actividades delictivas.

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La norma aplicada para la prescripción de delitos figura en el Código Penal, que define que, salvo excepciones como el terrorismo o la lesa humanidad, no pueden perseguirse cuando transcurran unos plazos relacionados con la gravedad de las penas. Así, prescriben a los 20 años aquellos cuya pena máxima sea prisión de 15 o más años, a los 15, cuando vaya de los 10 a los 15, a los 10 para la franja de cinco a 10 años de condena y a los cinco para el resto. Ni la revelación ni la obstrucción llevan penas altas, por lo que el plazo es el más reducido, explican las fuentes consultadas.

Otra cosa diferente es la posibilidad de que generen algún efecto en causas que aún permanecen abiertas, como la que investiga la caja B del PP. Cospedal declaró como testigo en este procedimiento en el año 2013. Durante dos horas y media, en pleno agosto y rodeada de un fuerte dispositivo de seguridad, respondió a las preguntas del juez Pablo Ruz y las fiscales del caso y lo negó absolutamente todo.

Opinión

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Los investigadores cotejarán ahora aquel testimonio a la luz de los nuevos datos. La entonces secretaria general del Partido Popular responsabilizó a Luis Bárcenas del control de las donaciones y negó tanto la existencia de una contabilidad en B como que percibiera sobresueldos en dinero negro. También desmintió haber tenido ninguna participación en la negociación para la salida de la formación del extesorero.

El conocimiento público de las grabaciones abre también la puerta a que el juez instructor, José de la Mata, llame a declarar a cualquiera de los protagonistas de la cita. Desde el marido de Cospedal hasta el propio comisario, se abren ahora nuevas líneas de investigación en un procedimiento con 10 años de antigüedad y que aún mantiene vivas varias piezas.