Asalto nocturno a la estación fantasma de la Línea 12: todos los trenes, pintados de grafitis

Un convoy de tres de la Línea 12 de Metro de Madrid ha aparecido este jueves por la mañana pintado de grafitis. La práctica totalidad de los vagones que estaban aparcados en la estación fantasma situada entre las paradas de Arroyo Culebro y Parque de los Estados, en la Línea 12 del suburbano, han amanecido afectados por las pintadas, elaboradas en diferentes estilos y en distintos colores. Así lo han comunicado fuentes oficiosas de Metro, visiblemente molestas por la gamberrada, que provocará que las autoridades del organismo público tengan que desembolsar fondos con el fin de limpiar los vagones para que vuelvan a su estado inicial.

La pintada de grafitis en los trenes del suburbano representa una práctica cada vez más habitual en Metro de Madrid. Según datos ofrecidos por el organismo público, "los daños provocados por grafitis en Metro durante el año pasado alcanzaron los 595.710 euros, menos de la mitad del gasto que se produjo en 2018". "El número de grafitis consumados en 2019 ha sido de 269, lo que representa la cifra más baja de los últimos cinco años", añaden las mismas fuentes.

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid aseguran que han abierto una investigación para encontrar a los autores de la gamberrada. Desde Metro de Madrid, explican que siempre denuncian todos los asaltos. De momento, sin embargo, añaden las mismas fuentes, no hay ningún detenido.

En esta ocasión, los asaltantes han tomado la estación fantasma por la noche, aunque no siempre lo hacen así. No es raro que estos 'pintores' ilegales actúen incluso durante horas laborables. En noviembre de 2018, de hecho, un maquinista del metro sufrió una crisis de ansiedad tras ser obligado por un grupo de 15 grafiteros a mover un convoy para que lo pintaran de arriba abajo, según contó entonces Europa Press. El asalto tuvo lugar en la misma parada donde ha ocurrido el de la pasada noche. Aquella vez, los asaltantes accionaron la alarma, el maquinista fue a ver qué había pasado y fue entonces cuando los grafiteros se metieron en la cabina del conductor para forzarle a mover el tren.

Las pintadas son tan frecuentes que incluso durante la inauguración de la exposición del centenario del suburbano, que presidió Felipe VI en diciembre de 2018, Metro tuvo que montar un dispositivo de seguridad especial para salvaguardar el acto de los grafiteros, que habían amenazado con actuar. El Gobierno regional blindó también los vagones que utilizó Alfonso XIII en 1919 para inaugurar el suburbano, uno de los objetos más preciados de la exposición situada en Chamartín. La dirección de Metro había recibido amenazas en las redes sociales que apuntaban a una actuación coordinada entre grupos de grafiteros para asaltar los centenarios trenes.