Más de media España no está en condiciones de poder reabrir con seguridad los colegios

¿Cuándo hay que preparar a los bomberos, cuando se dan condiciones de riesgo extremo de incendio o cuando ya se ha producido un fuego? Con la reapertura de los colegios y la pandemia, está pasando algo parecido. Comunidades autónomas como Madrid o Navarra han previsto distintos escenarios: desde las clases presenciales hasta el cierre de las escuelas y el desarrollo 'online' del curso, pero no especifican qué tendría que ocurrir para avanzar de un escenario a otro. ¿Se cerraría un colegio cuando se hubieran detectado varios contagios o cuando la incidencia del virus en ese distrito o ciudad haya superado un nivel preocupante?

En Estados Unidos, más propensos a combatir la epidemia de forma analítica, lo tienen claro: no es necesario lamentar un brote de covid-19 para establecer el cierre de un centro, simplemente observar las señales. Allí no es seguro reabrir los colegios si se superan los 25 casos diarios por cada 100.000 habitantes. Esta estimación, que el epidemiólogo estadounidense Michael Osterholm dejó hace unos días en una entrevista con El Confidencial, no es una cifra escogida al albur.

En realidad, procede de un documento publicado por el Harvard Global Health Institute en cuya elaboración han participado Osterholm y algunos de los primeros espadas en salud pública de Estados Unidos, además de compañías como Apple, Google o Microsoft.

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La clave para ellos es transformar las escuelas en ‘centros de aprendizaje resilientes a la pandemia’ que tengan el ambicioso objetivo de permanecer en cero casos la mayor parte del tiempo. ¿Cómo se lograría esto? Mediante los métodos ya conocidos de mascarilla obligatoria, distancia física —sí, también en los recreos— y test generalizados con el posterior rastreo de contactos.

En Estados Unidos, actualmente hay estados como Hawái, Maine, Montana o Alaska que tienen una incidencia de covid-19 tan baja que van a comenzar las clases como de costumbre. En el otro extremo están Texas, Arizona o California, que no tienen más opción que iniciar el curso de forma ‘online’. Las recomendaciones de este informe son cruciales para todos esos estados que están en medio y registran una incidencia entre baja y moderada.

A día de hoy, Aragón y Madrid estarían en nivel rojo. Las dos tienen una incidencia por encima de los 350 casos por cada 100.000 habitantes

Siguiendo preceptos similares, ¿cómo de seguro es en estos momentos abrir los colegios en cada comunidad autónoma de España?

Hemos establecido cuatro escenarios distintos según las recomendaciones de Harvard y los últimos datos de incidencia acumulada proporcionados por Sanidad. En el nivel verde, con menos de 14 nuevos casos por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas, no habría problema alguno en abrir los colegios de Educación Primaria y Secundaria de forma presencial. En el amarillo, habría que realizar una apertura parcial —priorizando aquellos alumnos con mayores necesidades o asignaturas más centrales para el currículo del alumno—, y en el naranja, además, habría que mantener cerrados los institutos.

Por último, en el nivel rojo, todos los centros educativos deberían permanecer clausurados hasta que mejoraran los niveles de incidencia.

A día de hoy, y con base en estos criterios, Aragón y Madrid estarían en nivel rojo. Las dos tienen una incidencia acumulada por encima de los 350 casos por 100.000 habitantes en las últimas dos semanas, una cifra equivalente a 25 casos diarios. En nivel naranja están Baleares, Cantabria, Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco y La Rioja, aunque con grandes diferencias entre ellas: Cantabria tiene una incidencia de 142 casos y el País Vasco se acerca a los 300.

En nivel amarillo, con una incidencia entre 14 y 140 casos por cada 100.000 habitantes, está el resto de comunidades: Andalucía, Asturias, Canarias, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia y Murcia, además de Ceuta y Melilla. Asturias es la que mejor está: sus 40 casos son la mitad que los de la siguiente región menos afectada por el covid-19 en esta fase de la pandemia.

La incidencia es el primer criterio que utiliza el Harvard Global Health Institute, pero también tiene en cuenta los hospitalizados, las muertes, la tasa de positividad o las capacidades para el rastreo de contactos. Además, señala también la tendencia. Y ahí solo Aragón tiene noticias positivas en las últimas semanas. El resto de comunidades empeoran o se mantienen más o menos estables.