El Gobierno reafirma su voluntad de agotar la legislatura sin cambios en la coalición

El Gobierno descarta cualquier tipo de modificación en su hoja de ruta tras la marcha del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, para presentarse como candidata en las elecciones a la Comunidad de Madrid. Su voluntad sigue siendo la de agotar la legislatura hasta 2023, rechazando rotundamente modificaciones en este calendario, como vienen insinuando socios del Ejecutivo en el Congreso, y de hacerlo sin cambios en la coalición. Así lo ha expresado la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros celebrado este martes, subrayando que "para nada está prevista otra circunstancia distinta a agotar la legislatura". Máxime, según añadió, por su objetivo ahora mismo se centra en combatir la pandemia y "volver a la situación previa de crecimiento económico".

La reestructuración del Gobierno tampoco supondrá cambios sustanciales en el reparto de las funciones entre los dos socios del Gobierno. Desde Moncloa ya habían anticipado que "el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, han mantenido una reunión breve esta mañana posterior al Consejo de Ministros". En dicha conversación, se añade en el breve comunicado, "ambos consideran que hay acuerdo en los cambios que deben acometerse y solamente falta rematar algunos detalles en base al acuerdo de coalición".

En palabras de la ministra portavoz, "no esperamos ninguna relación distinta que la mantenida hasta la fecha", y ha insistido en que la salida del vicepresidente segundo tampoco implicará cambios en el acuerdo de coalición. La remodelación del Gobierno sigue pendiente tras la salida de Pablo Iglesias, para encabezar la candidata de Unidas Podemos en la Comunidad de Madrid, y el presidente Pedro Sánchez ha pactado con el todavía vicepresidente segundo que Yolanda Díaz sea vicepresidenta y mantenga la cartera de Trabajo. También que Ione Belarra sea la ministra de Asuntos Sociales, cartera que hasta ahora ocupaba Iglesias. Sin embargo, habrá cambios sobre algunos "detalles" respecto al reparto de funciones establecido en el acuerdo de coalición. No en el grueso. Cambios que tienen que ver no con las competencias, según fuentes conocedoras de la conversación que han mantenido en la mañana de este martes Sánchez e Iglesias, sino "matices".

Los cambios responden al hecho de que para Moncloa es un problema que Díaz se sitúe por encima de la vicepresidenta económica, Nadia Calviño. Así las cosas, una de las opciones que están por determinar de cara a la remodelación del Gobierno sobrevenida por el salto de Iglesias a la política madrileña es que Calviño ocupe la vicepresidencia segunda y Díaz la tercera, o también cambios en otras estructuras, como en la comisión delegada del Gobierno de Asuntos Económicos para mantener la jerarquía de la ministra de Economía. Actualmente, Calviño ya preside la Comisión Delegada y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, es la vicepresidenta.

Sobre los "detalles" pendientes de ajustar, la vicepresidenta cuarta de Transición Ecológica, Teresa Ribera, sí ha dado alguna pista más al respecto al apuntar que en el diseño actual de las vicepresidencias una es política (la primera que dirige Carmen Calvo), otra es social (en referencia a la que ostentaba Iglesias), otra económica (Nadia Calviño) y una última medioambiental. "Por eso, un perfil de una vicepresidencia social correspondería a la estructura actual", ha concluido. El hecho de que Díaz ocupe la vicepresidencia segunda conservando la cartera de Trabajo, y que las actuales funciones de Asuntos Sociales se asumiesen por la hasta ahora secretaria de Estado de Agenda 2030, Ione Belarra, supondría así una alteración al acuerdo de Gobierno tal y como lo ha definido Teresa Ribera.

La remodelación del Gobierno es una prerrogativa exclusiva del presidente del Gobierno, pero al formar parte del acuerdo de la coalición, lo ha negociado durante las últimas horas con Pablo Iglesias. La intención, según ha avanzado la ministra portavoz aludiendo al propio anuncio de Iglesias, es que el todavía vicepresidente segundo se mantenga en sus funciones hasta poco antes de que arranque la campaña electoral, en torno al 19 de abril.

El portavoz del PNV, Aitor Esteban, socio prioritario del Gobierno, sí ha asociado la salida de Iglesias del Ejecutivo con la hipótesis de un adelanto electoral, que fio a un año vista. "Este movimiento de Iglesias lo leo más como minar la coalición, con un paso adelantado. Posiblemente la coalición se iba a ir difuminando, y seguramente vislumbrando elecciones para el año que viene, pues él da un paso adelante", aseguró esta mañana en rueda de prensa en el Congreso tras participar en la Junta de Portavoces. Pero también advirtió al Ejecutivo por dejar de atender al flanco independentista, lo que en su opinión también incrementaría la inestabilidad de un Gobierno en minoría. "Hay una patata caliente en Cataluña, y si se quiere mantener una mayoría relativamente estable, el Gobierno tendrá que resolver eso”.