¿Por qué el pistolero de Tarragona pidió la eutanasia y no será juzgado por el tiroteo que cometió?

• El pistolero de Tarragona muere tras aplicársele la eutanasia

El 14 de diciembre de 2021, E.M.S., un extrabajador de la empresa de seguridad Securitas de 45 años y aficionado a las armas de estilo deportivo, irrumpió en las oficinas de la plaza de la Mitja Lluna de Tarragona hiriendo a tres compañeros y a un agente de los Mossos d'Esquadra en su posterior intento de fuga en el municipio de Reus. Unas horas después, el hombre se atrincheró con una cantidad "considerable" de armas, entre ellas un fusil con mira telescópica, en una masía abandonada a las afueras de Riudoms, municipio situado a cinco kilómetros de Reus, y quedó en "estado crítico" tras recibir varios impactos de bala en la operación policial que inició el Grupo Especial de Intervención Mossos para intentar neutralizarle con el objetivo de detenerle.

Tras esos hechos, el hombre, también conocido como el "pistolero de Tarragon", fue acusado de varios delitos en calidad de tentativa de homicidio, atentado a agentes de la autoridad y tenencia ilícita de armas. En sintonía con lo que declaró ante las autoridades competetes el jefe de vigilantes de seguridad de la empresa durante el curso de la investigación, Eugen Sabau había enviado varios mails a la empresa en tono amenazante antes del tiroteo, una de las razones por las que apenas tres días después, mientras permanecía hospitalizado, el Juzgado de Instrucción número 5 de Tarragona decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza, para el hombre, quien tan pronto recibiese el alta debía ser trasladado a la prisión de Tarragona.

Sin embargo, aunque la decisión de enviarle a prisión se ratificó, el autor del tiroteo no estaba "en condiciones de declarar" por su condición médica en diciembre de 2021, lo que ha condicionado también un tanto el proceso judicial contra el detenido. Debido a las lesiones derivadas de los disparos que recibió al ser abatido por los Mossos, Eugen Sabau quedó en estado tetraplégico y permanecía actualmente en el hospital penintenciario de Terrassa en estado grave, razón por la que había solicitado la eutanasia en varias ocasiones para acabar con su existencia. Además, había hecho una petición para pasar sus últimos días de vida en libertad.

Prevalece "el derecho a la dignidad"

A pesar de que la solicitud de eutanasia se había paralizado en dos ocasiones por los recursos interpuestos ante la Justicia por dos de sus víctimas, una de ellas el agente de los Mossos d'Esquadra que fue herido con un arma de fuego y que contaba con lesiones en el pecho y uno de los brazos, a mediados de este mes de agosto el Consorcio Sanitario de Terrassa, en Barcelona, programó la eutanasia de Eugen Sabau para este 23 de agosto después de que la Audiencia Provincial de Tarragona confirmase que la autorizaba y tras el fallo del Tribunal Constitucional rechazando los últimos recursos de las víctimas del pistolero de Tarragona.

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De acuerdo con la resolución del Constitucional, se consideraba que en el caso se da "una inexistencia" de violación de derechos fundamentales a pesar de que aún no ha tenido lugar juicio alguno contra Sabau. En resumidas cuentas, según la Audiencia de Tarragona "debe preponderarse el derecho a la dignidad y a la integridad física y moral del investigado frente al derecho a la tutela judicial efectiva de los denunciantes", pues el detenido padecía "sufrimientos físicos y psíquicos constantes e insoportables sin posibilidad de alivio, con un pronóstico de vida limitado, en un contexto de fragilidad progresiva".