La otra factura de los presupuestos: así ganan millones los ayuntamientos fieles al Gobierno

Diez millones de euros para el desarrollo de un polo tecnológico en Manresa (Barcelona) o cuatro para la rehabilitación de una residencia de mayores en Baztán (Navarra). Son algunas de las inversiones conseguidas en las negociaciones de los presupuestos por los socios de investidura y que, a menudo, se centran en los ayuntamientos en los que gobiernan. En este caso, en manos de ERC o Bildu.

¿Cómo ha llegado ahí ese dinero? El primer paso se dio en octubre cuando el Consejo de Ministros presentó su proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE). Pero ese fue solo el comienzo de un largo proceso de conversaciones y enmiendas que terminaría con la aprobación de la cuenta definitiva dos meses después. En el proceso, 146 enmiendas añadidas y unos grupos parlamentarios más beneficiados que otros, una información que se extrae de la comparativa, partida a partida, de la propuesta del Gobierno frente a la aprobada.

Es verdad que son la mayoría, no lo vamos a negar; es una realidad que se puede ver

La fragmentación del Congreso ha convertido la aritmética parlamentaria en un ejercicio constante para el Gobierno de coalición que, con sus altibajos, ha sacado adelante sus principales medidas gracias a los socios de investidura. A río revuelto, ganancia de pescadores.

Aunque el montante total de todas las modificaciones supone una pequeña parte de las cuentas públicas, la inversión para algunos municipios es significativa. Por ejemplo, para Manresa, esos diez millones equivalen al 10% del presupuesto municipal. Esto les permite impulsar o acometer proyectos por la vía exprés que, de otra manera, se verían abocados a buscar otra forma de financiación y retrasar su ejecución. Y, de paso, son un espaldarazo al programa municipal del alcalde de turno.

Así, una cuarta parte de las casi 700 nuevas partidas de los dos últimos presupuestos de Mariano Rajoy y los tres de Pedro Sánchez recopiladas por El Confidencial son transferencias directas a municipios. Eso sin contar con diputaciones y fundaciones o empresas públicas. En la mayoría, destinatarios y negociadores comparten color político.

"Es verdad que la mayor información la obtienes de donde estás gobernando, pero eso no quiere decir que solo vayas a plantear medidas para esos ayuntamientos. Es verdad que son la mayoría, no lo vamos a negar; es una realidad que se puede ver", reconoce Idoia Sagastizabal, diputada del PNV. Ante cada proyecto de presupuestos, los jeltzales —como el resto de partidos— recaban propuestas de sus municipios, aunque la selección final de enmiendas "es fruto de una reflexión interna del partido" en la que "los equilibrios territoriales [entre las tres provincias vascas y Navarra] juegan un rol importante", explica la portavoz. Hay que evitar los agravios comparativos.

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Entre los éxitos de esta negociadora, los más de 25 millones de euros para que la diputación foral de Bizkaia sufrague actuaciones de desarrollo sostenible en el estuario de Urdaibai o los diez millones de euros para remodelar la depuradora de Loiola, en San Sebastián.

Pero enmendar el presupuesto significa quitar de un sitio para poner en otro. La tónica general es que las bajas se imputen a partidas generalistas y no finalistas. Es decir, a proyectos sin nombres ni apellidos, como "reconstrucción de infraestructuras como consecuencia de siniestros" o "a entidades locales para apoyo de la cultura". Aunque no siempre es así. Por ejemplo, dos de los once millones de euros destinados al río Zadorra, en Álava, se restaron a la autovía Alquerías-Santomera, en Murcia.

Las medidas que tú propones es una manera de mostrar la identidad de tu partido

Además de la "agenda vasca", el PNV también persigue mejoras para el conjunto de España, defiende Sagastizabal. Para muestra, el acuerdo de revalorización de las pensiones de 2018 en los últimos presupuestos de la era Rajoy, semanas antes de apoyar su moción de censura. Ante el tradicional pragmatismo del PNV está la irrupción de EH Bildu en la mesa de negociaciones, quien pasa a disputarle el protagonismo. "Donde antes nos decían que esto era venderse por unas lentejas, pues ahora ellos también lo hacen", ironiza Sagastizabal

Entre las propuestas de gasto de los abertzales —quienes han declinado participar en este artículo— destacan inversiones en las universidades de Deusto, Mondragón o de Navarra, pero también los 3,9 millones de euros para ascensores y plataformas en Elantxobe (Bizkaia) o los 3,75 millones de euros para una actuación en carreteras navarras del entorno de Lesaka. Intervenciones donde gobiernan, pero también donde aspiran a hacerlo. Como en Pasaia (Gipuzkoa), donde son la primera fuerza, aunque la alcaldía la ostenta la socialista Izaskun Gómez gracias al apoyo del PNV.

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Los diputados catalanes son otros que también han rentabilizado sus votos. El PDeCAT fue el claro vencedor de las que pueden ser las últimas cuentas de la legislatura: de las 146 enmiendas aprobadas, 86 llevaban la firma de su portavoz, Ferran Bel. Por su parte, Esquerra Republicana acordó 900 millones de euros en infraestructuras para Cataluña en la última ronda de negociaciones, según Gabriel Rufián. Entre las partidas, cinco millones de euros para Santa Coloma de Gramanet, donde el líder de ERC se presenta como candidato a la alcaldía de las próximas elecciones municipales del 28 de mayo.

Gracias a los votos de independentistas vascos y catalanes, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha conseguido aprobar, año tras año, sus cuentas con holgadas mayorías. Algo que, para los partidos más pequeños, ha supuesto negociar o quedarse fuera de juego. Así, la posición de Ana Oramas, de Coalición Canaria, ha pivotado desde el rechazo frontal hasta el voto a favor. Con un solo diputado nacionalista canario en las negociaciones de 2021, el archipiélago vio reducidas las inversiones introducidas en la fase de enmiendas. Pese a todo, es de las comunidades autónomas que más fondos extra reciben.

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Buena parte son nuevas asignaciones como los 200.000 euros para el Basque Culinary Center o los 18 millones de euros para la Copa América de Vela de Barcelona. En otros casos, consiguen aumentar las aportaciones previstas en un principio, como el millón de euros extra para el Palau de les Arts de Valencia, que impulsó Compromís. Así las cosas, el mayor número de enmiendas aprobadas son para inversiones en infraestructuras o subvenciones culturales. Aunque no todos los socios del Gobierno de coalición siguen el mismo patrón.

"Nos contaba Hacienda que tenían discusiones entre PNV y Bildu sobre quién conseguía la financiación para un mismo pueblo y quién la vendía [como suya] después, pero nuestra aproximación no es esa", cuenta Héctor Tejero, diputado de la Asamblea de Madrid y miembro del equipo negociador de Más País. "Para nosotros el éxito es abrir debates que mejoren la calidad de vida de la gente", afirma.

Son las votaciones más ajustadas, como la de la reforma laboral, en las que los pequeños tienen mayor fuerza. Ha sido en esas donde se han acordado varios compromisos, como la comisión de salud mental y precariedad laboral o la jornada laboral de cuatro días, que intentaron sin éxito en el marco de los PGE y no pudieron cerrar entonces. "Las medidas que tú propones es una manera de mostrar la identidad de tu partido", concluye Tejero. Los de Errejón también han impulsado, en su caso, enmiendas para Madrid, donde obtuvieron sus dos escaños. "No solo los regionalistas, también el PSOE y el PP lo hacen. El PP, por ejemplo, también pide muchas cosas para municipios madrileños", afirma el portavoz, que no ve que el sistema sea injusto para aquellos territorios sin partidos regionalistas.

Sin embargo, aunque los PGE incluyen partidas de gasto para toda España, lo cierto es que los territorios de Castilla-La Mancha, La Rioja o Murcia, por ejemplo, no son frecuentes en las inversiones de última hora. Una situación de olvido "absolutamente injusta" para Ángel Ceña, procurador de Soria ¡Ya! en las Cortes de Castilla y León. Su espejo es la formación hermana de Teruel Existe, que ha conseguido sacar a su provincia de este listado de olvidadas en las negociaciones. Pese a su última votación en contra, el diputado turolense arañó compromisos por valor de 10 millones de euros para varios museos, el Consejo Regulador de la Trufa, algunas reformas y estudios informativos para infraestructuras.

"No solo en las negociaciones:en tres años y medio en el Congreso han conseguido desempolvar expedientes que llevaban años durmiendo el sueño de los justos", señala Ceña. Para el soriano, la solución pasa por presentarse a las próximas generales. Según sus cálculos, con un resultado similar al de las autonómicas, obtendrían un escaño. Ahora bien, todo dependerá de las nuevas mayorías que resulten de las urnas, para que los distintos partidos aspiren a arañar compromisos al próximo gobierno. Y a exigir su ejecución.

Metodología

Hemos obtenido las altas y bajas de todas las partidas de los presupuestos generales del Estado desde 2017, salvo para los años 2019 y 2020, en los que estaban prorrogados los de 2018. Para ello, hemos comparado las diferencias entre el proyecto aprobado por el Consejo de Ministros con el presupuesto aprobado por las Cortes. Ambos están recopilados y publicados por Civio, autor del proyecto Dónde van mis impuestos, en su repositorio de GitHub. Solo se incluyen las partidas de gasto (no las de ingresos). Tampoco se incluyen los pasivos financieros ni las transferencias internas, tal y como hace Hacienda en su visor presupuestario. Hemos contrastado esta información con las distintas Leyes de Presupuestos.

Para la asignación de cada enmienda a los grupos parlamentarios, hemos revisado las enmiendas transaccionales aprobadas por los grupos (disponible como anexos en notas de prensa), los dictámenes de Congreso y Senado, así como las enmiendas de cada grupo. La información no está disponible en formatos reutilizables y solo está disponible en diferentes PDF, así que puede que más de un grupo se pueda imputar la misma medida.