Los partidos pactan aumentar en un 10% el número de asistentes en el Congreso: serán 350

Un asistente por cada diputado. La Mesa del Congreso de los Diputados aprobó en su primera reunión incrementar en casi un 10% el número a repartir entre los nueve grupos parlamentarios, formalmente constituidos este lunes. De las 318 contrataciones con cargo a la Cámara que estaban a disposición de los grupos en la anterior Legislatura se pasa ahora a 350 trabajadores, según trasladan a El Confidencial distintas fuentes. En la pasada legislatura, la ratio de asistentes fue de 0,9 por cada escaño para todos los grupos menos para el mixto, que tiene menos recursos, y que tuvo una ligerísima ventaja (1,06).

Según estas fuentes, ninguno de los grupos con representación en la Mesa (PSOE, Sumar y PP) se ha opuesto a este reparto. Esto no significa que cada diputado vaya a tener asignado su propio asistente, sino que el total a repartir en función de los escaños logrados será de 350, uno por cada diputado. Los grupos de menos de 10 parlamentarios, de hecho, tendrán uno extra, aseguran los propios partidos. Tradicionalmente, han sido los grupos más pequeños los que han exigido poder formalizar más contrataciones de distintos perfiles (juristas, profesionales de la comunicación y de otros campos, administrativos, etc.), para poder desarrollar debidamente el trabajo que se acumula en la Cámara Baja.

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El número de diputados no ha variado, pero la cantidad de asistentes contratados por la Cámara sí ha ido in crescendo en los últimos años. Los grupos lo justifican con base en la creciente fragmentación del arco parlamentario, pero también por el mayor protagonismo —y actividad— del Congreso. Si en la X Legislatura (2011-2015) eran 260 asistentes, según la SER, el gran salto reciente se dio en la XIII Legislatura, entre mayo y septiembre de 2019. Aquí fue cuando la ratio escaló a 0,9, por lo que el número de contrataciones cubiertas por la Cámara pasó de 271 a 315. Un salto de 44 asistentes más a repartir, para un Parlamento mucho más fragmentado.

Y, como en la XV Legislatura, esta cifra no incluye a los asistentes con los que cuentan cada uno de los presidentes de cada comisión, ni los trabajadores a los que pueden contratar la presidenta, los cuatro vicepresidentes y los cuatro secretarios del órgano de gobierno del Congreso. En la XIV Legislatura, el Gabinete de la antecesora de Francina Armengol, Merixtell Batet, estaba integrado por ocho personas, y cada uno de los otros ocho integrantes de la Mesa tenía acceso a otras dos contrataciones. Además, los grupos pueden contratar más tirando de sus recursos económicos.

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Por otro lado, las mismas fuentes indican que los salarios de sus señorías seguirán congelados este año, si bien sí anticipan que aumentarán los de los asistentes. Entre las cuestiones abordadas en la reunión de la Mesa de este lunes, la mayoría de PSOE y Suma ha permitido que los grupos de hasta 10 diputados cuenten con un portavoz titular y dos adjuntos; los de hasta 99 escaños podrán tener tres adjuntos, y los que tengan más de un centenar tendrán derecho a nombrar hasta a cinco portavoces adjuntos.

No es cuestión menor: además de cobrar pluses específicos, los portavoces adjuntos garantizan mayor visibilidad y presencia en la Junta de Portavoces. El PP se opone a que los grupos con apenas 10 parlamentarios cuenten con dos portavoces adjuntos, y los grupos pequeños lo justifican afirmando que contar con la opción de que hasta tres personas puedan oficializar con su firma su participación en distintas iniciativas les garantiza un mayor margen de movimiento.

Junts y ERC ya tienen grupo propio

La segunda reunión de la Mesa se ha saldado con el PP enfrentado al bloque de la mayoría del Gobierno de coalición en funciones por el reparto de sitios en el hemiciclo propuesto por el Partido Socialista. Tendrán que volver a abordar esta cuestión en la próxima reunión, ya la próxima semana. Por lo pronto, la Mesa ha oficializado la constitución de ocho grupos parlamentarios distintos, más el mixto. Tener grupo propio garantiza importantes beneficios políticos y económicos.

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PSOE y Sumar han prestado cuatro y dos diputados a Junts y ERC, respectivamente, toda vez que no cumplen todos los requisitos que establece el Reglamento de la Cámara Baja para constituir grupo propio. Según el PP, la fórmula escogida supone incurrir en "fraude electoral", y estudia si formalizará un recurso. Por su parte, Vox ha presentado un escrito cargando contra esta decisión. Aún sin fecha, y a falta de saber cómo se sentarán los diputados, el Congreso está hoy un paso más cerca de reabrir sus puertas.