Podemos quiere impedir a sus cargos militar en Sumar e imponer nuevas condiciones para pactar

Podemos quiere impedir a sus cargos que militen en Sumar, una organización que ni siquiera tiene hoy estructura. El partido morado ha redoblado este sábado su pulso con Yolanda Díaz, y en el documento de partida para establecer su nueva hoja de ruta política enmienda, con especial contundencia, el fondo y las formas de la líder de Sumar, además de poner nuevas condiciones para un futurible nuevo pacto con la vicepresidenta segunda en funciones. "En Podemos no existe la doble militancia", reza el texto elaborado por el núcleo duro morado, anunciado antes de la reunión del máximo órgano de dirección política, el Consejo Ciudadano Estatal. Las bases tendrán opción de enmendarlo en un proceso que prevén concluir el próximo 4 de noviembre, y que según Ione Belarra servirá para actualizar los planteamientos de la Asamblea Ciudadana que la situó al frente del partido, tras no haber cumplido las "expectativas" en las últimas citas electorales.

La cúpula de Belarra dificulta así la situación de dirigentes como Nacho Álvarez o Alejandra Jacinto, los dos integrados también en Sumar, y plantea obligarles a elegir entre uno de los dos partidos —los estatutos de Sumar, compuesto por una quincena de fuerzas, sí contemplan la doble militancia—. "De manera general, y salvo situaciones excepcionales que valorará el Consejo de Coordinación Estatal, no estará permitida en ningún caso la doble militancia en Podemos y en otra organización
política", rezan los Estatutos en vigor, redactados cuando nadie podía anticipar la situación que hoy afronta el espacio político a la izquierda del PSOE. Esto es, cuando Podemos lideraba el espacio político, aunque Pablo Iglesias ya hubiese ungido a Díaz como su sucesora.

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Belarra e Irene Montero han desvelado algunos de sus próximos pasos en un acto en Madrid dirigido a elevar la presión sobre Díaz para que Montero repita en el Ministerio de Igualdad, y para acompañar de un baño de masas a las dirigentes moradas mientras reafirmaban sus posiciones. La ofensiva llega, además, después de que Pablo Iglesias, ex secretario general morado, anunciase el lanzamiento de una web de noticias ligada a su proyecto mediático, a menudo utilizado como altavoz contra Díaz.

Entre otras cuestiones, el germen de esa hoja de ruta aboga por endurecer las condiciones para "llegar a acuerdos electorales de unidad" con las fuerzas que se compartan "determinados objetivos", y plantea imponer el cumplimiento de tres requisitos, unos más concretos que otros: que esto "resulte útil, conveniente y eficaz" desde la perspectiva política y electoral; que exista "respeto mutuo a la autonomía de las distintas fuerzas", y que las listas se elaboren "mediante primarias abiertas sin restricciones y sin vetos".

Este último punto sirve para incrementar el desgaste de Sumar, a quien Podemos no perdona que excluyera a Montero de las listas para el Congreso de los Diputados el 23-J. Es una de las claves del documento de una treintena de páginas que pide redoblar esfuerzos para reivindicar la autonomía de su partido, que loa sus logros y, en particular, los de Montero. Y que carga con dureza contra la vicepresidenta segunda.

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"Frente a la antipolítica, el personalismo hueco, la retórica contra “los partidos” y los llamamientos a “superar las organizaciones” —un discurso nocivo y peligroso de desmembramiento social— hay que poner en valor y defender la organización y la militancia", abunda el texto. A esa mención al "personalismo hueco" se añade otra mención a la supuesta asunción, por parte de Díaz, de la "retórica neoliberal". "La sociedad no es una suma de individuos". "La sociedad se construye con instituciones, con tejido social, con organizaciones: esa es la fuerza que transforma", reza el documento.

La vicepresidenta segunda, añaden, "nos ha llevado en estos años a un proceso de “unidad electoral” duro y profundamente injusto que no ha cumplido con las expectativas y ha derivado en una pérdida de votos y escaños". Así, la dirección morada advierte: "Podemos no tiene ninguna intención de rendirse y aspira a seguir siendo no solo una fuerza de Gobierno con competencias, recursos y peso específico propio, sino el principal motor de las transformaciones sociales, feministas y democráticas más ambiciosas, como ha ocurrido durante la legislatura anterior, desde nuestra autonomía política y dando las batallas como siempre las hemos dado".