Sánchez se aferra al voto bisagra de CC para la legislatura pese a no influir en la investidura

El PSOE buscará incluir a Coalición Canaria (CC) en el bloque del sí a la investidura de Pedro Sánchez. No para necesitar solo la abstención Junts, como ha ofrecido el líder de los nacionalistas canarios, Fernando Clavijo, sino para contar con ellos como socios de legislatura y garantizar mayor estabilidad. Fuentes de la Moncloa señalan que el objetivo es formar Gobierno con el apoyo de 179 diputados. La suma de ERC, JxCAT, EH Bildu, PNV, BNG y CC. Los negociadores del Gobierno en funciones siempre consideraron que el precio del partido de Carles Puigdemont sería el mismo tanto si era imprescindible su voto a favor como si bastaba con una abstención. Y la propia dirección de Junts trasladó este jueves a los socialistas, a modo de respuesta al planteamiento de CC, que sus únicas opciones son el voto favorable o en contra.

En Ferraz valoran que el apoyo de la formación liderada por el presidente de Canarias puede darles un mayor oxígeno durante la legislatura. Se trata de un único diputado, pero con el valor extra de que su voto ofrece al Gobierno tener el margen de una abstención entre sus potenciales socios dependiendo de la votación. Más síes que noes, aunque se abstengan Junts o ERC. La negociación para la investidura se está vinculando a la aprobación de los próximos presupuestos, para garantizarse al menos llegar al ecuador del mandato, pero la aritmética en la votación de cada ley solo podrá variar con la inclusión de Coalición Canaria.

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Un papel de bisagra que desde la formación de Clavijo están dispuestos a explotar. Su diputada en el Congreso, Cristina Valido, ya advirtió durante el debate de investidura de Alberto Núñez Feijóo que "en esos dos bloques nosotros no estamos", con un alegato en contra de la polarización. "Si es cierto que Junts tiene la llave de la investidura, no es menos cierto que Coalición Canaria tiene el llavín de la gobernabilidad", reivindicaba el presidente de Canarias este miércoles en un desayuno informativo de Europa Press. Tanto es así que no apostó por "investiduras", sino por "legislaturas".

Su disposición a apoyar la investidura de Sánchez, tras visibilizar su rechazo a pactar una ley de amnistía, se justifica así para situar es una posición más secundaria a Junts. La reacción del partido de Carles Puigdemont, que mantiene una discreción absoluta frente a los diversos posicionamientos públicos sobre las negociaciones, no se hizo esperar. Fuentes de la dirección de JxCAT manifestaron su intención de votar solo sí o no en la eventual investidura. Un movimiento que ratifica la voluntad negociadora de los posconvergentes y aprovechar la oportunidad al situarse como actores centrales de la política española tras años de ostracismo. Un papel que les permite además ganar terreno en su particular competición electoral con ERC.

Para los socialistas, el voto de CC les ofrece margen de maniobra durante la legislatura, al mismo tiempo que les permite debilitar a Feijóo para mostrarlo más aislado. A la ruptura de puentes con el PNV, escenificada en la moción de censura del líder de los populares, se añadiría el cambio de bloque de Coalición Canaria, que votó a su favor junto a Vox y Unión del Pueblo Navarro (UPN). Todo ello cuando los nacionalistas canarios lideran un Gobierno de coalición con el PP en su territorio.

Los socialistas confían en atraer el voto de Valido si sus exigencias para ello siguen centradas en la agenda canaria. La misma lista de exigencias que los nacionalistas canarios pactaron con Feijóo a cambio de su voto en su intento de investidura. Asimismo, fuentes de la cúpula de Hacienda ya aseguraban durante el transcurso del debate de investidura del líder del PP que tampoco tenían inconveniente en sentarse con la formación para repasar las transferencias pendientes a este territorio en los actuales presupuestos.

Prioridad en "los problemas de los canarios"

Un pago por adelanto sin el que CC ni siquiera accederá a negociar. Con todo, todavía no han levantado el teléfono para cerrar la reunión que Sánchez mantendrá con todos los grupos parlamentarios. Sí se ha producido un primer guiño, con la decisión de Interior de convocar a Canarias a las reuniones de inmigración. El objetivo pasa por reforzar la colaboración entre administraciones. Una presencia que vienen reclamando de forma insistente desde que accedieron al Ejecutivo autonómico en las pasadas elecciones. Esta demanda está marcada en rojo en la agenda canaria.

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La diputada nacionalista canaria ya abrió la puerta a dar su apoyo tras reunirse con el jefe del Estado en la segunda ronda de consultas. Pese a reiterar su rechazo a una ley de amnistía, como exigen los partidos independentistas, evitó poner líneas rojas. "Si se acepta íntegra la agenda canaria y se transfieren las cantidades pendientes, mi partido en Canarias tendrá que decidir si es suficiente y cuál es la prioridad", defendió. En esta línea inclinó la balanza hacia la prioridad de la agenda canaria: "Nosotros estamos para solucionar los problemas de los canarios y ese es el objetivo primero y por el que nos votan". Por ello, reconoció que, si hay una garantía de responder a sus demandas, "podemos plantear un apoyo".

Si se abre el debate sobre el modelo territorial durante esta legislatura, como demanda el PNV, los nacionalistas canarios también entrarían en la ecuación. Coalición Canaria se posiciona a favor de afrontar este debate. Tanto para reforzar su perfil más identitario como para reivindicar el cumplimiento íntegro de los "derechos adquiridos" en el Estatuto de Autonomía de Canarias como para aspirar a garantizar el tratamiento de región ultraperiférica reconocido por la UE.