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El Gobierno ha valorado una quita de deuda a todas las CCAA proporcional a su financiación
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EXIGENCIA DE LOS INDEPENDENTISTAS

El Gobierno ha valorado una quita de deuda a todas las CCAA proporcional a su financiación

La negociación con ERC y Junts pone el foco de nuevo en la condonación de deuda autonómica, que es una decisión que Hacienda ya ha barajado. “Si alguien piensa en condonar deudas con el Estado, queremos equilibrio”, dice Juanma Moreno (PP)

Foto: El presidente de Aragón, Jorge Azcón, el de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, y el de Murcia, Fernando López Miras, durante el debate en la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado. (Europa Press/Jesús Hellín)
El presidente de Aragón, Jorge Azcón, el de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, y el de Murcia, Fernando López Miras, durante el debate en la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado. (Europa Press/Jesús Hellín)
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La advertencia de ERC de que su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez depende también del alivio al déficit fiscal catalán, dando la amnistía por descontada, redirige el foco de las negociaciones hacia la condonación de deuda y al diseño del nuevo sistema de financiación. Junts ha puesto sobre la mesa la misma demanda, entre otras más de los independentistas, aunque ha optado por no dar ni un solo detalle del estado de las conversaciones. Que este asunto forme parte de un posible acuerdo ha activado la alerta en el PP. Sus presidentes aprovecharon este jueves su participación en la Comisión General de las Comunidades Autónomas en el Senado para denunciar que no se privilegie a unas comunidades sobre otras.

Fuentes del PSOE admiten que la quita de una parte de la deuda que Cataluña tiene contraída con el Estado a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) forma parte de esa negociación y que, además, ha sido un asunto que el Gobierno ya ha abordado con la Generalitat y con otras autonomías durante la pasada legislatura. El Ejecutivo, confirman, lo ha valorado como una de las fórmulas para ayudar a las comunidades con peor financiación, por el retraso para poner en marcha un nuevo modelo (el actual lleva caducado desde 2014). Cataluña pide esta medida, pese a que no figura entre las que peor trato reciben en la distribución de la solidaridad interterritorial.

Foto: Juanma Moreno conversa con Pere Aragonès en presencia de Alfonso Rueda, en el Senado. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)

La propuesta que ha manejado el Ministerio de Hacienda es realizar una condonación "proporcional" de la deuda de las comunidades infrafinanciadas, lo que incluiría también a regiones del PP. Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha son las autonomías que menos recursos reciben del Estado, por debajo de la media del país, y las que más beneficiadas se verían. Aunque, para que esta decisión afectara también a Cataluña, sería necesario estirar el concepto de falta de financiación. La Generalitat recibe una financiación por habitante que está ligeramente por encima de la media nacional. A pesar de que ERC y Junts defienden que tienen un déficit fiscal anual de 22.000 millones. Pero una condonación de deuda le resultaría altamente rentable a Cataluña porque es la comunidad con un volumen de deuda más grande en términos absolutos, junto a la Comunidad Valenciana, que también reclama una quita.

Porque aunque se buscase una salida equilibrada, siempre favorecería más a las autonomías con una deuda más amplia que a aquellas que la tienen controlada. Fuentes conocedoras de los mecanismos planteados por Hacienda sostienen que, una vez hecho, con ese borrón y cuenta nueva, el Gobierno podría exigir un mayor control de las cuentas (aunque el argumento para la condonación sería la carencia histórica de una correcta financiación), en un contexto además de regreso a reglas fiscales en la UE, tras los años de suspensión por la pandemia.

Foto: El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, uno de los negociadores con Junts. (Europa Press/Eduardo Parra)

Destacan que no sería una decisión gravosa para el Ejecutivo porque no supone "poner más dinero", sino pasar parte de la deuda de la casilla de las comunidades a la del Estado. Y explican que políticamente podría ser defendible porque también beneficia a regiones de PP. Fuentes del Ejecutivo esquivaron este jueves fijar una postura oficial sobre las quitas de deuda, "y más si lo negocian los partidos".

Andalucía no lo rechaza

La posibilidad de una quita de deuda del FLA para barones como el valenciano Carlos Mazón o el murciano Fernando López Miras sería más que positiva. La Comunidad Valenciana es la que acumula una mayor deuda en relación con su PIB y unos 55.000 millones en términos absolutos. Pero lo relevante es que el 83% es deuda estatal. El porcentaje es similar al que registra Murcia (84%), aunque con un montante total de 11.500 millones. Cataluña calca la cifra valenciana, pero acumula un pasivo de 85.400 millones.

Pero tampoco existe unanimidad en el seno del PP, aunque algunas autonomías recibieran un importante alivio en caso de que se produjera una quita. Fue Juanma Moreno el más explícito en su discurso en el Senado. “Si alguien piensa en condonar deudas con el Estado, queremos equilibrio”, dijo el presidente andaluz. ¿A qué se refiere el barón popular con ese equilibrio? ¿Qué satisfaría a los dirigentes del PP en caso de que el PSOE, en su negociación de investidura, abordase la quita de deuda?

El horizonte de la nueva financiación

La tesis que manejan los populares es que el perdón de parte de la deuda a Cataluña es injusto con el resto de regiones. Primero, porque el pasivo que acumula la Generalitat es muy abultado. Y aunque hay comunidades del PP a las que favorecería la condonación, hay otras que no. Lo explicó el gallego Alfonso Rueda, quien ayer en la Cámara Alta se preció de que su región ha gobernado “con sentidiño” (responsabilidad), y demandó lo mismo para afrontar la revisión del modelo de financiación. La deuda gallega ronda los 12.000 millones de euros, pero supone el 16,7% del PIB. Le sucede lo mismo a Asturias, Canarias y Madrid. A Navarra y País Vasco, como se rigen por un sistema propio de financiación, no les afecta este debate.

En el PP hay barones que apuestan por abordar este conflicto junto a la discusión de la reforma del sistema de financiación autonómica. Aunque el temor, también de algunos territorios del PSOE, es que quede sustanciado en la negociación con ERC y Junts. Tanto populares como socialistas son conscientes de que esta legislatura, si echa a andar, tendrá en este asunto una de sus claves de bóveda. Pero la duda es si serán capaces de dejar de alimentar la confrontación e intentar llegar a un acuerdo.

La advertencia de ERC de que su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez depende también del alivio al déficit fiscal catalán, dando la amnistía por descontada, redirige el foco de las negociaciones hacia la condonación de deuda y al diseño del nuevo sistema de financiación. Junts ha puesto sobre la mesa la misma demanda, entre otras más de los independentistas, aunque ha optado por no dar ni un solo detalle del estado de las conversaciones. Que este asunto forme parte de un posible acuerdo ha activado la alerta en el PP. Sus presidentes aprovecharon este jueves su participación en la Comisión General de las Comunidades Autónomas en el Senado para denunciar que no se privilegie a unas comunidades sobre otras.

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