División en el bloque conservador del CGPJ frente a la declaración contra la amnistía

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Los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se enfrentan este lunes a un Pleno incierto y marcado por la crispación. Las posturas están divididas hasta tal punto, que ni siquiera el bloque conservador, que integran ahora 10 vocales, se presenta unido a la cita en la que deberá votarse si el órgano de gobierno de los jueces aprueba una declaración contra la amnistía.

La reunión extraordinaria fue promovida por ocho de los miembros de ese grupo más cercano a la derecha, pero dos de ellos se descolgaron de la solicitud. El presidente suplente, Vicente Guilarte, ya ha dejado claro que no es partidario de este tipo de iniciativas, mientras que Wenceslao Olea —el décimo del sector— no figura entre los firmantes del escrito en el que se respaldaba la iniciativa. Se deduce que no la comparte, al menos en inicio.

Por su parte, el sector progresista ha mostrado su rechazo. Álvaro Cuesta cargó con dureza contra sus compañeros y calificó la iniciativa como "indecente" y sectaria. Incluso durante unas horas tanteó la posibilidad de forzar un plante que frustrara el encuentro. Desde el Gobierno se mostró indignación con la propuesta. La ministra Margarita Robles acusó a los vocales de no ser los más adecuados para dar lecciones de constitucionalidad cuando deberían haberse ido y haber dimitido hace mucho tiempo. Jueces para la Democracia también criticó el tono del escrito y calificó la propuesta de declaración contraria a la ley como "un abuso de las atribuciones legales que ostentan los vocales y una desviación de la legítima función de ese órgano".

Los ocho vocales denunciaban en su escrito que la ley que aún no ha sido registrada y que se negocia a estas horas con Junts supone "la abolición, del Estado de derecho en España". La norma se tramitará en el Congreso como una proposición de ley de los grupos parlamentarios, lo que permitiría evitar el correspondiente informe del CGPJ que debe recabarse cuando se trata de un proyecto de ley del Gobierno.

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Los ocho vocales conservadores tratan de esquivar ese impedimento con su propuesta y, aunque no se trate de un informe propiamente dicho, piden aprobar una declaración en la que se pueda cuestionar la constitucionalidad de la amnistía. Para que su iniciativa salga adelante, necesitan nueve votos.

"Confundir el interés de España con el interés del presidente del Gobierno en funciones para evitar la hipotética formación de gobiernos de partidos de una ideología diferente a la suya es algo manifiestamente incompatible con la alternancia política", critican en su propuesta. "La aplicación de la ley para impedir la acción en curso de los tribunales o dejar sin efecto la que ya se hubiese producido mediante sentencias firmes, convirtiendo en papel mojado esas sentencias, es algo rotundamente incompatible con el principio de Estado de Derecho en el que se quiso constituir España y efectivamente se constituyó... al menos hasta ahora".