El Senado aprueba el veto a la amnistía con duros reproches entre PP y PSOE: "Han quebrado la Constitución"

La ley de amnistía pone formalmente rumbo al Congreso para su aprobación definitiva. El Senado, con mayoría absoluta del PP, ha aprobado la propuesta de veto a la norma dos meses después de que iniciase su tramitación en la Cámara Alta. El PP reformó el Reglamento para extender el procedimiento, lo que obliga al PSOE a aprobar la controvertida norma a las puertas de las elecciones europeas. El debate en el Congreso se celebrará previsiblemente el próximo 30 de mayo, un trago difícil para Sánchez, que además estará en vuelto en la melé de pactos postelectorales en Cataluña.

El pleno de este martes ha estado marcado por los duros reproches entre PSOE y PP, una guerra que se enconará en las próximas semanas con el avance de la tramitación de la ley y la tensión electoral por las urnas europeas. Durante la defensa del veto, la portavoz de los populares en el Senado, Alicia García, ha agitado el argumento de que la despenalización del procés no es más que un "negocio" a un "precio descomunal" para la "ambición" de Sánchez y "el primer paso de la deriva populista" de Sánchez "hacia la adulteración liberal de la democracia".

El resultado de las elecciones catalanas ha estado presente en casi todo momento en el tenso debate de la Cámara Alta. La portavoz popular ha denunciado, de hecho, que la dependencia de Sánchez del independentismo sea "hoy mayor que hace dos días". Alicia García ha agitado la opción de que la amnistía sea sólo "el primer paso" de un proceso que termine con un "referéndum de independencia", y ha constatado que, por el momento, la aprobación de la medida de gracia es "un acto de profunda corrupción política jamás vista en democracia".

Populares y socialistas se han acusado mutuamente de "quebrantar la Constitución" y han espoleado las distintas interpretaciones que hace PP y PSOE del dictamen de la Comisión de Venecia sobre la polémica norma. El portavoz socialista, Juan Lobato, ha destacado el "apoyo" jurídico e institucional a la ley de amnistía, y ha acusado a los populares de atacar "la institucionalidad del Senado" por reformar el reglamento y dilatar durante dos meses un trámite que, en principio, no debía demorarse más de dos semanas en la Cámara Alta.

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El PSOE ha sacado a colación los resultados de las elecciones catalanas como refrendo de "la apuesta de Sánchez por la convivencia". "Los catalanes han pasado página del procés. E 12 de mayo se ha constatado el fracaso del PP en su intento de desgastar al Gobierno con la amnistía", incidía Lobato, un argumento repetido posteriormente por su compañero José María Oleaga durante el turno de fijación de posiciones. "Ya se ha visto en las urnas que España no se rompe. Ustedes no son leales ni con el Gobierno, ni con su país", incidía el senador socialista.

El PSOE ha votado en contra del veto del PP a la amnistía, pero ha habido una destacada ausencia: el expresidente de Aragón, Javier Lambán, no ha acudido a la Cámara Alta para no tener que participar en la votación. Apoyar la medida de gracia, ha dicho el dirigente, implicaría "una insoportable deslealtad conmigo mismo".

Pese al discurso beligerante contra la amnistía y contra Sánchez, el PP ha retirado este martes el requerimiento por el conflicto de atribuciones entre Senado y Congreso. La Cámara Alta había solicitado formalmente a la Cámara Baja que retirase la ley de amnistía por los fallos en el procedimiento de tramitación, al entender que se trataba de una "reforma constitucional encubierta".

El PP había amenazado incluso con llevar el conflicto al Tribunal Constitucional si el Congreso no atendía a su petición. Los populares se escudan ahora en que Francina Armengol no haya sometido a votación en el pleno del Congreso el requerimiento por el conflicto competencial, lo que a su juicio invalida el trámite. Fuentes de Génova admiten que el motivo por el que renuncian a acudir al TC antes de tiempo es la profunda "desconfianza" en el órgano de garantías y el temor a que dé la razón a Sánchez con la amnistía antes incluso de que la ley esté definitivamente aprobada.

Tanto ERC como Junts han aprovechado también el pleno para presumir de las cesiones que han arrancado al Ejecutivo de Sánchez. Por ejemplo, la portavoz de ERC, Sara Bailac, ha celebrado hitos como la tramitación de los indultos o la eliminación de la sedición del Código Penal. "Siempre hemos abierto el camino", celebraba. En el mismo tono se ha expresado el senador de Junts, Josep Lluís Cleries, que ha insistido en que la proposición de ley de amnistía "no la presentó el PSOE por convicción", sino porque lo exigió su formación a cambio de la investidura.