Es noticia
El bipartidismo goza de buena salud: dos de cada tres votos van al PP y PSOE
  1. España
ELECCIONES EUROPEAS 2024

El bipartidismo goza de buena salud: dos de cada tres votos van al PP y PSOE

La tendencia ya era una evidencia en los últimos comicios de carácter nacional: generales, autonómicas y locales, pero en las europeas de 2024 se ha consolidado. PP (34,2%) y PSOE (30,2%) suman un 64,4% de los votos

Foto: El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo  en la noche electoral. (EFE/Juanjo Martín)
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo en la noche electoral. (EFE/Juanjo Martín)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Un filólogo diría que vuelven los clásicos. La España del bipartidismo goza de buena salud. El Partido Popular (PP) y el PSOE son otra vez hegemónicos en unas elecciones europeas. La tendencia ya era una evidencia en los últimos comicios de carácter nacional: generales, autonómicas y locales, pero en las europeas de 2024 se ha consolidado. PP (34,2%) y PSOE (30,2%) suman un 64,4% de los votos, lo que significa, lisa y llanamente, que casi dos de cada tres papeletas (42 de 61 eurodiputados a elegir) se han ido a los dos partidos mayoritarios. Esto supone un avance conjunto de nada menos que 11,4 puntos porcentuales respecto de hace cinco años.

El hecho de que se haya reforzado el bipartidismo explica que las fuerzas españolas vayan a tener un papel muy relevante en sus respectivos grupos parlamentarios europeos. Tanto el PP como el PSOE serán los partidos que más diputados lleven a los populares y socialdemócratas europeos. Se trata de un caso único en el contexto europeo, donde el bipartidismo, en la mayoría de los países, hace tiempo que se diluyó.

Ahora bien, esa progresión tiene una explicación y es muy poco equilibrada: el hundimiento de Ciudadanos, que ha perdido justamente 11,5 puntos porcentuales hasta quedarse sin escaños, explica que el PP haya ganado nada menos que 14,04 puntos, lo que indica que el partido de Feijóo ha capitalizado en pleno el desplome de la otrora fuerza emergente. El PSOE, sin embargo, ha perdido 2,7 puntos. Esto indica que una parte de su electorado se ha ido a los conservadores, ya que ninguno de los partidos con los que compite electoralmente, Sumar y Podemos, ha mejorado sus resultados. Otra parte difícil de calcular se ha ido a la abstención.

Transferencia de votos

La suma de Podemos y Sumar ha alcanzado una representación equivalente al 7,93%, lo que significa algo más de dos puntos porcentuales menos que los que logró la coalición Podemos-IU en 2019. Es decir, la izquierda nacional en su conjunto –PSOE, Sumar y Podemos– ha perdido casi cinco puntos porcentuales (4,84) que han alimentado a otras formaciones. Aunque todavía es pronto para conocer con detalle la transferencia de votos hasta que no se hagan análisis postelectorales, lo cierto es que Vox suma 3,41 puntos porcentuales y la agrupación de electores de Alvise, de la extrema derecha xenófoba, ha irrumpido con el 4,6% de los votos.

Esto significa que las tres fuerzas de la derecha han ganado votos y escaños, justo lo contrario de lo que le ha sucedido a la izquierda. Las actuales derechas (tras el derrumbe de Ciudadanos) han logrado 14 nuevos diputados y las izquierdas han perdido dos. No hay que olvidar, en cualquier caso, que España ha ganado dos escaños tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Esto sugiere que se puede estar iniciando un fenómeno muy parecido al que ocurrió en Francia en los años 90, y que forjaron la consolidación de Marine Le Pen, que una parte de los votantes de la izquierda a la izquierda del PSOE esté comenzado a alimentar a formaciones como la de Alvise o Vox. En paralelo, el partido socialista seguiría perdiendo votos por su derecha. Su éxito, sin embargo, radica en que ha consolidado un suelo de alrededor del 30%, pero no a costa del PP, su principal adversario político, sino de los partidos de su izquierda.

Foto: Feijóo, en el mitin de cierre de campaña del PP en Valencia. (EP/Jorge Gil)
TE PUEDE INTERESAR
Feijóo gana y amplía su ventaja sobre el PSOE, y Sánchez solo resiste al devorar a sus socios
Itziar Reyero Gráficos: Unidad de Datos Gráficos: EC Diseño

Esto lo demuestra que la izquierda nacionalista, representada por la coalición Ahora Repúblicas (ERC, EH Bildu, BNG y Ara Mès), ha mantenido sus tres diputados y prácticamente su porcentaje de apoyo (el 4,9%). La comparación en votos es muy poco representativa debido a que en esta ocasión, al no coincidir con elecciones autonómicas y locales, la abstención ha sido notablemente más elevada, 11,5 puntos porcentuales menos de participación y más de cinco millones de votos.

Como era de esperar, el triunfo del Partido Popular se ha fraguado, fundamentalmente, en dos comunidades, Madrid y Andalucía. En la primera, le ha sacado 12,54 puntos porcentuales al PSOE (hasta alcanzar el 40%) y en la segunda 5,74 puntos. Por el contrario, el partido socialista sigue teniendo su bastión en Cataluña, donde el PSC ha alcanzado el 30%, 12 puntos más que Junts.

Este porcentaje es similar al que obtienen los socialistas en el conjunto de España, aunque con una diferencia. Allí deben competir con los partidos nacionalistas. Cabe destacar, en este caso, que Ciudadanos, un partido que nació en Cataluña, donde llegó a ser primera fuerza política, ha obtenido en esta ocasión en esa comunidad autónoma apenas 13.310 votos, por detrás del partido animalista. También en Cataluña destaca que Podemos, el partido de la candidata Irene Montero, ha obtenido allí más votos que Comuns Sumar, que es el aliado natural de Pedro Sánchez en Cataluña.

Fin del ciclo electoral

Esto es relevante por lo que puede suponer en términos de gobernabilidad en el conjunto del Estado, en la medida que Sumar está obligada a dar un giro a su estrategia política tras los malos resultados en este ciclo electoral.

Como se sabe, uno de los ejes de la campaña ha girado en torno a la amnistía, un asunto en el que determinados dirigentes socialistas han criticado con dureza al presidente del Gobierno, en particular Emiliano García Page, el presidente de Castilla-La Mancha. ¿Qué ha sucedido allí? Pues ni más ni menos que el PSOE se ha desplomado. De hecho, es dónde más lo ha hecho. Ha retrocedido casi nueve puntos porcentuales (8,7) con lo que su distancia con el PP, que claramente ha ganado, se ha ido a 10 puntos. También Vox ha subido (hasta el 13% de los votos) y ha irrumpido la formación de Alvise, con casi un 5%, lo que da a entender que la región se ha derechizado como nunca antes lo había hecho. Las tres formaciones suman, nada menos que el 59,39% de los votos.

En la otra región en la que se ha criticado con dureza la ley de amnistía, en Aragón, con el expresidente Javier Lambán a la cabeza, ha ocurrido algo parecido, aunque con menos intensidad. El PSOE ha perdido seis puntos porcentuales (ha bajado hasta el 30%, mientras que el PP, Vox y Alvise han tenido importantes incrementos. Las tres derechas suman 53,8%, lo que en la práctica significa que cualquier alianza les sirve para gobernar.

Otro caso singular es el del País Vasco, donde la coalición republicana ha obtenido el mayor porcentaje de votos, relegando al PNV a la tercera posición. En este caso, la izquierda avanza claramente. EH Bildu logra 4,3 puntos porcentuales más y los socialistas casi siete, mientras que los nacionalistas vascos se dejan nada menos que 11,5 puntos. Es muy significativo que la extrema derecha, Vox y la formación de Alvise, continúen siendo marginal, mientras que el PP avanza casi cinco puntos porcentuales, aunque todavía con niveles muy bajos respecto del conjunto nacional (11,5% de los votos). El último caso singular, hay más, es el de Junts, que ha perdido dos eurodiputados (se queda con uno).

Foto: Urtasun y Estrella Galán comparecen en la noche electoral. (Europa Press)
TE PUEDE INTERESAR
El fracaso de Yolanda Díaz pone en riesgo el futuro de Sumar pese a ganar a Podemos
Carlos Rocha Gráficos: Unidad de Datos Gráficos: EC Diseño

En este caso, lo significativo es que en Girona, un feudo tradicional, literalmente se ha hundido. Ha perdido casi 13 puntos porcentuales, mientras que los socialistas han ganado casi nueve. También ERC ha sufrido un claro retroceso de algo más de cinco puntos. El hecho de que Puigdemont no se haya presentado al parlamento europeo, como en el pasado, lo puede explicar, pero en todo caso lo que pone de manifiesto es que el independentismo está de retirada, aunque todavía con unos niveles de representación elevados. Ha pasado de sumar el 66,4% de los votos al actual 48,1%, ya lejos de la mayoría absoluta.

Un filólogo diría que vuelven los clásicos. La España del bipartidismo goza de buena salud. El Partido Popular (PP) y el PSOE son otra vez hegemónicos en unas elecciones europeas. La tendencia ya era una evidencia en los últimos comicios de carácter nacional: generales, autonómicas y locales, pero en las europeas de 2024 se ha consolidado. PP (34,2%) y PSOE (30,2%) suman un 64,4% de los votos, lo que significa, lisa y llanamente, que casi dos de cada tres papeletas (42 de 61 eurodiputados a elegir) se han ido a los dos partidos mayoritarios. Esto supone un avance conjunto de nada menos que 11,4 puntos porcentuales respecto de hace cinco años.

Elecciones europeas Vox Alvise Pérez Unidas Podemos PSOE Partido Popular (PP) Alberto Núñez Feijóo
El redactor recomienda