El Supremo revisará la pelea entre Real Madrid y La Liga por las sanciones del reglamento televisivo

El Tribunal Supremo ha admitido a trámite un recurso de La Liga contra la sentencia de la Audiencia Nacional que en 2023 atendió en parte los argumentos del Real Madrid y anuló una serie de aspectos de su Reglamento para la Retransmisión Televisiva. En un auto del 22 de mayo, la Sala de lo Contencioso concluye que el caso presenta interés "para la formación de jurisprudencia" y acuerda revisar el "procedimiento sancionador" que La Liga impuso a los clubes a partir de 2016.

El organismo que preside Javier Tebas apoyó su sistema de sanciones en el real decreto que el Gobierno había aprobado un año antes sobre la explotación de contenidos audiovisuales en el fútbol profesional. Esta norma ordenaba constituir "un órgano de control" al que se le otorgaba la siguiente competencia en La Liga: "Establecer el patrón para la producción y realización de la grabación audiovisual de las competiciones oficiales de carácter profesional que asegure un estilo común que fomente la integridad de la competición, el cumplimiento de la reglamentación vigente sobre la celebración de los partidos y el valor del producto".

Al trasladar esta competencia a su reglamento de 2016, La Liga lanzó un "sistema sancionador" en el que "cada infracción se valora con puntos negativos" y con un "valor monetario" que no concretaban. "Al final de la temporada la suma de puntos negativos se traduce en cantidades que el club o sociedad anónima deportiva tendrá que pagar", señalaba el mismo. "Las cantidades recaudadas a través de estas sanciones se destinarán a mejoras de la retransmisión audiovisual".

La Liga dejaba ese control en manos de un director de partido que rellenaría una "lista de comprobación" con los "incumplimientos", pero la Audiencia Nacional consideró en 2023 que "esa fórmula genérica" resultaba insostenible y anuló el anexo del reglamento sobre las sanciones. Según concluyeron los magistrados, su sistema carecía de "las garantías inherentes a todo procedimiento sancionador", pues no definía "ni una sola conducta" ni incluía "un catálogo que prevea las penas" para cada una de ellas.

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La Liga mantiene ahora en su página web un segundo reglamento para la retransmisión televisiva que está vigente desde la temporada de 2018 y 2019. En lo que se refiere a su sistema sancionador, repite palabra por palabra el mismo procedimiento, apuntando una vez más a "incumplimientos" que valoraría un director deportivo.

El recurso de La Liga

Para tratar de justificar este sistema sancionador, el primer argumento que La Liga esgrime ante el Supremo es que queda fuera del ámbito de lo contencioso-administrativo que puede revisar la Audiencia Nacional. "Alega que el Reglamento para la Retransmisión Televisiva es una norma de organización de la competición, ligada a un aspecto concreto de dicha organización y su explotación económica, y recoge las previsiones y compromisos adquiridos con los clubes y sociedades deportivas con La Liga para conseguir una mejor explotación de los derechos audiovisuales, tratándose del ejercicio de la competencia (privada)", resume la resolución del Supremo.

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En el caso concreto del sistema sancionador, el recurso argumenta a su vez que "se basa en las especificidades propias de la disciplina deportiva", lo que desmonta la conclusión de la Audiencia Nacional de que resulta "contrario al principio de legalidad". Según concluye la resolución del Supremo, esas serán las dos cuestiones que deberá resolver en su próxima sentencia: por un lado, "determinar el alcance de la competencia del orden jurisdiccional" y, por otro, "si estamos ante una relación de especial sujeción en materia de disciplina deportiva".

El control de La Liga sobre la retransmisión

Además del sistema sancionador, la Audiencia Nacional anuló otros apartados del reglamento que se centraban en las "instalaciones de televisión" y en el "contenido previo y pospartido", lo que incluía controlar la retransmisión de aspectos como los "vestuarios", "las llegadas de los equipos", "la inspección de campo"... Los magistrados anularon a su vez un anexo bautizado como 'Cuenta atrás partido' que también abordaba aspecto pre y postpartido: entrevistas a entrenadores y jugadores, ruedas de prensa...

"Se anulan en la medida en que con ellos se exceda del ámbito espacial (terreno de juego, incluyendo las zonas del recinto deportivo visibles desde el mismo), o temporal (desde los dos minutos anteriores a la hora prevista para el inicio del acontecimiento deportivo hasta el minuto siguiente a su conclusión) a los que queda limitada la explotación conjunta de los derechos de contenidos audiovisuales", concluyó la sentencia. "Los apartados anulados lo son por exceder La Liga los límites establecidos".

El organismo que preside Tebas alega que lo único que buscaban estos apartados era garantizar "el patrón" que le había conferido el Gobierno en materia audiovisual: "Se precisa de la colaboración de los clubes participantes en la competición, un deber de colaboración que se extiende a cuestiones accesorias al evento deportivo". La última palabra respecto al "ámbito espacial y temporal" la tendrá ahora el Supremo, donde el Real Madrid también se ha personado ya para defender sus intereses.