Feijóo y sus barones cierran filas en Salamanca y dan por seguras otras elecciones en Cataluña

La negativa del Tribunal Supremo a amnistiar a Carles Puigdemont abre otro delicado frente para el Gobierno y asesta un nuevo golpe a una legislatura ya de por sí inestable. La noticia pilló a Alberto Núñez Feijóo clausurando un acto en Salamanca para presentar su plan sobre una EBAU común de cara al próximo curso, por lo que apenas pudo valorar en directo el alcance de la decisión judicial. Pero sí compartió éste y otros "asuntos de actualidad" durante una comida con sus barones en la ciudad universitaria por excelencia.

Entre tapa y tapa en la Plaza Mayor de Salamanca, Feijóo comprobó de primera mano un cierre de filas "total" tras la decisión "plenamente compartida" de renovar el CGPJ en los términos de "despolitización" que quedaron plasmados en el documento que se firmó en Bruselas.

El líder del PP tanteó el respaldo de los primeros espadas autonómicos, incluida Isabel Díaz Ayuso, antes incluso de hacer público el acuerdo, y logró sobreponerse a los recelos esgrimidos por el llamado 'sector duro' del PP. Este lunes, durante el citado almuerzo privado, Feijóo recibió varias felicitaciones por parte de los distintos barones, según relatan fuentes presentes en el encuentro.

Pero en la cita también se trataron otras cuestiones pegadas a la actualidad. Entre ellas, el escenario que se abre tras la decisión del Supremo de mantener la orden de detención contra el expresidente de la Generalitat. En este sentido, también hubo cuórum entre los barones del PP sobre que el futuro político de Cataluña pasa, salvo sorpresa mayor, por una repetición electoral en octubre. Feijóo deslizó el mismo mensaje que trasladó a sus líderes autonómicos durante el último comité ejecutivo nacional celebrado en Génova: que "hay que estar pendientes" porque "todo puede pasar".

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Aunque varios líderes autonómicos califican de "previsible" la decisión del Tribunal Supremo, que descartó también anular la inhabilitación de Oriol Junqueras, nadie en el PP duda que la decisión complica aún más la relación del PSOE con ERC y Junts en plenas negociaciones para la investidura de Salvador Illa, que continúa en el aire. Por si fuera poco, Puigdemont y Junqueras se vieron este domingo en Waterloo después de años sin ningún contacto, según adelantó La Vanguardia este lunes y pudo confirmar este diario.

Que Salvador Illa termine siendo investido presidente se antoja "prácticamente imposible" y en ello coinciden tanto en Génova como en distintas baronías populares. "Ni ERC va a ceder sus votos al PSOE, ni el PSOE va a ceder ante Junts", resumen. Donde sí hay división de criterio es en que Sánchez pueda aprovechar o no la eventual coyuntura electoral en Cataluña para abrir también las urnas a nivel nacional.

Algunas voces piden no descartar este escenario ante el contexto de una legislatura "ingobernable" y sin partidos en los que apoyarse para aprobar los Presupuestos; pero otros barones ven imposible que Sánchez se arriesgue. "¿Qué beneficio sacaría? Sólo puede aspirar a revalidar una mayoría con sus socios actuales. No podrá prescindir ni de ERC ni de Junts", analizan.

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Sea cual sea el desenlace, lo cierto es que el futuro inmediato en la política catalana y nacional se antoja incierto. Y ante ese escenario de "debilidad" de Sánchez, Feijóo quiso sacar pecho este lunes de esa imagen de unidad total en torno a su liderazgo. Los mensajes de apoyo que verbalizaron en público los distintos barones del PP a Feijóo durante el acto de presentación de la Selectividad común para 14 comunidades autónomas continuaron en privado.

La mayoría de 'jefes' autonómicos acudieron a la cita posterior en el céntrico restaurante de Las Tapas de Gonzalo de Salamanca, incluida Isabel Díaz Ayuso, Juanma Moreno y el anfitrión Alfonso Fernández Mañueco, aunque la invitación se extendía también a líderes autonómicos que se encuentran en la oposición, como Javier de Andrés o Paco Núñez. En la charla "distendida", que se alargó durante un par de horas, se trataron otros temas candentes como el asunto de la inmigración o la histórica victoria de Marine Le Pen en la primera vuelta de las elecciones legislativas en Francia.

Feijóo se detuvo en este último asunto, según las fuentes consultadas, para el resultado de la extrema derecha en Francia con la situación en España. El líder popular repasó los resultados del PP en los últimos comicios europeos para incidir en la tesis de que, al menos por ahora, el PP sigue "ampliando su base por el centro" y "no por la derecha". Pero se descartó en el almuerzo la posibilidad de un 'efecto contagio' ante el auge de la derecha ultraconservadora en Europa, ya que pese al aguante de Vox y la irrupción del partido de Alvise, "nosotros seguimos creciendo". "Hay que asumir cuanto antes que Vox tendrá siempre su espacio", condimenta un presidente autonómico.