Es noticia
Sectores del PSOE-A temen una purga de Griñán y piden a Rubalcaba que controle las listas
  1. España
  2. Andalucía
EMPIEZA LA BATALLA POR LA SUPERVIVIENCIA DE CARA A LAS ELECCIONES ANDALUZAS

Sectores del PSOE-A temen una purga de Griñán y piden a Rubalcaba que controle las listas

La coincidencia electoral de las generales con las andaluzas, que se da ya por hecha en las previsiones del PSOE-A, ha provocado un movimiento de fondo

Foto: Sectores del PSOE-A temen una purga de Griñán y piden a Rubalcaba que controle las listas
Sectores del PSOE-A temen una purga de Griñán y piden a Rubalcaba que controle las listas

La coincidencia electoral de las generales con las andaluzas, que se da ya por hecha en las previsiones del PSOE-A, ha provocado un movimiento de fondo en el partido, a partir del cual determinados sectores, alineados en su día con Chaves, van a proponer que las candidaturas las controle Rubalcaba en vez del secretario general del partido, José Antonio Griñán. Se teme una purga a partir de la cual sean excluidos tanto en el Congreso como en el Parlamento andaluz los miembros díscolos del partido que en los últimos meses se han alineado con algunos focos rebeldes en provincias, sobre todo en Cádiz, donde los críticos tienen mejores relaciones con el candidato a La Moncloa que con el actual presiente andaluz.

 

La reunión que celebró ayer en Sevilla Rubalcaba con Griñán, acompañados ambos de los más estrechos colaboradores de sus equipos, parte de la convicción de que las elecciones van a coincidir en otoño, el encuentro servirá para coordinar la campaña, pero el principal elemento que se debate ahora en el seno del partido es la supervivencia de cualificados miembros, que temen queda quedar excluidos de las candidaturas.

Una vez asumida la derrota ante un PP al alza, el debate entre una renovación a fondo de las candidaturas y la permanencia de los “clásicos” en ellas –algunos con varias décadas ocupando escaños- amenaza con abrir un nuevo frente interno. Desde Manuel Chaves, que no irá por en las listas andaluzas, hasta Alfonso Guerra en Sevilla al Congreso, el más longevo de los supervivientes, pasando por Luis Pizarro por Cádiz para las autonómicas; Rosa Aguilar o Carmen Calvo por Córdoba; Javier Barrero, por Huelva, y otros muchos casos que se producen en la mayoría de las provincias componen un mapa difícil de compaginar en unos momentos en los que hay decenas de cargos socialistas que han quedado fuera de las instituciones en las últimas elecciones municipales y que empujan para sobrevivir.

Griñán quiere una profunda renovación

De hecho, las próximas elecciones serán las primeras en las que Griñán, como secretario general del PSOE-A, va a tener la oportunidad de controlar las candidaturas, al margen del proceso formal reglamentario, y por tanto de configurar un grupo parlamentario en Andalucía de absoluta obediencia que fortalezca su posición en el partido.

En algunos sectores de Cádiz, Sevilla, Huelva, Málaga y Córdoba, ya se están produciendo movimientos de quienes quieren asegurarse su presencia en las candidaturas. En todos los casos, Griñán parece dispuesto a llevar a cabo una profunda renovación de los candidatos, y la tabla de salvación es para muchos de los afectados Pérez Rubalcaba. Para ello hay, de un lado, quienes advierten de que Rubalcaba es el candidato pero no el secretario general del partido, mientras que Griñán sí tiene el poder orgánico por haber ganado un congreso. Y, de otro, sobre todo en el entorno de Chaves, se defiende la capacidad de Rubalcaba, que es diputado por Cádiz –y dejará un hueco en esta provincia para ir por Madrid-, para asumir facultades orgánicas, como el control de las candidaturas, aunque no sea secretario general.

El poder de componer las listas

 

“No se le puede impedir a un candidato que inspire la composición de su propio grupo en el Congreso”, asegura un socialista gaditano que no tiene previsto repetir en las listas y al que se ha relacionado con presuntas irregularidades. El mismo argumento, sin embargo, se podría emplear en el caso de Griñán y el futuro grupo parlamentario andaluz. Sin embargo, en este caso, se alude a la que campaña va a ser conjunta y la estrategia debe de serlo igualmente.

El debate, que no ha hecho más que empezar, está trufado de intereses personales y mientras se respeta la posibilidad de que Chaves, si él quiere, vaya al Congreso por Cádiz, la continuidad de Alfonso Guerra parece más difícil, sobre todo a raíz de los movimientos en contra de su figura que se produjeron en la pasada campaña de las municipales, donde el ex vicesecretario general recibió varios plantes en importantes distritos del partido en Sevilla. 

La coincidencia electoral de las generales con las andaluzas, que se da ya por hecha en las previsiones del PSOE-A, ha provocado un movimiento de fondo en el partido, a partir del cual determinados sectores, alineados en su día con Chaves, van a proponer que las candidaturas las controle Rubalcaba en vez del secretario general del partido, José Antonio Griñán. Se teme una purga a partir de la cual sean excluidos tanto en el Congreso como en el Parlamento andaluz los miembros díscolos del partido que en los últimos meses se han alineado con algunos focos rebeldes en provincias, sobre todo en Cádiz, donde los críticos tienen mejores relaciones con el candidato a La Moncloa que con el actual presiente andaluz.

José Antonio Griñán Alfredo Pérez Rubalcaba