La supuesta compra de votos del PP se vuelve contra el PSOE: "¿Qué hay de lo nuestro?"

Las sospechas de fraude electoral marcaron la campaña de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo. En los días previos a los comicios, los juzgados registraron decenas de denuncias en distintas partes del país, aunque algunas, como en el caso de Jaén, acabaron demostrándose falsas. Lo ocurrido en la ciudad andaluza es especialmente llamativo, ya que la polémica sigue viva seis meses después. Las pruebas con las que el líder del PSOE pretendía denunciar la compra de votos del PP no solo resultaron ser un montaje, sino que han derivado en otra investigación: ahora son los socialistas quienes están en el punto de mira por actuaciones sospechosas en un colegio electoral.

Vayamos al punto de partida de este complejo caso bumerán. En la jornada de reflexión, el PSOE filtró a los medios de comunicación intercambios de mensajes entre votantes del casco antiguo de Jaén, una zona deprimida en la ciudad, con dos concejales del PP. Alguno de los pantallazos parecía evidente:

—Si no nos pagan, no vamos a votar.

—No te preocupes, Fernando, confía en mí.

El caso se denunció en el juzgado horas antes de la jornada electoral.

Los populares presentaron sus teléfonos móviles en comisaría y, tras comprobar el contenido, la Policía confirmó que se trataba de un montaje. De esta forma, la jueza archivó la causa tras detectarse una "clara intención" de "influir en las intenciones de voto", aunque dejó otra línea abierta en la denominada operación Pandilla. La investigación en torno al autor del montaje ha llevado a encontrar indicios de fraude electoral en el otro bando. Y no solo por un presunto delito de usurpación de la identidad.

Dos agentes aseguran haber visto a uno de los dos artífices del montaje actuando sospechosamente en un colegio electoral durante la mañana del 28-M. Se trata de David M. G., apodado el Blanco y conocido del alcalde. Aunque no ejercía su derecho al voto en ese colegio, preguntó a una apoderada del PSOE si era el lugar donde debía hacerlo y entró a hablar con ella. Según el testimonio de los agentes, al que ha tenido acceso este medio, prometió que "a las cinco y media bajan los de ahí arriba y vienen a votar". A esa hora llegaría un grupo de mujeres de etnia gitana de entre 50 y 60 años que serían guiadas por otro interventor socialista, el número 21 de la lista municipal. Los agentes detallan la conversación mientras entraban al colegio electoral.

—¿Qué hay de lo nuestro? —pregunta una de las mujeres.

—Lo que ya hemos hablado, que yo mañana me paso por allí —le responde el interventor.

Más tarde, llegarían otros grupos de la barriada.

—Decidles a todos que bajen a votar, que a las ocho cierra —les recordó el miembro del PSOE.

TE PUEDE INTERESAR

Así se compran los votos en Melilla: del plan 50-50 a la venta por lotes al mejor postor

Alfredo Pascual. Melilla

Con esa sucesión de hechos, a los que los socialistas restan importancia, la Policía investiga si el interventor socialista, un conocido voluntario de Cáritas en la ciudad, estaba compinchado con el Blanco para comprar votos entre las familias desfavorecidas de La Magdalena. Se trata de una zona donde "tradicionalmente" ha habido "compra de votos", como ha reconocido esta semana el exalcalde y entonces candidato de los socialistas, Julio Millán. Por eso, nada más tener indicios, presentó las pruebas a la Policía en un caso que ahora se le ha vuelto en contra.

La Policía ha constatado que el Blanco tenía una "estrecha relación" con el líder del PSOE

El Blanco había sido detenido hasta en 28 ocasiones por varios delitos contra la salud pública, según informó ABC. Vecino del casco histórico, tenía una "relación estrecha" con el líder de los socialistas, como prueban algunas conversaciones reflejadas en el atestado policial.

—Esta tarde te he echado de menos, que hemos estado en la sede —le dice el alcalde en una de ellas.

—Sí, lo acabo de ver. Me hubiera gustado estar allí. Sabes que me avisas y voy del tirón.

—El domingo lo celebramos.

El entonces alcalde en funciones había promovido la contratación del Blanco en la empresa Albaida, donde trabajaba guardando la seguridad de unas obras del barrio. Las conversaciones con el autor del montaje, que ha quedado en libertad con cargos, prueban sus deseos de que ganasen los socialistas.

El PSOE niega que colaborase con el Blanco, autor del montaje ahora señalado por la Policía

Tras archivar la falsificada compra de votos del PP, la jueza deberá dirimir ahora si el PSOE promovió la falsificación de las pruebas y si hubo algún intento de comprar votos por su parte. Los socialistas niegan ambas cuestiones con rotundidad, y aunque el PP ha pedido que el exalcalde Julio Millán sea llamado a declarar como investigado, aún no ha sido citado. No obstante, los populares han aprovechado el contenido del atestado policial, que cuestiona la forma de proceder del anterior regidor.

A los agentes les resulta "extraño" que Julio Millán recibiera los pantallazos y no preguntara su procedencia para asegurarse de que eran reales. "No parece coherente que un candidato a la alcaldía de Jaén, en este caso Julio Millán, reciba unas conversaciones cuyo contenido resulta tan grave tanto para los interesados como para el desarrollo de la jornada electoral sin previo aviso y sin interesarse por su veracidad para posteriormente formularse la correspondiente denuncia en esta comisaría", expone el informe.

En el PSOE están sorprendidos con el vuelco que ha dado el caso y acusan al PP de orquestar una "campaña de difamación" contra su líder. También residente del casco antiguo, había intentado ayudar al Blanco en varias ocasiones, al ser un vecino con "graves problemas sociales". La versión de los socialistas es que, tras recibir el montaje, acudió a denunciar sin perder ni un segundo para evitar que "nadie pudiera aprovecharse de una situación de vulnerabilidad".

Fuentes socialistas recuerdan el optimismo que se respiraba en el partido en el momento de la denuncia, cuando le sonreían las encuestas. No era necesario, dicen, inventar una operación para desgastar a su rival. Hay que recordar que el PSOE llegó a ganar las elecciones —la única capital andaluza donde lo logró—, pero el apoyo de Jaén Merece Más al PP le dejó sin la alcaldía. Otras fuentes apuntan a la incongruencia que supondría que el supuesto conseguidor de votos acudiera al colegio electoral para dejarse ver por la mañana. "No tiene ningún sentido, el tiempo nos dará la razón", insisten.