Se quita la vida abrumado por la culpa de atropellar mortalmente a una anciana en Estepona

Desgraciada sucesión de fatalidades en la Costa del Sol. La Policía Nacional ha investigado la muerte en Estepona de un hombre que una semana antes atropelló mortalmente a una anciana que cruzaba por un paso de cebra. Y ha concluido que el conductor, que dio positivo en la prueba de alcoholemia, pero sin rebasar la tasa máxima permitida, acabó quitándose la vida por el sentimiento de culpa.

Fuentes cercanas al caso explicaron que todo se remonta a la mañana del 11 de mayo. Eran sobre las 10:45 cuando una mujer septuagenaria que cruzaba por el paso de peatones ubicado a la altura del número 6 de la avenida Juan Carlos I de la localidad esteponera era arrollada por un turismo.

En las proximidades se encontraba el conductor del vehículo, que a preguntas de los agentes de la Policía Local explicó que "no había visto" a la mujer y que no pudo evitar el accidente. El hombre reconoció que, "minutos antes", había bebido "un par de cervezas", por lo que fue sometido a dos pruebas de alcoholemia.

Ambas dieron un resultado positivo, pero inferior a la tasa de 0,25 que marca el límite de la infracción, por lo que se le informó de su situación de investigado no detenido —inicialmente— por los delitos de lesiones graves por imprudencia y abandono del lugar del accidente.

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Los agentes tomaron declaración a una serie de testigos del siniestro que aseguraron que el conductor regresó cuando fue recriminado por algunas personas que presenciaron el atropello. El turismo implicado presentaba daños en la parte izquierda del capó delantero y el parabrisas estaba fracturado en ese lado.

La víctima, que tras el impacto cayó unos metros después del paso de peatones, se mantuvo consciente durante la intervención de los sanitarios que la estabilizaron en la ambulancia. En un primer momento, se le diagnosticó una posible fractura en un hombro, aunque con la reserva de una valoración más exhaustiva en un centro hospitalario.

Un familiar acudió a la Policía para denunciar la desaparición del conductor y explicar que no se había superado el 'shock' del accidente

No obstante, su estado empeoró y fue necesario su traslado al hospital Regional Universitario de la capital malagueña debido a la gravedad de las lesiones que presentaba. La mujer finalmente fallecía la noche de ese mismo día, consumándose un trágico desenlace que continuaría una semana después.

Las fuentes consultadas explicaron que el pasado sábado día 18 se recibió el aviso de una vecina que informaba que había visto en la azotea de su bloque a una persona que portaba una escopeta. Una patrulla policial se desplazó al lugar y en el lugar indicado los agentes encontraron el cadáver de un hombre con un arma larga.

Esta persona fue identificada como el conductor que había atropellado mortalmente a la anciana y la hipótesis principal es que se quitó la vida porque no había superado el shock emocional del atropello. Fuentes cercanas al caso explicaron que es lo que declaró un familiar que el día antes del trágico hallazgo denunció su desaparición y ya entonces alertó de que se podía suicidar porque se había llevado una escopeta. Los responsables del caso dan por cerradas las pesquisas y concluyen que se quitó la vida una semana después de arrollar a la mujer.