Críticas ante el desalojo de la Policía de los estudiantes pro Gaza que habían ocupado la Universidad de Sevilla

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La intervención policial en la Universidad de Sevilla para desalojar a un grupo de estudiantes pro Gaza ha suscitado críticas y preocupación entre diversos sectores de la comunidad universitaria y activistas. La noche de este lunes, agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) llevaron a cabo el desalojo de los estudiantes que habían ocupado el Decanato de las facultades de Filología y Geografía e Historia.

El conflicto comenzó cuando un grupo de estudiantes vinculados a la acampada pro Palestina instalada en el exterior del Rectorado decidió tomar las instalaciones del Decanato. Esta acción tenía como objetivo presionar al equipo rectoral para que adoptara medidas más contundentes respecto a la situación en Gaza y rompiera definitivamente los vínculos académicos con Israel. Los estudiantes consideran insuficientes las medidas actuales, que incluyen la suspensión temporal de relaciones con ciertas universidades israelíes y la implementación de ayudas para estudiantes palestinos.

Según un comunicado del Rectorado, la ocupación de las facultades comenzó con el bloqueo de pasillos mediante mobiliario extraído de las aulas. Los ocupantes tomaron las oficinas del Decanato de Filología y algunas áreas de la planta alta, lo que llevó al cierre del edificio para el acceso general. La situación se intensificó cuando la Policía Nacional intervino a las 23:25 horas, empleando la fuerza para desalojar a los estudiantes.

Un video publicado en la cuenta de X de la US por Palestina muestra a los estudiantes resistiéndose a la entrada de los agentes, quienes usaron porras durante la intervención. Este despliegue ha sido criticado por los estudiantes, quienes denuncian la agresividad de los agentes y la falta de diálogo previo.

El colectivo de estudiantes ha expresado su indignación ante la intervención policial. En declaraciones a los medios, afirmaron que uno de sus compañeros resultó herido, sufriendo un corte en el brazo durante el desalojo. Además, acusan a los responsables de seguridad de la universidad y a los agentes de la Policía Nacional de haber actuado con violencia y sin justificación.

El movimiento estudiantil exige al rector Miguel Ángel Castro Arroyo que adopte una postura más firme y que use el término "genocidio" para describir la situación en Gaza. También piden que se ponga fin a cualquier relación institucional con entidades israelíes y empresas privadas que, según ellos, financian la violencia contra la población palestina.

El Rectorado de la Universidad de Sevilla decidió cerrar el acceso al edificio tras la ocupación del Decanato. En un mensaje publicado en redes, se informó: "Durante esta madrugada se ha producido la atención de ambas solicitudes (de desalojo). Deseamos agradecer la actuación de nuestros cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, últimos responsables de nuestra convivencia".

La universidad había anunciado previamente un plan de acción que incluye ayudas para miembros palestinos de la comunidad universitaria y la suspensión temporal de relaciones con universidades israelíes hasta que estas muestren un firme compromiso con la paz. Este incidente ha resaltado las tensiones dentro de la Universidad de Sevilla respecto al conflicto en Gaza y la respuesta de la institución académica. Mientras tanto, los estudiantes pro Gaza han declarado que continuarán con sus protestas hasta que sus demandas sean escuchadas y atendidas de manera efectiva.