"Devolved lo robado": Vox convoca una protesta en la sede del PSOE andaluz por la revisión de los ERE

Vox eleva el tono en medio de la revisión del caso de los ERE. Los de Santiago Abascal han convocado el próximo 15 de julio una manifestación en la puerta de la sede del PSOE andaluz después de que el Tribunal Constitucional haya anulado parcialmente las condenas de seis exaltos cargos socialistas y se atisbe ya un tratamiento similar para los dos expresidentes implicados, Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Con su consigna habitual ―"devolved lo robado"― Vox añade decibelios a la guerra política que se ha desatado después de que el tribunal de garantías haya enmendado el relato jurídico del caso de los ERE desde su instrucción a la confirmación del Tribunal Supremo, pasando por la sentencia clave de la Audiencia de Sevilla que condenó a 15 altos cargos de la cúpula del PSOE andaluz entre 2000 y 2010.

"A la cueva de Alí Babá del PSOE", reza la publicación de la cuenta oficial de Vox en X con la convocatoria. La formación llama a los suyos a la movilización en pleno corazón de Sevilla, frente a la casa solariega de la calle San Vicente donde los socialistas andaluces tienen su sede histórica. En el cartel figuran precisamente Chaves y Griñán, pero también Magdalena Álvarez, exconsejera de Hacienda y exministra de Fomento que ha sido la primera condenada a la que el TC anuló la condena. En su caso fue por el delito de prevaricación, que no tiene aparejada pena de cárcel, pero esta semana el tribunal de garantías ha hecho lo propio con otros cinco exaltos cargos: los exconsejeros Carmen Martínez Aguayo, Francisco Vallejo, Antonio Fernández, el exviceconsejero Jesús María Rodríguez y el exdirector general de IDEA, Miguel Ángel Serrano Aguilar.

Si bien Martínez Aguayo ya no estaba en prisión después de recibir el tercer grado, Vallejo y Serrano Aguilar ―que quedó exculpado de toda la condena― han abandonado la prisión de Sevilla I tras año y medio de cárcel. Fernández y Rodríguez están a la espera de los trámites que hagan posible su excarcelación. Los cinco exaltos cargos que restan por conocer la decisión del Constitucional tendrán que esperar hasta el pleno que el tribunal de garantías celebrará a partir del 16 de julio. Ninguno está en la cárcel, pero Chaves y su mano derecha, Gaspar Zarrías están a la espera de una deliberación que les puede servir para su rehabilitación política.

Es justo contra esa revisión política contra lo que protesta Vox, que está en medio del fuego cruzado que intercambian PP y PSOE desde que comenzaron las revisiones. Los socialistas han puesto en marcha una campaña para intentar levantar cabeza y acusan a los populares de armar "una cacería política" para "imponerse en las urnas", en palabras de Magdalena Álvarez. El PP, con Alberto Núñez Feijóo a la cabeza, insiste una y otra vez en que la decisión del Tribunal Constitucional, al que acusan de estar politizado, no borrará "el mayor caso de corrupción de la historia de España", como lo calificó el propio Juanma Moreno. Este jueves, el consejero de Presidencia de la Junta, Antonio Sanz, ha acusado a los socialistas de estar "desquiciados": "Me sorprende tanto orgullo por la etapa más negra de Andalucía".

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"En Vox nunca nos olvidaremos de la corrupción del PSOE", reza la publicación de la cuenta oficial del partido, que hizo bandera contra el PSOE y el caso de los ERE en su irrupción en el Parlamento andaluz, tras las elecciones de diciembre de 2018. En el cartel de esta nueva protesta, además de Griñán, Chaves y Álvarez, figura la imagen de Juan Espadas, actual secretario general de los socialistas andaluces. El líder de Vox en Sevilla, Javier Cortes, ha aprovechado su tuit para lanzar un dardo al líder del PSOE-A. "Habrá curso de Word Perfect para zurdos distraídos", dice Cortés en X en alusión a la esposa de Espadas, que está investigada por el caso Faffe y en la comisión de investigación que hay en el Parlamento sobre el mismo explicó que su desempeño en esa extinta agencia de la Junta estaba relacionado con ese programa informático.

No es la primera vez que Vox pone en marcha protestas de este tipo. En febrero de 2022 en medio de la precampaña andaluza, fletaron un autobús que llevaba impreso el mismo lema y las caras de Griñán y Chaves. Aquella campaña iba dirigida al PSOE, pero también a los sindicatos UGT y CCOO, razón por la cual llevaron el autocar hasta la sede de los ugetistas en la capital andaluza, donde fueron recibidos por los sindicalistas con La Internacional a todo volumen y una contraprotesta que chafó la iniciativa de los de Santiago Abascal.

Espadas anunció el lunes que el partido se querellará a quien acuse de robar a los cargos socialistas, aunque con nombres y apellidos, después de la revisión del TC. El PSOE defiende que las sentencias que se han conocido ya dejan claro que no existió un modelo orquestado desde la cúpula de la Junta, como venían defendiendo los propios condenados. "Creo que hubo un gran fraude, pero no creo que hubiera un gran plan", dijo Griñán a las puertas del Tribunal Supremo en la fase de instrucción que asumió el alto tribunal cuando era senador autonómico y, por lo tanto, era aforado.

Esas son las tesis que esgrimían las defensas y que ha asumido el TC en sus sentencias al afirmar que la elaboración de un proyecto de presupuestos no puede considerarse ilegal desde el punto de vista de la justicia penal. Como derivación de esa postura, las consecuencias de aplicar ese presupuesto -la concesión de ayudas sociolaborales- no pueden considerarse un delito de malversación porque eran una consecuencia de un modelo blindado por ley en las citadas cuentas públicas.