Intensa pugna por el relato a una semana de la reunión clave para desencallar el tren litoral

La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, parecía adelantar la estrategia del PP cuando este martes solicitaba al Gobierno "medidas concretas" ante los problemas de movilidad en la provincia de Málaga. Y la remarcó un día después la presidenta del Consejo de Alcaldes de los populares malagueños, Margarita del Cid, al añadir que hay "muchas cuestiones pendientes" que deben ser abordadas. Pero no fueron las únicas que quisieron marcar el relato de cara a la mesa del tren litoral que se celebrará dentro de una semana en la capital malacitana. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, adelantaba este miércoles una inversión de 1,3 millones para realizar mejoras en el Cercanías de la Costa del Sol. Un anuncio con el que intenta desactivar las acusaciones de falta de inversión en la zona y armarse con un argumento para contrarrestar las reivindicaciones de las distintas administraciones y colectivos sociales.

A pocos días de la esperada reunión del Ejecutivo central para abordar la viabilidad del tren litoral con regidores de la costa malagueña, primeros ediles del Campo de Gibraltar, Diputación Provincial y la Junta de Andalucía, las distintas partes convocadas a la cita se afanan en fijar posturas para capitalizar el protagonismo en el debate.

Del Cid compareció este miércoles en rueda de prensa para declarar que "los ayuntamientos del PP iremos —a la mesa— con espíritu constructivo, pero también reivindicativo", para después hacer público que "nos preocupa el criterio cambiante del Gobierno". "Hay muchas cuestiones pendientes en materia de movilidad que pueden ser abordadas y comprometidas de inmediato y que también deben formar parte de la reunión convocada el próximo 17 de julio", por lo que considera que el enfoque de dicho encuentro debe ser "más ambicioso".

Entre las medidas que propondrán que se estudien, por ejemplo, la suspensión en verano del peaje de la autopista de la Costa del Sol, o, "al menos, su bonificación para trabajadores, estudiantes y personas que acudan a un centro médico". También expondrán la necesidad de mejorar los accesos en diferentes puntos de la A-7, como es el caso de Benalmádena, o ampliar de dos a tres carriles la autovía en su tramo oriental. Y su preocupación por la implicación real en el tren litoral que uniría Málaga con Algeciras.

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La también alcaldesa de Torremolinos expresó su preocupación por los plazos del Ejecutivo. "Parece no haber entendido la necesidad urgente de mejorar la movilidad en la Costa del Sol. Es inadmisible darse tres años para hacer los estudios y redactar el proyecto de un tramo del Cercanías absolutamente colapsado", remarcó como aviso a navegantes sobre los hipotéticos plazos del tren litoral.

El Ejecutivo, no obstante, no se quedó cruzado y entró en escena para informar de una inversión de 1,3 millones de euros en la línea que une la capital malagueña con Fuengirola. Lo hizo el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible con un mensaje compartido por Óscar Puente a través de su cuenta de X. La publicación, además de detallar que se trabaja para duplicar 2,8 kilómetros de vía entre el aeropuerto y Campamento Benítez, y en completar como vía doble 12,7 kilómetros entre las estaciones de María Zambrano y La Colina, se cerraba con un intencionado "apostamos por Andalucía".

El ministro, con este anuncio, parecía querer diluir las acusaciones del PP sobre la escasa inversión de su departamento en Málaga y la región andaluza y presentar esta iniciativa como muestra de su compromiso frente a los posibles reproches que se puedan escuchar en la mesa del tren litoral.

La reunión del próximo miércoles es un cambio de postura del Gobierno central sobre esta infraestructura reivindicada por muchos colectivos de la sociedad civil. A principios de febrero, y a través del secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, ignoraba un proyecto del que Manuel Chaves llegó a adjudicar dos tramos en 2009. Puente añadió semanas después que "no hay un solo papel con el que trabajar" y advirtió de que, "si el tren para en 20 sitios, no es competitivo": "Poner uno o ampliar el Cercanías hasta Marbella, con todas esas paradas, supone que la gente acabará haciendo lo mismo que hace ahora, que es usar el coche para acercarse a Málaga a coger el AVE".

Estas declaraciones enfadaron a los alcaldes que impulsan esta infraestructura y recordaron que en los últimos años se han gastado más de ocho millones de euros en estudios sobre el trazado, que incluían informes geotécnicos y avances en el Documento Inicial Ambiental.

La cita del día 17 se publicita como una oportunidad, aunque los alcaldes del PP asistirán con escepticismo teniendo en cuenta los recurrentes cambios de opinión del Ejecutivo sobre temas de vital importancia. "Esperemos que no sea solamente una foto para intentar librarse de la presión social que ahora mismo tiene el tema de la movilidad", deseaba la regidora de Marbella, que será una de las que esté en la mesa de negociación.