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Clara Ponsatí ignora la citación del Supremo y se marcha a Bélgica: "Llueve en Flandes"
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ESTABA CITADA A LAS 11 DE LA MAÑANA

Clara Ponsatí ignora la citación del Supremo y se marcha a Bélgica: "Llueve en Flandes"

El magistrado Pablo Llarena ha dado cinco días a la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la acusación que ejerce Vox para que se pronuncien sobre su decisión de no comparecer

Foto: Clara Ponsatí en la última sesión plenaria del Parlamento Europeo. (EFE/Olivier Hoslet)
Clara Ponsatí en la última sesión plenaria del Parlamento Europeo. (EFE/Olivier Hoslet)

La exconsellera y eurodiputada Clara Ponsatí ha ignorado este lunes al magistrado Pablo Llarena y no ha acudido al Tribunal Supremo. Llarena la había citado a las 11 de la mañana para comunicarle su procesamiento por un delito de desobediencia durante el 1-O, pero, según ha confirmado ella misma a través de redes sociales, se encuentra ya de vuelta en Bélgica: "Llueve en Flandes", ha tuiteado.

Tras cinco años huida por su implicación en el referéndum ilegal, Ponsatí regresó a España el pasado 28 de marzo y fue detenida en Barcelona. Al ignorar su citación de este lunes, el magistrado puede tramitar una nueva orden de arresto contra ella, pero, por el momento, ha dado cinco días a la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la acusación que ejerce Vox para que se pronuncien sobre esta posibilidad.

Ponsatí opta por desafiar al Supremo tras verse beneficiada por la reforma del Gobierno que deroga la sedición. Hasta el pasado enero, el magistrado Pablo Llarena la mantenía procesada por sedición, que en 2019 llegó a castigarse con 11 años y medio de cárcel para la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell. Sin embargo, al derogarse este delito, el magistrado pasa a perseguirla por desobediencia, que no conlleva penas de prisión, solo multa e inhabilitación para ocupar cargo público.

La inmunidad, en el centro del debate

El desafío de Ponsatí al Supremo sirve, además, de avanzadilla a un hipotético retorno del expresident de la Generalitat Carles Puigdemont. La defensa de la exconsellera se agarra a que goza de inmunidad como eurodiputada y sostiene que el Supremo debe suspender el procedimiento contra ella, lo que valdrá a Puigdemont para testar el alcance de la especial protección que les proporciona su escaño en Bruselas.

"Una vez iniciado el procedimiento de amparo de los privilegios e inmunidades de la Sra. Clara Ponsatí i Obiols, la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (..) obliga al Excmo. Magistrado Instructor a suspender el procedimiento judicial", argumenta su defensa en un escrito remitido este lunes al Supremo.

Foto: Clara Ponsatí, en el Parlamento Europeo. (EFE/EPA/Olivier Hoslet)

El magistrado Pablo Llarena considera que esta inmunidad no sirve frente a detenciones en España, pero en la providencia notificada este lunes, se limita a solicitarle la documentación a la que hace referencia: "Por su representación procesal se ha registrado escrito en el que se asevera que, el 28 de marzo de 2023, la procesada presentó demanda de amparo de su inmunidad parlamentaria ante la Presidenta del Parlamento Europeo", explica. "Requiérase a la representación procesal de Clara Ponsatí i Obiols a fin de que, en el término de cinco días, aporte justificación documental".

A falta de recibir esta documentación, el magistrado se dirige entonces al resto de partes personadas en la causa para que se pronuncien sobre la argumentación que esgrime la exconsellera.

La exconsellera y eurodiputada Clara Ponsatí ha ignorado este lunes al magistrado Pablo Llarena y no ha acudido al Tribunal Supremo. Llarena la había citado a las 11 de la mañana para comunicarle su procesamiento por un delito de desobediencia durante el 1-O, pero, según ha confirmado ella misma a través de redes sociales, se encuentra ya de vuelta en Bélgica: "Llueve en Flandes", ha tuiteado.

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