La elección de Aragonès como candidato de ERC a la Generalitat mete presión a JxCAT

La designación de Pere Aragonès como candidato oficial a presidir la Generalitat y encabezar la lista de ERC en las próximas elecciones catalanas mete presión a JxCAT, que todavía no ha tomado una decisión equivalente. Junts sigue sin designar a su líder autonómico a un año de que haya que acudir a las urnas. La ejecutiva del partido ha pedido a Carles Puigdemont que dé un paso adelante, como ya pasó en 2021, pero el expresident duda y todavía no ha tomado una decisión, aunque lo más probable es que se decante por declinar el ofrecimiento.

Así, mientras el PSC, con Salvador Illa, y ahora ERC, con Pere Aragonès, ya cuentan con candidatos claros, en JxCAT siguen haciendo cábalas. En 2021 la pareja electoral que formaron Carles Puigdemont y Laura Borràs salió doblemente derrotada. Primero, porque quien ganó las elecciones fue Illa. Y segundo, porque quedaron por detrás de Aragonès, que fue al final el que salió escogido presidente de la Generalitat.

En JxCAT no se dan por aludidos porque juegan con otros tiempos. Puigdemont cuenta con arrasar en las europeas y volver a ser escogido eurodiputado, según aseguran fuentes internas de su partido. Eso sería el 9 de junio. Y utilizar ese resultado para relanzar la formación en las catalanas, donde prefiere no ser candidato.

Mientras, en ERC enterraron ayer lo que sectores del partido denominan "la vía Junqueras". El propio Oriol Junqueras bendijo que Aragonès fuese el escogido. "Hoy es un día de alegría y de reafirmar nuestras convicciones. Para mí es un honor y un orgullo presentaros al actual y estoy convencido de que al futuro presidente de la Generalitat de Catalunya", ha declarado, señalando a Aragonès. Ambos líderes se esforzaron en el Congreso Nacional en dar una imagen de unidad para disipar rumores sobre diferencias internas.

El CEO asegura que Aragonès tiene un 54% de grado de aprobación por los encuestados, contra un 44% de Puigdemont

El riesgo para Puigdemont pasa porque Aragonès avance las elecciones. Las encuestas no son favorables al actual president. El último CIS, por primera vez en mucho tiempo, colocaba a JxCAT por delante de ERC, aunque su equivalente catalán, el CEO, asegura que Aragonès tiene un 54% de grado de aprobación por los encuestados, contra solo un 44% de Puigdemont.

Para Aragonès, la ventana de oportunidad en caso de querer adelantar los comicios se situaría en abril y hacer coincidir las elecciones vascas con las catalanas. Es algo que no ha pasado nunca, pero algunos sectores de ERC abogan por esta alternativa. Abril es un mes lluvioso y la gestión de la sequía puede desgastar mucho al gobierno catalán. Así que no sería lo mismo para Aragonès ir a las urnas en abril que en noviembre, con una Cataluña sedienta. De imponerse esa línea estratégica, la baza de Puigdemont de ganar las europeas desaparecería.

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De hecho, en JxCAT no esperan escoger candidato hasta mayo o junio, ya que cuentan que las elecciones catalanas serán o en diciembre de este año en curso o en enero de 2025. Se apoyan para este razonamiento en que Aragonès siempre ha negado que tenga intención de avanzar los comicios y ha expresado de manera repetida que quiere acabar la legislatura.

Otras alternativas

Otras alternativas pensadas, en este caso para desgastar al PSC, sería escoger un adelanto que coincida con fechas patrióticas para reanimar el fervor independentista, lo que podría llevar al actual president a avanzar elecciones para septiembre u octubre. Casi se habría acabado la legislatura y el independentismo acostumbra a creer que esos meses le son más favorables.

Puigdemont quiere volver a Cataluña con la amnistía y hacer una campaña presencial

Puigdemont desea poder hacer una campaña presencial gracias a la amnistía. Es decir, planea poder volver a Cataluña. Pero para ello precisaría que las cuestiones prejudiciales ante la justicia europea y los recursos ante el Tribunal Constitucional estuviesen resueltos. Eso sería más probable en diciembre que en abril, cuando es posible que todavía no se haya aprobado la ley.

El peso de las inhabilitaciones

En JxCAT también pesan las inhabilitaciones, además de la voluntad de Puigdemont, que será quien tomará la decisión. Con Laura Borràs y Jordi Turull inhabilitados, los cabeza de cartel más probables son el exconseller de Territori, Josep Rull, o el exconseller de Economía, Jaume Giró. Pero Turull también aspira a ser él el candidato y en su caso hay dudas de con qué rapidez podría afectarle la amnistía.