Puigdemont insiste en presentarse a la investidura y amenaza a Sánchez con "nuestros acuerdos en Madrid"

El líder de Junts, Carles Puigdemont ha hecho una nueva filigrana verbal: asegura que unas nuevas elecciones en octubre “sería algo muy negativo para Cataluña”, pero asegura que él se presentará a ser elegido president y le pide al PSC que se abstenga, pese a que los socialistas son los que han ganado las elecciones. Puigdemont sigue jugando con el mito de su retorno a Cataluña “me presentaré y estaré allí”, ha prometido. Puigdemont intenta llevar a Cataluña hacia el bloqueo pero sin querer aceptar la responsabilidad que ello supondría.

La palanca para que el PSC aceptase esta insólita propuesta es la relación de Junts con el PSOE. “¿Lo que negociamos con el PSOE en Ginebra, el PSC votará en contra en el Parc de la Ciutadella? Si hubiese un acuerdo del PP con el PSC no tendría sentido nuestros acuerdos en Madrid”, ha asegurado. el candidato de JxCAT.

“Es posible un Govern con un liderazgo fuerte independentista, si se sigue en contacto con el Gobierno español. Yo me veo presidente porque, si no yo no me presentaría a la investidura”, ha asegurado Puigdemont, que ha insistido en su idea peregrina de la noche electoral, como una manera de ganar tiempo antes de aceptar su derrota electoral.

Puigdemont no llamó anoche a Salvador Illa para felicitarle por su victoria electoral. “No tengo su teléfono”, ha asegurado hoy en la rueda de prensa desde Argelès, en el sur de Francia. “Él tampoco tiene el mío”, se ha excusado tras recordar que anoche le felicitó de manera pública.

Para Carles Puigdemont, “descartada la opción de un tripartito por la propia ERC no hay posibilidad, excepto que hubiese una alianza contranatura en el entorno del candidato socialista. Nosotros descartamos la sociovergencia si el interés es repetir las elecciones, nosotros creemos que no”.

Puigdemont asegura que “una repetición electoral a nosotros nos ayudaría, podríamos estar en la calle, salir en las fotos del último día de campaña –gracias a la amnistía, que no ha mencionado en la rueda de prensa– en un contexto así sería muy mala noticia una repetición electoral”.

Primeros contactos con ERC

“Ya hemos tenido los primeros contactos con ERC, pero estamos muy lejos de establecer un marco negociador estable. Quiero trasladar una reflexión estratégica del independentismo. Ahora toca una reflexión profunda, de por qué tanta gente se ha quedado en casa”, ha lamentado Puigdemont, que se ha quejado de los miles de votos que se han “desperdiciado” en la circunscripción de Barcelona.

Puigdemont ha insistido en que la clave es mantener conversaciones con el PSOE y lo que denomina “el acuerdo de Bruselas”, dejando caer que una presidencia de Salvador Illa con el apoyo del PP violaría este acuerdo, planteando de manera subrepticia que dejaría caer el Ejecutivo de Pedro Sánchez en caso de no alcanzar él la presidencia. Se vuelve así al marco de "las jugadas maestras", piruetas muy forzadas que eran el pan de cada día en los años duros del procés.

Rehacer puentes

Para el expresident la clave para pro rehacer los puentes entre Junts y ERC, que ahora considera “muy débiles”. Por eso “queremos hacer una propuesta catalana y con quién tenemos cosas a compartir” ha insistido el candidato postconvergente.

Para justificar esta situación, Carles Puigdemont argumenta que “la razón por la que nosotros tenemos más opciones que el PSC es porque si hablamos de gobiernos coherentes, Illa solo tiene 48 diputados. Y nosotros tendríamos entre 55 y 59 –contando los 4 de la CUP–. Tendríamos más fortaleza parlamentaria, Y que abocaría a Cataluña a una situación similar que la que hay en el Ayuntamiento de Barcelona”.

Puigdemont ha presionado al PSC para que se le pregunte “si aquel acuerdo de no aceptar los votos de la ultraderecha sigue siendo vigente o no”, recordando que solo una abstención de Vox permitiría una reelección de Illa.