JxCAT contacta con ERC para controlar la mesa y votar antes investir a Puigdemont

JxCAT busca a ERC para controlar la Mesa del Parlament y probar suerte con la investidura de Carles Puigdemont, antes incluso de que el candidato socialista Salvador Illa pudiese intentarlo, según explican fuentes conocedoras de ambos partidos. Puigdemont desea arrebatarle a Illa el primer turno para ser investido, aunque no cuenta con los votos necesarios para alcanzar la presidencia. Pero incluso para un mero intento necesita el respaldo de los republicanos, que no ven del todo clara la jugada, la cual además precisaría una pasividad del PSC poco probable, ya que los socialistas catalanes también quieren la presidencia de la Cámara catalana para ellos.

JxCAT tendrá en el Parlament 35 diputados, siete menos que el PSC, con 42. Si ERC aceptase esta alianza independentista para la constitución de la Mesa del Parlament el próximo 10 de junio, tras las europeas, aportaría 20 escaños más. El esquema que barajan desde JxCAT es dos miembros de la Mesa para su formación, uno para ERC y otro para los comunes. Lo bastante como para obtener la mayoría de un órgano que tiene siete miembros.

Se trata de unos primeros contactos y no de una negociación, que además se llevan a cabo de la manera más discreta para no interferir en la campaña de las europeas, según explican fuentes de ambas formaciones.

JxCAT se aseguraría la presidencia del Parlament y, por tanto, la potestad de escoger quién sería el primero en optar a la Presidencia de la Generalitat: en este supuesto, Puigdemont y no Salvador Illa, que debería esperar a un segundo turno. Esto daría la oportunidad a Puigdemont de captar todo el protagonismo de cara al debate de investidura que debería celebrarse el 25 de junio, para cuando prevé volver a Cataluña, ya con la ley de amnistía en vigor.

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Se descarta que Puigdemont no resultaría escogido. Pero tendría los votos de ERC (20) y JxCAT (35) y tal vez lograría los de la CUP (4) y Aliança Catalana (2). En total, 61, lejos de los 68 necesarios para llegar a la presidencia, pero lo bastante para captar todos los focos mediáticos durante una semana.

ERC desconfía de la propuesta por varias razones. Teme que no sea suficiente votar a Puigdemont primero para luego tener las manos libres para votar por Salvador Illa cuando se pueda celebrar una segunda votación, alrededor del 25 de agosto. También que una vez que hayan copado la presidencia del Parlament, JxCAT fuerce el bloqueo primero y una repetición electoral para mediados de octubre después, tal y como ha estado buscando el líder de Junts desde el principio.

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El argumento de Junts es que Puigdemont necesita ese último momento de gloria antes de retirarse de la primera línea política y dejar el Parlament. Pero en ERC recelan y temen que el expresident esté buscando una repetición electoral para la que los republicanos no tendrían un candidato, con Pere Aragonès retirado de la primera línea y Oriol Junqueras sin poder presentarse por la inhabilitación que pesa sobre él.

Los temores de ERC

De manera oficial, ERC aseguran que no temen a una repetición electoral. Pero eso solo es cierto a medias. ERC tiene fondos para una repetición electoral, mientras que JxCAT está exhausto financieramente. Pero sin candidato, el riesgo para los republicanos de perder de cuatro a seis diputados sobre los veinte que ya tienen es real. Y en ese sentido, nada que ganar.

En JxCAT es todo lo contrario. No tienen dinero, la campaña de las europeas está siendo de una austeridad solo comparable con la de Cs, pero cuentan con el mejor candidato posible: el propio Puigdemont.

El primer contacto con ERC lo ha hecho Turull mientras que Puigdemont se ha inhibido

Además, Carles Puigdemont no se ha mojado en estos contactos iniciales, según explican fuentes cercanas a los republicanos. Solo lo ha hecho Jordi Turull, secretario general de Junts. En ERC ven más interés en el PSC que por parte de JxCAT, según explican fuentes de los republicanos. Y las aritméticas posibles dan más argumentos al socialismo catalán que a un independentismo que, tras las elecciones del 12-M, va de capa caída.

Comisión negociadora

Como el PSC, ERC también ha nombrado su comisión negociadora, que estará encabezada por la secretaria general, Marta Rovira. También formarán parte Marta Vilalta, Josep María Jové, Oriol López y Juli Fernández.

Sea cual sea la opción por la que se acaben decantando los republicanos, la negociación acabará pasando por Ginebra, donde reside Marta Rovira, que ha copado el grueso de una decisión que intenta que luego Oriol Junqueras pueda lavarse las manos para recabar en noviembre el respaldo de las bases y seguir liderando el partido.

En todo caso se trata de movimientos muy preliminares. Se prevé que las negociaciones de verdad no empezarán hasta la semana que viene. Se trata solo de lo que se intuye en las primeras aproximaciones.