Es noticia
Moncloa y PSC negocian con ERC cómo aislar a Puigdemont y salvar los PGE de Sánchez
  1. España
  2. Cataluña
Se busca investir al líder del PSC en agosto

Moncloa y PSC negocian con ERC cómo aislar a Puigdemont y salvar los PGE de Sánchez

La negociación clave para la legislatura de Pedro Sánchez pasa por Cataluña. Si se logra el respaldo para investir a Illa, habrá luz verde a los Presupuestos Generales del Estado

Foto: El primer secretario del PSC, Salvador Illa. (EFE/Andreu Dalmau)
El primer secretario del PSC, Salvador Illa. (EFE/Andreu Dalmau)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Moncloa y el PSC están negociando con ERC para investir a Salvador Illa presidente de la Generalitat durante este mes de agosto, según explican fuentes de los socialistas y los republicanos. Para ERC, el incentivo radica en aislar a Carles Puigdemont, desactivando buena parte de su capital político. Para los socialistas, se trata de salvar los Presupuestos Generales del Estado para 2025, que son los que necesita Pedro Sánchez para garantizarse una legislatura larga. Por eso, la marcha de las conversaciones esta semana decidirá buena parte del futuro político de la actual Presidencia española. Según ERC, las conversaciones son "fluidas" y avanzan a "buen ritmo".

Los negociadores por parte de ERC son la secretaria general del partido, Marta Rovira, acompañada de Marta Vilalta, Josep María Jové, Oriol López y Juli Fernández. Por el lado socialista catalán están Salvador Illa; la alcaldesa de Sant Boi, Lluïsa Moret, y la portavoz en el Parlament, Alicia Romero. Mientras que desde Madrid participan el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

La parte del león de la negociación es la nueva financiación autonómica, pero también hay áreas vinculadas a las infraestructuras y el catalán, que son las que más están avanzando. Josep Maria Jové manifestó el pasado viernes que "le chirría" la propuesta de consorcio tributario para recaudar el 100% de los impuestos en Cataluña que los socialistas habían puesto sobre la mesa, como adelantó este diario.

Conscientes de ello, los socialistas van a redondear la propuesta con dos añadidos: un nuevo sistema de financiación autonómica que respete más el principio de ordinalidad –que las CCAA que más pagan, luego no sean las que menos fondos perciben– y ejecutar lo que ya se pactó con ERC: la condonación de casi 15.000 millones de deuda catalana del FLA.

Foto:  La secretaria general de ERC, Marta Rovira. (EFE/Siu Wu)

Tanto ERC como el PSC asumen que el grueso de estos acuerdos no pasará de una carta de intenciones, en especial el cambio de modelo de financiación autonómico, que tendrá que firmar el nuevo gobierno de Salvador Illa cuando llegue a constituirse, si al final lo hace. Un ejecutivo en funciones como el de Pere Aragonès no podría firmar un pacto de ese calado.

Además de la financiación, la portavoz de ERC, Raquel Sans, ha asegurado que se está trabajando también en la autodeterminación, una mejora del estado del bienestar y un acuerdo sobre la defensa del catalán.

Incentivos para ERC

En ERC recelan del coste de pactar con el PSC, pero cada vez se impone más la idea de que aceptar las presiones de Puigdemont es peor para la formación a medio plazo. En cambio, investir a Illa implica ganar cuatro años para recomponerse y encontrar un nuevo liderazgo a partir del congreso de noviembre. ERC está sometido a una fuerte presión por parte de Junts y de Puigdemont para que no cierre este acuerdo, como pasó este fin de semana en Waterloo.

El otro gran incentivo es diluir el peso político de Puigdemont. El expresident siempre se ha crecido en la inestabilidad política. Por eso le beneficia una repetición electoral, que es justo lo que más dañaría a ERC. Como apunta una fuente de los republicanos, en el fondo volver a las urnas solo beneficiaría a Puigdemont, porque una nueva votación perjudica incluso a Junts como partido. Solo Aliança Catalana, el grupo ultraderechista independentista liderado por la alcaldesa de Olot, Sílvia Orriols, saldría ganando de la situación que buscan generar desde Waterloo.

ERC ya está en contra del abrazo del oso de Junts que supone la candidatura unitaria. En eso es en lo poco que coinciden Marta Rovira y Oriol Junqueras. Pero, aun así, hacer presidente a Salvador Illa a muchos les parece un trágala que a los 8.700 militantes de base que tendrán que refrendar el acuerdo final se les hace bola. También hay el riesgo de que esa militancia castigue a la dirección del partido por el escándalo de los carteles contra los hermanos Maragall.

Si el pacto prospera, el pleno para investir a Illa será el 14 o el 18 de agosto

ERC quiere cerrar el acuerdo antes del 30 de julio. Tras un curso agotador, muchos cuadros de los republicanos y de los socialistas querrían que la votación de las bases fuera a principios de agosto y la investidura de Illa el 14 de agosto, para así luego poder iniciar el descanso estival. Sin embargo, en caso de que ERC se decante por el "sí" pueden necesitar más tiempo para convencer a los militantes de base, lo que llevaría el pleno clave al 18 o 19 de agosto. Sin apurar los plazos legales.

A corto y a medio

A medio plazo, el interés de ERC como partido parece claro: dejar que Illa gobierne en solitario, que el PSC se desgaste y obligar a Puigdemont a retirarse, ya que el expresident no se convertiría en líder de la oposición por mucho que volviese a Cataluña. Sin Puigdemont, Junts perdería su principal activo político y se abriría una carrera sucesoria de final incierto.

Y este es uno de los problemas que afronta la negociación entre las partes: Pedro Sánchez cobrará de manera inmediata los réditos de un acuerdo con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. Sin embargo, tanto ERC como el PSC solo verán sus ganancias al pasar los años: la dilución del liderazgo de Puigdemont, la nueva financiación autonómica o cerrar la crisis en la formación de los republicanos.

Foto: Pere Aragonés y Salvador Illa en el Parlament de Cataluña. (EFE/Quique Garcia)

Por su parte, Junts tiene puesto su objetivo en presionar a ERC para que no firme el acuerdo. O en su defecto, para que, al final, Marta Rovira y los cuadros del partido den libertad de voto a sus militantes y que dejen que el acuerdo descarrile.

Moncloa y el PSC están negociando con ERC para investir a Salvador Illa presidente de la Generalitat durante este mes de agosto, según explican fuentes de los socialistas y los republicanos. Para ERC, el incentivo radica en aislar a Carles Puigdemont, desactivando buena parte de su capital político. Para los socialistas, se trata de salvar los Presupuestos Generales del Estado para 2025, que son los que necesita Pedro Sánchez para garantizarse una legislatura larga. Por eso, la marcha de las conversaciones esta semana decidirá buena parte del futuro político de la actual Presidencia española. Según ERC, las conversaciones son "fluidas" y avanzan a "buen ritmo".

PSC Salvador Illa Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Marta Rovira Pedro Sánchez Carles Puigdemont Noticias de Cataluña
El redactor recomienda