Cataluña gastará otros 40 millones de euros en las elecciones si Illa no logra ser investido

La repetición de elecciones en Cataluña supondrá un gasto que ronda los 40 millones de euros en la organización del evento. Eso es lo que la Generalitat se acaba de gastar en las elecciones autonómicas del 12 de mayo. Si hay bloqueo de la situación y se repiten elecciones el próximo octubre, se pondrá de nuevo en marcha un mecanismo automático que obliga a repetir el gasto electoral: otros 40 millones de euros se irán por el desagüe debido a la imposibilidad de los partidos de ponerse de acuerdo.

La mayor parte del dinero es para pagar la organización y horas extras de los miles de funcionarios que han de trabajar, así como dietas y subvenciones a los partidos políticos. Estas últimas rondan los 12 millones de euros, mientras que la partida destinada a seguridad, a cargo de los Mossos d’Esquadra, con miles de agentes movilizados, supera con creces los 6 millones de euros. Las dietas de los funcionarios y los seguros se disparan a unos 2 millones de euros. También el personal de los colegios que han de abrir o los anticipos a los Ayuntamientos, suman partidas que se sitúan en torno a los 5 millones de euros.

En las elecciones celebradas el pasado 12 de mayo, hubo 9.139 mesas electorales con 82.251 miembros, entre titulares y suplentes. La remuneración con 70 euros de cada uno de los miembros de una mesa eleva el gasto en esta partida a casi 2,9 millones de euros.

Pero, al margen, hay otros gastos en material y logística a los que se ha de hacer frente y sin cuya concurrencia no sería posible materializar los comicios: ahí está la impresión y distribución del material electoral, de papeletas y sobres, de urnas, el diseño de campañas de publicidad y la inserción de esas campañas en medios de comunicación, por ejemplo.

La publicidad y la logística

Una de las partidas más onerosas es la que hace referencia a la inserción de los obligatorios anuncios en los medios de comunicación o en espacios públicos anunciando los comicios y animando a votar. En las últimas elecciones, la campaña de inserción en medios costó 3,5 millones de euros. Se la llevó Carat España. A la inserción pura y dura hay que añadir el encargo de la conceptualización, creatividad, diseño, gestión y seguimiento de la creatividad de la campaña institucional para informar de los comicios, un contrato que fue adjudicado a Charles Publicitat por 176.127 euros, una empresa que ha participado en los últimos años en varios diseños de campañas publicitarias para varias consellerias de la Generalitat.

También hay otra partida importante: la que cobró Indra para el servicio de asistencia e informatización del sistema de recogida, procesamiento y difusión de datos provisionales y definitivos”. Esa partida ascendió este mes de mayo a 3.005.928 euros.

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El material electoral también se lleva un buen pico. La partida más voluminosa en este campo es la del suministro de papeletas electorales. El 12 de mayo pasado, el coste de las papeletas fue de 1.435.500 euros, adjudicados a la firma vasca Impresiones Transkrit. En este caso, el informe justificativo lleva fecha del 19 de marzo y fue realizado por la dirección General de Relaciones Institucionales y con el Parlament, dependiente del Departamento de Presidencia. La adjudicación fue realizada por el procedimiento de emergencia debido a que un procedimiento ordinario hubiese “puesto en riesgo el desarrollo normal del proceso democrático, por lo que se considera que existe la causa de peligro grave”.

Obras en el Parlament

Los sobres electorales, por su parte, costaron 218.335 euros. Fueron adjudicados a la empresa Emilio Domenech Mirabet SA. Otro de los lotes fue la impresión de manuales de instrucciones para los miembros de las mesas electorales. En este cometido, se concedió otro contrato de emergencia a Pharma Prospect por un monto de 72.843 euros. El cuarto lote de este contrato era el de impresos electorales, adjudicado también a Pharma Prospect por 96.687 euros.

Las elecciones se llevan por delante también otros gastos en infraestructuras. El 12 de mayo, por ejemplo, solo en la adecuación de espacios que debían acoger el centro de difusión de datos del Govern costó la friolera de 359.562 euros. Aunque estos espacios se ubicaban dentro del propio Parlament, hubo que adecuarlos a las necesidades de los responsables gubernamentales. Las salas del edificio de la Cámara se adecúan en cada proceso electoral, por lo que son ubicaciones no permanentes que se desmantelan al día siguiente de los comicios y se han de volver a montar en cada una de las convocatorias. El contrato para este cometido se lo llevó la firma Eikonos, una empresa habitual de la contratación con Administraciones.

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También hubo la adecuación de espacios para el escrutinio. El hotel elegido —con su catering— fue el Duques de Bergara, al lado de la céntrica plaza de Cataluña, de la cadena Catalonia. El alquiler costó a las arcas públicas 21.725 euros. También hubo contratos como los kits para personas invidentes o con discapacidad, que ascienden a 23.621 euros, además de gastos algo menores para material de oficina o transportes de paquetería, cuyos contratos ascienden cada uno de ellos a varios miles de euros.