Montero adelanta 250M a Ximo Puig para aliviar la caja pero tendrá que hacer recortes

El 'president' de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, arrancó este lunes a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, un adelanto en el pago extraordinario del Fondo de Liquidez Autonómica correspondiente al exceso de déficit de 2018. El pago se efectuara, según el acuerdo, antes del 9 de octubre, día de la Comunidad Valenciana. La cuantía para el cuarto trimestre, 250 millones, permitirá a la Administración regional aliviar su tesorería a la espera de la llegada de las entregas a cuentas, que la ministra insiste en que liberará antes de fin de año para el conjunto de las autonomías y de las que a la valenciana le corresponden unos 450 millones de euros, además de otros 280 de liquidaciones pendientes de IVA.

El encuentro entre la responsable de las cuentas del Gobierno en funciones de Pedro Sánchez y el barón socialista se produjo a petición del segundo, muy cuestionado por su socio Compromís por haber rebajado el tono reivindicativo frente al Ejecutivo central, en un ambiente preelectoral en que los territorios controlados por el Partido Popular están reclamando el pago de los anticipos a cuenta de 2019, un dinero con el que contaban pese a que los Presupuestos Generales del Estado de este año no fueron aprobados por el Congreso. Montero justifica la demora en un informe de la Abogacía que cuestiona la legalidad de que un Gobierno en funciones actualice el gasto. No obstante, sostiene que está buscando "soluciones" y que pagará antes del final del trimestre.

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En el caso valenciano, el anuncio del adelanto del FLA extraordinario hay que interpretarlo como un gesto después de que la semana pasada Montero admitiese las dificultades por las que están pasando los territorios peor financiados, como son la Comunidad Valenciana y Murcia, que también incumplió el déficit en 2018 y le corresponde recibir esa aportación para tapar su agujero contable.

La paga extra del FLA suele llegar normalmente en el mes de diciembre, por lo que el desembolso en octubre supondría insuflar oxígeno a las cuentas autonómicas valencianas a la espera del resto del dinero. Esta inyección está vinculada a la elaboración de un Plan Económico Financiero que incluye ajustes en el gasto que sirvan para compensar el exceso de déficit del ejercicio anterior. La semana pasada, la secretaria de Estado de Hacienda, Inés Bardón, concedió al 'conseller' Vicent Soler una prórroga en la entrega de dicho plan. Su elaboración está generando muchas tensiones en el seno del Gobierno valenciano en los tres socios: PSPV-PSOE, Compromís y Podemos.

Según trasladaron fuentes de la Generalitat, además de los 450 millones de anticipo a cuenta pendientes de recibir, a la Comunidad Valenciana le corresponden 278 millones adicionales por la actualización de la financiación ordinaria. Así figura en los números del ministerio. Ximo Puig insistió en que el Gobierno ha garantizado la Tesorería de la Administración regional y que esta "cumplirá con sus compromisos en 2019". No obstante, se da por descontado que Soler tendrá que negociar ajustes con el resto de integrantes del Consell para cuadrar los números. No solo porque así lo exige la elaboración del Plan Económico Financiero, sino porque la Generalitat no está cumpliendo con la previsión de ingresos que hizo en los presupuestos autonómicos para 2019 que aprobó en otoño del año pasado, con claros tintes expansivos y mucho aroma preelectoral con vistas a los comicios autonómicos del 28 de abril y municipales de mayo.