El abogado de Camps que aspira a controlar el Valencia asesora al jefe de Vox contra Mestalla

Un abogado con intereses en el Valencia Club de Fútbol está asesorando al portavoz de Vox y segundo teniente de alcalde en el Ayuntamiento de la ciudad, Juan Manuel Badenas, en la estrategia para torpedear el plan trazado por la alcaldesa, la popular María José Catalá, para tratar de resolver el atasco urbanístico del Nuevo Mestalla. Pablo Delgado, también letrado defensor del expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, es uno de los autores de la moción que este jueves presentó Badenas en la Comisión de Urbanismo del consistorio, que no ha prosperado, y que en la práctica significaría anular y paralizar sine die todo el desarrollo de la operación de cambio de sede del club, cuya imagen icónica actual es el esqueleto inacabado del Nuevo Mestalla en la Avenida de las Cortes Valencianas.

Según ha podido comprobar El Confidencial a partir de los metadatos del documento presentado por Badenas y difundido entre los medios de comunicación, Pablo Delgado es uno de los autores materiales de la moción, junto con el asesor grupo municipal, Jorge Mestre. Las propiedades del archivo elaborado en Word recogen el nombre de Delgado entre los redactores del texto. Esta colaboración revela un posible conflicto de intereses entre uno de los miembros del equipo de gobierno municipal, cuya actuación debería estar regida por la independencia, y el colaborador de Marea Valencianista, la plataforma liderada por el consultor Miguel Zorío que está litigando contra el desarrollo y conclusión del plan Mestalla y que pretende hacerse con la propiedad de la sociedad anónima deportiva.

El abogado admitió a El Confidencial que preparó "un borrador" porque se le pidió el favor y negó que tenga "interés" personal en el Valencia Club de Fútbol. También negó haber cobrado ninguna cantidad por haber participado en la elaboración del texto presentado como moción por Badenas. "Tengo un deseo de que Peter Lim se vaya. El único interés que tengo en el Valencia es que aquellos que han incumplido se vayan del Valencia", señaló Delgado. "Me extraña mucho que el resto de grupos en lugar de valorarla positivamente se junte para favorecer los intereses del Valencia CF y los intereses urbanísticos de aquellos que le han comprado derechos en las zonas del Valencia", dijo sobre el rechazo de la moción por parte de PP, PSPV-PSOE y Compromís, que consensuaron su propio texto, y el compromiso de venta de suelo terciario anexo a Nou Mestalla firmado entre la sociedad anónima deportiva y Atitlan.

Delgado admite haber preparado "un borrador" pero asegura que su único interés es "que Lim se vaya"

A preguntas de este periódico, fuentes del partido Vox en Valencia se limitaron a señalar que desconocían la iniciativa de la moción de Badenas y, por tanto, los detalles de su desarrollo. Badenas, según las mismas fuentes, habría presentado la moción en la Comisión de Urbanismo de forma unilateral, sin solicitar autorización a la dirección del partido y con el desconocimiento del resto de concejales. El movimiento ha causado mucho malestar en la cúpula de la organización de Abascal, que anoche presionaba a Badenas para que entregue el acta y dimita como concejal. Catalá y el PP cuentan con trece ediles y Vox tiene otros cuatro. La mayoría son 17. Una salida de Badenas al grupo de no adscritos le daría la llave de la absoluta. Este periódico se puso en contacto directo con el portavoz voxista para solicitar una explicación sobre la participación del abogado en la redacción de su moción, pero al cierre de esta edición no había contestado los mensajes.

Zorío y Delgado han comparecido conjuntamente en diversas ocasiones para presentar acciones judiciales contra el club y contra el propio Ayuntamiento de Valencia. Marea Valencianista ha presentado varias demandas por la vía Contencioso-Administrativo contra el consistorio por "ilegalidades" en la tramitación de licencias, aunque por ahora no han prosperado. El rastro informático de la moción revela la colaboración de un concejal con competencias de gestión con un grupo de personas con conflictos jurídicos abiertos con la Administración local. Delgado asegura que ha colaborado, no solamente con Badenas, sino que con cualquier persona que le ha pedido ayuda. "Estoy en Tertulia Torino, estoy en Espíritu del 86. Siempre he defendido al Valencia Club de Fútbol. Al incumplidor no se le premia, no se le regala nada. El único interés que tengo es que el Valencia vuelva a los valencianos", señaló.

Este grupo, cuya estrategia está pasando por torpedear y complicar la situación administrativa con el argumento de no dar facilidades a Peter Lim, lo que podría conllevar una devaluación del propio club, incluye también al que fue fundador y ex-CEO de Gedesco Finance, Antonio Aynat. El actual directivo de la prestamista compartida con el fondo Carlyle, Toro Finance, firmó el pasado 22 de diciembre una carta de intenciones en la que mostraba su compromiso de proveer de financiación por valor de 250 millones de euros a Miguel Zorío para cubrir una oferta a Peter Lim por el paquete mayoritario de acciones del club valencianista. Se da la circunstancia de que Pablo Delgado también es abogado de Aynat y de su sociedad patrimonial Venalta Capital en las causas abiertas por la querella del fondo americano JZ International por el presunto vaciamiento de Gedesco y en el conjunto de procedimientos judiciales y de arbitrajes, tanto penales como mercantiles, que tiene en marcha.

No obstante, Pablo Delgado aseguró a El Confidencial que él no ha participado en la oferta reciente de compra. Y que la única vez que lo hizo fue cuando participó en una oferta que presentaron Broseta y Cerberus. Fue la oferta que compitió con la de Peter Lim y que fue rechazada. "Participé como abogado", concretó. "He presentado ofertas lícitas y siempre he defendido al Valencia Club de Fútbol", volvió a insistir.

Vox dice que desconocía la intención de Badenas de presentar la moción en Urbanismo

En la moción presentada este miércoles, el portavoz de Vox proponía bloquear todas las licencias de obras a la sociedad anónima deportiva, derogar la figura administrativa (ATE) que otorgó los beneficios urbanísticos y el aprovechamiento residencial y terciario de la nueva y la vieja parcela del estadio y modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para deshacer la reclasificación de usos. La propuesta no ha salido adelante, finalmente, porque Catalá se ha apoyado en PSPV-PSOE y Compromís para armar una mayoría suficiente y sacar adelante un plan de finalización del estadio, que otorga las licencias de construcción a Peter Lim, pero condicionadas a la ejecución de un estadio para 70.000 espectadores, a la presentación de garantías por el 100% del coste de la obra si se paran los trabajos e incumplen los plazos y al ingreso en las cuentas municipales del dinero necesario para ejecutar el polideportivo de Benicalap, una de las cargas urbanísticas del proyecto.

También se acuerda despojar a Peter Lim de los aprovechamientos urbanísticos si incumple los compromisos. Tras todas estas salvaguardas subyace la desconfianza acumulada hacia las intenciones reales del magnate de Singapur. Se busca poner barreras para impedir que pueda poner en el mercado y obtener las plusvalías de la parcela del viejo estadio sin haber cumplido con sus obligaciones. Pese al consenso existente entre el PP y los grupos de la oposición, Badenas optaba este miércoles por presentar su propia iniciativa, con el sello de Pablo Delgado, en cuyo despacho trabaja Camps, y dirigida a marcar distancia con el partido con el que comparte gobierno local de coalición. Esta crisis municipal entre PP y Vox se produce en el contexto de la ruptura decretada por el partido de Santiago Abascal con los populares en los gobiernos autonómicos que compartían, como el de la Generalitat valenciana que preside Carlos Mazón.