Es noticia
Madrid Nuevo Norte recicla sus residuos y reducirá la huella de carbono
  1. España
  2. Madrid
MEDIO AMBIENTE

Madrid Nuevo Norte recicla sus residuos y reducirá la huella de carbono

¿Cómo se compaginan políticas de Madrid 360, como las Zonas de Bajas Emisiones, con estas actuaciones urbanísticas? Aplicando la conocida "economía circular"

Foto: Ayuso en la presentación de actuaciones proyectadas en Madrid Nuevo Norte. (EFE/Comunidad de Madrid)
Ayuso en la presentación de actuaciones proyectadas en Madrid Nuevo Norte. (EFE/Comunidad de Madrid)

Madrid Nuevo Norte es una de las transformaciones urbanísticas más importantes de la Europa de este siglo. El soterramiento de las vías ferroviarias, parcelas industriales y equipamiento en desuso vinculado a la actividad de la estación de Chamartín. Un descomunal descampado que parte en dos el norte de la ciudad y cuya herida cicatrizará con la construcción de zonas verdes, viviendas, oficinas y equipamiento urbano.

Según las primeras previsiones, a finales de esta década Madrid Nuevo Norte tendrá sus primeros habitantes y será en los años 40 cuando se dé por finalizado el proyecto. Más de 20 años de obras, camiones, hormigoneras y, por tanto, emisiones asociadas a este tipo de actividad.

Foto: Vista de la zona norte de la capital. (EFE)

Ante este planteamiento necesario en la evolución de las ciudades, donde Madrid necesita terreno para crecer y los barrios separados por la fractura ferroviaria unirse, ¿cómo se evitan cantidades ingentes de emisiones de gases contaminantes que perjudiquen la salud de los madrileños?

¿Cómo se compaginan políticas de Madrid 360, como las Zonas de Bajas Emisiones, con actuaciones urbanísticas que serán estudiadas dentro de unos lustros en los libros de Arquitectura? La respuesta es sencilla: aplicando la definición de “economía circular” a la faraónica obra.

placeholder La presidenta de Adif, Isabel Díaz Ayuso, José Luis Martínez-Almeida y el presidente de Distrito Castellana Norte en la firma del Convenio Marco de Madrid Nuevo Norte. (EFE/Javier Lizón)
La presidenta de Adif, Isabel Díaz Ayuso, José Luis Martínez-Almeida y el presidente de Distrito Castellana Norte en la firma del Convenio Marco de Madrid Nuevo Norte. (EFE/Javier Lizón)

Para minimizar las “molestias medioambientales” de la creación de Madrid Nuevo Norte se va a construir una planta temporal de tratamiento de residuos que reciclará y reutilizará hasta el 92 por ciento de los escombros generados en la actuación urbanística.

Los residuos de la obra y de las infraestructuras clave van a tener una segunda vida, porque se emplearán para usos menores, lo que permitirá la reducción de la huella de carbono en la gestión de los residuos.

¿Qué residuos se reciclan?

Hormigón, ladrillos, materiales cerámicos y metálicos, mezclas bituminosas, plásticos, maderas, tierras y piedras, así como todo tipo de restos de residuos de la construcción y demolición. Un ejemplo magnánimo de economía circular en una obra de ingeniería civil del siglo XXI a la que se puede aplicar uno de los refranes populares más conocido: “Del cerdo se aprovecha todo, hasta los andares”.

Foto: Regalos navideños a pie de árbol. (Unsplash/I. Martin)

“Un residuo de demolición y construcción se puede reutilizar perfectamente, después de reciclar, separar y clasificar”, como explica Rosario García Giménez, catedrática del Departamento de Geología y Geoquímica de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma. Este proceso “ahorra un importante consumo de materias primas y, sobre todo, de consumo de energía”.

En la fabricación de cemento de primera generación se emplean calizas y arcillas que se calientan hasta los 1.500 grados centígrados para desprender el CO2 que la caliza lleva en su composición. En este proceso químico, que la humanidad lleva haciendo siglos en las caleras, la fabricación de una tonelada de cemento expulsa a la atmósfera una tonelada de dióxido de carbono.

El “cemento ecológico” nace del compuesto que ya ha sido cemento anteriormente

Esta cifra nos da una idea de la importancia de aplicar la ciencia en la creación de nuevos materiales menos contaminantes. El “cemento ecológico” nace del compuesto que ya ha sido cemento anteriormente. Es parte del proyecto de investigación en el que trabaja la catedrática García Giménez. Estudios que han permitido crear nuevos materiales tan resistentes como el cemento y que no necesariamente se fabrican solo desde la combustión de calizas y arcillas o desde restos de construcción.

Por ejemplo, explica García Giménez, con “los lodos desechados por la industria papelera, después del proceso de reciclaje del papel, se pueden fabricar cementos puzolánicos”, igual de seguros y versátiles que los cementos convencionales y, además, “permite reciclar y reutilizar ese lodo maloliente de las papeleras y evitar que termine en unos vertederos”.

placeholder Fotograma del documental 'The Story of Plastic'. (EFE/Deia Schlosberg)
Fotograma del documental 'The Story of Plastic'. (EFE/Deia Schlosberg)

A modo de marmita manejada por el druida Panorámix, en las Aventuras de Astérix y Obélix, “se pueden hacer cementos igualmente válidos con los lodos de las depuradoras de las ciudades, de residuos agrícolas, de cenizas volantes procedentes de las centrales de carbón, etc. Los cementos ecológicos admiten componentes de diversa procedencia”.

Por tanto, del reciclaje del 92 por ciento del material de obra y desescombro de obras como Madrid Nuevo Norte y de la inversión en I+D+I, para que investigadores como Rosario García Giménez descubran nuevos materiales, depende alcanzar retos que hoy suenan a quimera como la neutralidad de emisiones de CO2 en Madrid en el año 2050 ("con llegar a un 70 por ciento de neutralidad, podemos estar satisfechos por lo conseguido", confiesa Rosario García Giménez. "El maestro cementero, gracias a la ciencia -dice-, puede fabricar casi todo lo que el cliente le pida".

Quizá el próximo paso, no muy lejano en el tiempo, sea la comercialización de cemento líquido para impresoras 3D que se instalen a pie de una gran obra, al lado de las plantas de reciclaje del material de desescombro. Veinte años de desarrollo de Madrid Nuevo Norte dan para muchos avances con los que frenar el cambio climático.

Madrid Nuevo Norte es una de las transformaciones urbanísticas más importantes de la Europa de este siglo. El soterramiento de las vías ferroviarias, parcelas industriales y equipamiento en desuso vinculado a la actividad de la estación de Chamartín. Un descomunal descampado que parte en dos el norte de la ciudad y cuya herida cicatrizará con la construcción de zonas verdes, viviendas, oficinas y equipamiento urbano.

Madrid Reciclaje Mundo sostenible
El redactor recomienda