Los empleados de las piscinas de Madrid están enfadados y anuncian huelgas en pleno verano

Eugenia lleva puesta una camiseta azul con el logo del Ayuntamiento de Madrid en la esquina superior izquierda. La mujer, con gafas de sol, se acercó este martes por la mañana a la Plaza de la Villa con su uniforme habitual de trabajo. A su alrededor, varias personas portaban pancartas y bocinas para protestar sobre la situación laboral de los empleados de los polideportivos municipales. Se trata de la tercera concentración de este tipo en lo que llevamos de verano.

"Hoy hay menos gente porque está la gente trabajando", continúa esta empleada. Eugenia lleva ocho años trabajando los sábados y domingos en el centro deportivo Wilfred Agbonavbare de Vallecas, pero teme quedarse en la calle a finales de 2024. "Mi puesto ha salido en la lista de plazas porque mi antigüedad no cuenta", explica a este diario. "Al ocupar una vacante de fines de semana contabilizo un 40% y no me dan los puntos para consolidar", continúa. Ella es una de los 400 afectados por el proceso de estabilización laboral de los polideportivos de Madrid.

Estos centros –69 de gestión directa y cinco de gestión privada– son especialmente solicitados durante la época estival por las piscinas. Por ello, y durante el fin de semana, los días 26 y 27 de julio llevarán a cabo una huelga de 24 horas para denunciar su situación. Esto sumaría un total de cuatro jornadas de paro en lo que llevamos del verano, coincidiendo con el pico de la demanda. Además, el martes de esa semana también se concentrarán frente a Cibeles para protestar durante el pleno municipal.

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Lo cierto es que estos acuerdos sirven para reducir la temporalidad de los empleos y, de hecho, las bases fueron acordadas por unanimidad entre los sindicatos con representación en la mesa y el Ayuntamiento de Madrid. El proceso se ajusta a la Ley 20/21; una norma impulsada por el Gobierno central con el objetivo de "situar la tasa de temporalidad estructural por debajo del 8% en el conjunto de las Administraciones Públicas españolas".

El quid de la cuestión es que una gran parte de los contratos de los polideportivos son fijos discontinuos durante el verano o de fines de semana, como el de Eugenia. Estos suman menos puntos en la experiencia laboral, pero pueden subir en la lista con otros méritos como acreditar cursos formativos. "Hay gente que lleva 16 años en la plantilla de verano y por no tener cursos, se va fuera", explica otro de los asistentes a la concentración de este martes. Quienes protestan aseguran que esto es una estrategia de "ERE encubierto". Por otro lado, se trata de una plantilla envejecida donde los más jóvenes rondan los 50 años

Desde el área de Personal y Hacienda del Consistorio. Fuentes del Ayuntamiento hacen hincapié en que los sindicatos mayoritarios –CCOO, UGT y CSIF– sí aprobaron dichas bases y que la administración está cumpliendo tanto con la ley de estabilización del Estado –la famosa 20/21– como con la ley del Deporte. Los afectados deberán presentarse al concurso, como todos los demás, y ver si consiguen acceder o no a una plaza.

De forma paralela, y mientras fuera continúan las bocinas, en el interior del edificio se celebraba la comisión del área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid. Uno de los temas tratados en la hora y media que duró el encuentro fue este conflicto laboral con los empleados de los polideportivos. De hecho, algunos de los afectados interrumpieron la comisión para exponer sus demandas; pero, en vista de que impedían la continuidad de la reunión, fueron expulsados de la sala. Fueron los concejales del PSOE y Más Madrid quienes trajeron las preguntas a la encargada del área, Sonia Cea.

La concejal de Más Madrid, Esther Gómez, recriminó a Cea que en lugar de "sentarse a negociar" con los huelguistas, el Consistorio optase por “poner candados”. Las últimas jornadas de paro por este conflicto se celebraron hace dos semanas: "Intentaron tapar la huelga modificando horarios de libranza y haciendo doblar turnos a los trabajadores a cambio de días libres", sentenció Gómez. La responsable del área explicó que, en este caso, "el uso recreativo de las piscinas no se encuentra considerada una actividad esencial", por lo que no iban a disponer de "servicios mínimos" como en otros aspectos. Por ello recurren a otras fórmulas que entorpezcan el uso y disfrute de los usuarios. Además, recordó que los temas de gestión de personal son competencia de otra área.

En la misma línea, la oposición señaló que los afectados están "recibiendo cartas a título informativo de que el cese se producirá con la incorporación de los nuevos funcionarios de carrera, que está previsto a la mayor brevedad posible, sin que nadie sepa muy bien qué significa eso". Eugenia, por el momento, todavía no ha recibido dicho escrito: "Después de tantos años y no he pasado a fijo, por lo menos que me dejen en la plaza donde estoy", reclama.