Almeida da luz verde a la francesa Brach para su hotel del gran lujo 5* en Gran Vía

Madrid tendrá un nuevo hotel 5 estrellas Gran Lujo. Un hotel que se sumará a la fiebre hotelera de la Gran Vía madrileña. El futuro establecimiento se ubicará en el número 20 de la famosa avenida, sobre un edificio adquirido por el fondo inmobiliario francés Zaka Investment a finales de 2019.

El Ayuntamiento de Madrid acaba de admitir a trámite y aprobar inicialmente el plan especial tramitado para este edificio que permitirá ampliar la oferta hotelera de gran lujo de la capital, que hasta hace apenas unos años apenas contaba con tres hoteles de gran categoría para los turistas más adinerados: el Mandarín Oriental Ritz, The Westin Palace o el Rosewood Villa Magna.

El edificio es propiedad de Zaka Investment, un 'family office' de origen francés detrás del que se encuentra Pierre Bastid

La oferta de los hoteles de lujo, sin embargo, se ha multiplicado desde el aterrizaje, en 2017, del Four Seasons, y tras él, siguieron sus pasos numerosas cadenas hoteleras de gran lujo y, actualmente, son ya más de una decena los hoteles de cinco estrellas, que suman 2.500 plazas hoteleras.

Gran Vía 20 y sus casi 60 habitaciones se sumarán, en los próximos meses, a esta larga lista. El edificio es propiedad de Zaka Investment, un family office de origen francés detrás del que se encuentra Pierre Bastid. Un nuevo hotel cinco estrellas gran lujo que operará bajo la marca Brach.

TE PUEDE INTERESAR

Otro hotel en Gran Vía: el número 76 tendrá 118 habitaciones a 210€/noche

E. Sanz

El edificio Gran Vía 20 fue construido en el año 1919 de acuerdo con el proyecto del arquitecto Pedro Jerónimo Mathet para el uso de casa de alquiler, uso que durante el pasado siglo XX fue paulatinamente transformado al de oficinas. En 1993, siendo titular la compañía de seguros La Estrella, se consolidó el uso terciario clase oficinas mediante una licencia urbanística que, además de la implantación del uso, supuso la rehabilitación y acondicionamiento general del mismo, tal y como recoge la memoria del proyecto.

Una década después, en 2002, fue aprobado definitivamente el Plan Especial Para el Control Urbanístico Ambiental de Usos (PECUAU) para el “establecimiento de uso de hospedaje en edificio exclusivo en Gran Vía 20”, con restaurante en planta baja, si bien se mantuvo su uso como oficinas. Hasta ahora. Ahora, el plan especial, por el que se regula el régimen de obras en el edificio, también se propone la ampliación de la superficie edificada del edificio, con el objetivo de mejorar sus condiciones de habitabilidad.

Fiebre hotelera en Gran Vía

Desde sus orígenes, la Gran Vía estaba llamada a revolucionar el mercado hotelero. "Desde la aparición de las primeras licencias de construcción, se observó que la Gran Vía iba a convertirse en uno de los pilares de la edad de oro alcanzada por la industria hotelera desde comienzos de la segunda década del siglo XX, que arrancaba de las inauguraciones del Ritz y del Palace, dos establecimientos cuyo lujo y suntuosidad eran desconocidos hasta entonces. Los hoteles que surgieron en la Gran Vía a partir de 1915 no podían competir con dos colosos de estas proporciones, pero sí superar en oferta de habitaciones y plazas a los de aires decimonónicos situados en torno a la Puerta del Sol y calles aledañas o a otros más recientes situados a lo largo de la calle de Alcalá en su tramo Sol-Cibeles", explica en su tesis Santiago de Miguel Salanova.

TE PUEDE INTERESAR

Gran Vía 60 acogerá un nuevo hotel después de años de abandono

E. Sanz

El primer establecimiento hotelero en Gran Vía fue el Hotel Roma, actual sede de Wow Concept, proyecto comercial de Dimas Gimeno. Construido en 1911, contaba con 135 habitaciones y contaba con "salas de baños y calefacción central; un magnífico hall de entrada, sala de fiestas y smoking-room, salón para señoras, bar, biblioteca, ascensores eléctricos y un moderno trottoir roulant o cinta transportadora para la subida de equipajes. Su mobiliario y decorado se definirían, además, por el mayor de los lujos posibles, al correr a cargo de la parisina Casa Dionard, que anteriormente había realizado el amueblado del Grand Hotel Astoria en la capital francesa", según Salanova.

"Desde el punto de vista hotelero, la Gran Vía de Madrid ha experimentado una exponencial transformación durante los últimos cinco años. La entrada de nuevas marcas de la mano de operadores internacionales de primer nivel ha propiciado la apertura y reconversión a hotel de un gran número de inmuebles ubicados en la céntrica calle de la capital", señalaba hace unos meses a El Confidencial Laura Hernando, managing director de Hotels de Colliers.

Esta consultora estimaba a finales de 2022 que la oferta hotelera se verá ampliada hasta las 4.100 unidades tras la apertura de los actuales proyectos hoteleros en desarrollo. Entre ellos, destaca la reconversión a hotel de lujo del emblemático Edificio Metrópolis por parte del Grupo Paraguas, la llegada de la francesa Brach o la apertura del futuro Curio Collection by Hilton en esquina con calle de la Montera.

Pero, además, otros dos hoteles cambiarán su uso a hotelero. Gran Vía 76, cuyos dueños, herederos del propietario original del inmueble, lo transformarán en un hotel de 100 habitaciones, mientras que Gran Vía 60, tras años de abandono, se transformará en otro establecimiento hotelero. Un boom hotelero que se ha extendido hasta la calle Alcalá, donde también se proyectan varios proyectos hoteleros y donde, por ejemplo, el Ayuntamiento de Madrid acaba de aprobar el hotel que proyectan los fundadores de Prosegur en el número 17.