Solbes, partidario de otorgar "ventajas" fiscales a la percepción de los fondos de pensiones vía renta

El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se ha mostrado partidario de otorgar "ventajas" fiscales a la percepción de los fondos de pensiones vía renta en lugar de vía capital.

Solbes, durante la clausura de la asamblea de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) subrayó que la reforma del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) mantendrá las ventajas especificas por la adquisición de vivienda y las que disfrutan los partícipes de los fondos de pensiones.

No obstante, matizó que en el capítulo de las desgravaciones por aportaciones a fondos de pensiones se pueden hacer "algunos retoques" para conseguir mayor coherencia y que pasan por otorgar "alguna" ventaja fiscal a la percepción en renta de los fondos de pensiones en lugar de percepción en forma de capital. Solbes matizó que esto no implicará perjudicar la percepción a través de capital, sino conseguir el "mejor equilibrio" posible en el impuesto.

El vicepresidente económico volvió a recordar que el problema del envejecimiento de la población es uno de los "grandes retos" a los que se enfrenta la Unión Europea y que esta situación generará "presiones" sobre el sistema público de pensión, al tiempo que subrayó que será un "gran problema" a largo plazo para las economías europeas.

Por ello, indicó que, ya que no existe una solución unitaria, es necesario abordar varios aspectos, que pasan por el saneamiento de las cuentas públicas, el incremento del empleo y el reforzamiento del ahorro a largo plazo, de modo que los jubilados puedan "complementar la pensión pública con una pensión privada".

Reglamento de IIC, para después de verano

Por otra parte, indicó que el reglamento de Instituciones de Inversión Colectiva (IIC) estará aprobado "probablemente" a la "vuelta del verano", ya que en breve se remitirá al Consejo de Estado y posteriormente se incorporarán las recomendaciones que éste haga. Solbes cree que no habrá un "gran debate" en el Consejo de Ministros sobre este asunto, ya que el reglamento es eminentemente técnico.

Solbes destacó la importancia de que las sociedades de inversión y los fondos participen en las juntas de accionistas de las compañías en que inviertan. "Las juntas serían más útiles si los gestores y fondos hiciesen acto de presencia con más frecuencia", aseveró.

Indicó que este reglamento es un proyecto "enormemente ambicioso" que puede ser "muy útil" para modernizar el sector y expresó su deseo de que tenga largo recorrido y "larga vida", ya que se mostró partidario de que las modificaciones legislativas relacionadas con la fiscalidad sólo se acometan cuando sean "absolutamente imprescindibles", con el fin de otorgar seguridad legal a los ahorradores e inversores.

Insistió en que la sobrerregulación está condenada al fracaso y subrayó que el reglamento refleja una posición "enormemente avanzada" que va a permitir al sector partir de una base saludable para acometer su modernización.

Recordó las novedades recogidas en el reglamento, como la ampliación de la gama de activos en que se puede invertir, la posibilidad de otorgar liquidez por vías alternativas a la cotización en mercados bursátiles o la posibilidad de que los inversores minoristas accedan a sociedades o fondos de inversión libres a través de participaciones en fondos de fondos.

Todo ello debe, según Solbes, facilitar la expansión en el exterior de este sector y su modernización, que instó a que sea por lo menos tan importante como lo es la de su nuevo marco legislativo.

Reiteró que se refuerza la figura del depositario, que debe actuar como "contrapeso" de la gestora y que se establecen normas "estrictas" para garantizar la independencia del depositario y que para ello se crea una comisión interna.

Por otra parte, Solbes no quiso concretar las medidas a adoptar para hacer frente al encarecimiento del petróleo y reconoció que lo lógico es que esa subida lo paguen los "utilizadores" y no "terceros, que nada tienen que ver". No obstante, matizó que la aplicación "a rajatabla" de ese principio tiene incidencias en sectores "muy concretos", que por "razones sociales" deberán tenerse en cuenta.