Total cambia a su vicepresidente en Cepsa a pocos días de conocerse el fallo del Tribunal de La Haya

Sigue el suspense en torno al resultado del arbitraje que en el Tribunal de La Haya dirimen la francesa Total y el Banco Santander con Cepsa como telón de fondo. El consejo de administración de la petrolera que preside Carlos Pérez de Bricio será escenario mañana, 30 de marzo, de la renuncia de Jean-Paul Vettier a la vicepresidencia.

El actual responsable de Refino y Marketing de la multinacional gala será sustituido en Cepsa por Michel Bénézit, director de Exploración del Mar del Norte.

El cambio de fichas en España parece adelantar un movimiento más profundo en la propia Total: en efecto, Bénézit es un subordinado de Christophe de Margerie, presidente de Exploración y Producción, cuyo nombre se baraja como sustituto en la presidencia de la multinacional del actual capo, Thierry Desmarest.

Mientras tanto, sigue el misterio en torno al fallo del arbitraje del Tribunal de la Haya, al que tanto el Banco Santander como Total acudieron para dirimir sus diferencias en torno a la sociedad conjunta Somaen Dos, en la que también participa Unión Fenosa.

Fuentes jurídicas ligadas a ambos contendientes vienen asegurando en las últimas semanas a este diario que el laudo está hecho, pero que está siendo traducido a las dos lenguas (francés y español) antes de hacerse público, “lo que se espera antes de que acabe el mes de marzo”.

Sin embargo, nadie sabe a ciencia cierta cuándo verá la luz definitiva. “Aquí no sabemos una palabra”, aseguró ayer un portavoz autorizado de Cepsa, “y no lo sabe nadie ni en Total ni en el banco, lo que está dando lugar a todo tipo de rumores, que si los tres magistrados se han encontrado con una sorpresa que no esperaban, que si ambas partes han decidido esperar a que pase la tormenta de E.ON...”

“El laudo está dictado” aseguró ya el pasado día 21 a este diario una fuente del equipo jurídico que defiende a Total, “y estamos pendientes de la entrega de la segunda traducción (al castellano) a la Asociación Holandesa de Arbitraje Internacional (NAIC). El sentido del laudo es impenetrable, aunque esperamos sea público muy pronto”.

La clave del conflicto radica en al instrumental Somaen Dos, titular del 33,23% del capital de Cepsa, porcentaje que en un 19,92% pertenece al SCH, en un 5% a Unión Fenosa y en el 8,31% restante a Total. Sin embargo, los derechos políticos de esos paquetes están todos en manos del Santander, en virtud de los pactos societarios suscritos en su día entre Total y el BCH.

Botín quiere una OPA

Ambas partes están de acuerdo en la disolución de Somaen Dos, pero aquí no acaban los problemas, porque ese paquete está en libros a un precio cercano a los 8 euros la acción, y hoy Cepsa cotiza a por encima de los 45 euros, “y se trata de ver quién pagaría las correspondientes plusvalías que Hacienda reclamará por la operación”.

No solo eso. La disolución de Somaen Dos colocaría la participación de Total en Cepsa en algo más del 49% del capital (frente al 32,5% actual en manos del Santander tras la OPA sobre el 16% efectuada en su día), “por lo que Botín quiere obligar a los franceses a lanzar una OPA sobre el 100% de la petrolera española”, en opinión de las fuentes.

La amenaza de esa OPA sobre la totalidad del capital de Cepsa, con la que los abogados del Santander (Uría & Menéndez, Juan Fernández Armesto y Derain & Asociates) estarían presionando a Total, es mencionada por parte de las fuentes consultadas como elemento clave en la paralización del laudo, cuyo anuncio público se lleva retrasando desde finales de enero.