Botín sobre el paquete del SCH en Cepsa: “No aceptaré ningún precio que no lleve un 5 por delante”

Emilio Botín quiere reeditar en Cepsa, y por enésima vez, otro de sus acreditados pelotazos. Con la acción en una escalada imparable en Bolsa, el banquero ha rechazado en las últimas fechas diversas propuestas que le han sido formuladas por la banca de negocios para la venta ordenada del paquete del Santander en la petrolera: “No aceptaré ningún precio que no lleve un 5 por delante”.

La frase alude a la exigencia por el banquero de un precio mínimo de 50 euros por acción para el 27,7% que, tras el perfeccionamiento de los acuerdos derivados del laudo arbitral con Totalfina, el banco continuará manteniendo en Cepsa. La cifra, que la semana pasada era considerada una verdadera locura en medios financieros, quedó ayer rebasada por los acontecimientos al cerrar en Bolsa a 52,10 euros, con subida del 1,78%.

De acuerdo con diversas fuentes ligadas a la banca de negocios, el Santander ha estado recibiendo ofertas en las últimas semanas con diversos esquemas, casi todos girando en torno a una colocación en Bolsa de dicho porcentaje, que podría contar con un tramo adjudicado directamente a inversores institucionales (IPIC y Fenosa) y con otro en Bolsa.

Desde que el banco y la francesa Total optaron por dirimir sus diferencias en un arbitraje internacional, el grupo Internacional Petroleum Investment Company (IPIC), de los Emiratos Árabes Unidos, propietario del 9,54%, ha sido considerado por unos y otros como un potencial comprador, en todo o en parte, del paquete del Santander, condición ahora extensible también a Fenosa, titular del 5% de Cepsa, que de una posición vendedora ha pasado a plantearse doblar su actual participación.

Sobreprecio

Pero la práctica totalidad del mercado opina que “Cepsa vale entre 40 y 44 euros, y cualquier cosa por encima de ese precio es una verdadera locura”. Desde hace tiempo ese mismo mercado vienen sospechando que el valor, muy poco líquido (en torno a un 5% en manos de minoritarios) está siendo manipulado al alza por el propio Santander en su deseo de alcanzar el mejor precio.

“Botín se ha acostumbrado a dar pelotazos en los últimos tiempos, y quiere repetir la experiencia en Cepsa, pero aquí no estamos en Dragados, Vallehermoso o Fenosa, y es imposible alcanzar los precios que pide aquí con un paquete que no es de control”, señalan las fuentes.

La tentación del pelotazo es tan fuerte, que el banquero ha rechazado hasta ahora cualquier solución para ese paquete que no sea su venta en bloque a un solo comprador y a precio cerrado. Lo dicho, Botín quiere poner broche de oro a la venta de una de las últimas joyas industriales heredadas del antiguo Banco Central Hispano.

El Santander y Total comunicaron la semana pasada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que se hallan negociando "con el objetivo de alcanzar un acuerdo definitivo" sobre Cepsa, tras el laudo parcial que el pasado 24 de marzo puso fin al contencioso que mantenían ambas entidades en la petrolera.

De acuerdo con el fallo del Tribunal de Arbitraje de La Haya, Total elevará su participación en Cepsa en un 12,6%, hasta el 49,6%, a resultas de dos operaciones: por un lado recobrará los derechos políticos sobre un 8,3% de Cepsa que tiene cedidos a la sociedad instrumental Somaen Dos (que ahora se disuelve), y por otro comprará un 4,3% adicional de la petrolera al banco a un precio por debajo de 5 euros (recuérdese que ayer cerró a 52,10).

Tras ceder a Total el porcentaje al que se había comprometido y que el laudo arbitral ha reconocido, el Santander se quedará por su parte con un 27,7% del capital de Cepsa.