Prisa presiona a Telefónica para venderle Sogecable, mientras Alierta se limita a hablar de contenidos con Polanco

Un tema de conversación ocupa a la banca de negocios asentada en Madrid: el grupo Prisa intenta por todos los medios “colocar” un Sogecable en pérdidas a la exuberante Telefónica. La reaparición –de la mano de El País- en la escena judicial del caso Sintel, que implica a Juan Villalonga, sería una forma de presionar la operadora al más puro estilo ‘cebrián’ para que se decida cuanto antes, pero Alierta, muy en línea Villalonga, se limita a “dar hilo a la cometa”.

Fuentes de Telefónica consultadas por este diario al respecto han descartado, sin embargo, que Sogecable sea el centro de las negociaciones que, desde hace meses, ambas casas vienen manteniendo bajo la atenta mirada de los capos, Jesús Polanco y César Alierta. Prisa y Telefónica han formado sendos grupos de trabajo encargados de negociar, en principio, “qué contenidos del grupo Sogecable pueden ser de interés para la plataforma Imagenio de Telefónica, y qué precio puede pagar Telefónica por tales contenidos, lo que indudablemente aliviaría la situación de Sogecable”.

Javier Díez Polanco, consejero delegado, encabeza el grupo de trabajo de Sogecable, mientras que Julio Linares comanda el de Telefónica. La noticia es que, a partir del verano pasado, el nivel de representatividad del grupo Telefónica ha descendido a segundos e incluso terceros niveles ejecutivos, con gran enfado del de Sogecable, que no entiende lo que está pasando. La crisis de futuro abierta por la enfermedad de Polanco ha provocado una oleada de rumores que nacen en la propia Prisa: no es de contenidos de lo que Polanco quiere hablar con Telefónica, sino del futuro de la propia Sogecable.

Doscientos millones de clientes

De acuerdo con las fuentes, “todos los grandes grupos de comunicación dueños de contenidos audiovisuales están en estos momentos enfrascados en algún tipo de conversación o negociación con Telefónica para la venta de sus productos”. Time Warner, Murdoch, Rizzoli, Prisa entre los españoles, todos quieren aprovechar la formidable plataforma que representa Telefónica con sus más de 200 millones de clientes, potenciales consumidores, desde el teléfono a la televisión, pasando por Internet que con el despliegue del ADSL y con el aumento del ancho de banda, se convierte en el gran distribuidor de todo tipo de contenidos.

“Digital Plus ya gana dinero, lo ganó el año pasado y lo volverá a hacer este; la vía de agua es que lo pierde en la aventura de La Cuatro” -aseguran a este diario fuentes cercanas a Prisa-, la nueva cadena de televisión en abierto con la que Polanco pensaba meter mato en la jugosa tarta publicitaria. El problema de Sogecable es el satélite, de posibilidades tecnológicas inferiores a la banda ancha pues, porque, entre otros condicionantes, no permite la interactividad. Y su fortaleza es la propiedad de los mejores contenidos en español, firmados a largo plazo con las más importantes majors norteamericanas.

De momento, Imagenio se dedica básicamente a facilitar conexión a Internet y a ofrecer “un poquito de televisión” –en irónica expresión de una fuente de Telefónica-, sin jugar a fondo la baza de los contenidos, para lo cual sería necesario acometer fuertes inversiones en las infraestructuras necesarias para llevar la red de fibra óptica a todos los hogares españoles. Esto supondría una inversión monstruosa y una vocación de la que carece la operadora y su presidente, razón por la cuál se desprendió hace años de Vía Digital y de Antena 3 a unos precios que muchos consideraron irrisorios.

Broncas entre las partes