Roverato se aferra a su sillón y se niega a dar un solo consejero a “naranjeros y golfistas”

No le podían haber salido peor las cosas a Luis del Rivero, presidente de Sacyr, en la junta de accionistas de Eiffage. Su bestia negra, el máximo responsable de la constructora francesa, Jean-Francois Roverato, no sólo no le ha pasado ni una al empresario español, sino que encima se ha mofado de él. “Quiero advertir que naranjeros y jugadores de golf murcianos pueden tomar el control de Eiffage a expensas de sus accionistas”, dijo Roveratto en rueda de prensa.

Antes de eso, el osado presidente francés había frustrado todos los planes que Rivero llevaba en la agenda. El golpe definitivo fue rápido, al principio de la junta, cuando Roveratto leyó una carta de sus abogados que acusaban a Rivero de actuar de forma concertada con otros 89 accionistas españoles dueños del 17,6% de Eiffage. Sumado el 33,2% de Sacyr, los accionistas españoles superan el 50%.

Desactivados los españoles, Roverato pudo ganarle la partida a Rivero y prohibirle otra vez la entrada en el consejo, él proponía ocupar cinco asientos. El francés también evitó así su destitución como presidente, otro de los planes de Sacyr. Para salvar su obligado abandono de las funciones de presidente antes del 30 de junio, Roveratto ha ideado la fórmula de ceder las funciones ejecutivas a su número dos, Benoit Heitz, y él quedarse como presidente no ejecutivo.

Pelea en los tribunales

La respuesta de Rivero y de Rayet, aunque separada, será en los tribunales. El presidente de Sacyr amenazó al francés con un “ha ido usted demasiado lejos y esto se resolverá en los tribunales” antes de salir de la sala. Para Rivero, es “ilegal” la decisión tomada por el presidente de Eiffage.

Lo mismo señaló Rayet en un comunicado. La compañía alcarreña cree que sus derechos como accionista se han visto vulnerados y acudirá a los tribunales. Ayer Roverato sólo le reconoció 13.000 acciones, frente al paquete de 3,9 millones que posee.

Ambas demandas, de producirse, se cruzarán con otra del propio Roverato. Según anunció el francés en rueda de prensa posterior a la junta, interpondrá contra Sacyr una demanda por haber infringido la normativa bursátil francesa. "Es muy grave haber tratado de contravenir las leyes de los mercados franceses", dijo.