Audax y Solaria se hunden en bolsa tras la reforma para abaratar el precio de la luz

Las firmas cotizadas de renovables Solaria y Audax han retrocedido en bolsa este lunes un 10,52% y un 9,15%, respectivamente. La fuerte caída se produce después de que entrara en vigor este sábado el real decreto ley que pretende abaratar el precio del mercado mayorista de la electricidad para contener el coste de la factura que pagan los consumidores.

Varios analistas consultados señalan que los inversores de estas compañías pueden estar previendo menores ingresos en el medio plazo, lo que les está llevando a vender. No obstante, relativizan las caídas, ya que se trata de dos empresa pequeñas y muy volátiles que llevaban revalorizaciones superiores al 200% en 2018, con lo que cualquier vicisitud negativa implica una considerable corrección.

Sea como fuere, los expertos interpretan que uno de los objetivos del nuevo real decreto es abaratar el precio del mercado mayorista, del que dependen una parte de los ingresos de estas compañías. En cualquier caso, este es un efecto limitado, ya que parte de las renovables están en régimen subvencionado, con lo que los ingresos no dependen del mercado sino de las aportaciones en forma de primas.

La eliminación del impuesto a la generación del 7% tiene un efecto más neutro, ya que los menores ingresos se compensan con el pago de menores tributos. Pero la exención del céntimo verde provoca una caída de ingresos para todas las tecnologías, y las únicas que se aprovechan de la menor fiscalidad son las plantas de gas y carbón.

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Pero los nuevos proyectos que van a mercado se encuentran ahora con una expectativa de ingresos inferior a la que había antes de las nuevas medidas impulsadas por el Ministerio de Transición Ecológica.

Pero el principal problema para los generadores de renovables es la intención del Gobierno de transformar el mercado marginalista 'pool' a medio plazo, que atisba menores ingresos para los productores independientes de energía. Un consultor independiente señala que acabar con el mercado marginalista para ir hacia contratos bilaterales, como pretende Transición Ecológica, puede ser un problema para los productores independientes.

Según explica, en la actualidad cualquier productor de renovables que no sea capaz de cerrar la venta de su energía con un tercero puede acudir al mercado marginalista, que le ofrece la liquidez suficiente para colocar sus excedentes. Si desaparece el 'pool', toda esa energía que a día de hoy está cobrando a más de 70 euros por megavatio hora de media tendrá que venderse a una gran comercializadora a la que pueda interesarle. Pero en este caso, la negociación es muy diferente, ya que el comprador sabe de la necesidad del vendedor, puesto que la electricidad tiene la particularidad de que no se puede almacenar, con lo que está obligado a vender todo lo que se genere.

La reacción que han tenido en bolsa tanto Audax como Solaria es por otro lado un aviso a navegantes. En un momento de 'boom' de proyectos que pretenden vender energía sin primas, los vaivenes regulatorios que pueden condicionar el precio de la energía suponen el mayor reto a la hora de levantar financiación por la incertidumbre que se genera en la capacidad de ingresos de esas plantas. Dicho de otro modo, el valor de los activos está condicionado en gran modo por la actividad regulatoria aunque vayan a mercado, dada la indefinición del mercado en el medio plazo.