¿De dónde sacará Musk los 21.000 M restantes para Twitter? Al inversor de Tesla le preocupa

Este lunes, el hombre más rico del mundo sellaba la compra de Twitter por 44.000 millones de dólares, impulsando las acciones de la red social cerca de un 6% en Wall Street. Y mientras todos miraban hacia Elon Musk y su nueva adquisición, los inversores de Tesla mostraban su decepción con el acuerdo de compra.

“El éxito de la oferta por Twitter también podría preocupar a los accionistas de Tesla (TSLA), ya que su consejero delegado se vería envuelto en otro proyecto de gran envergadura y podría vender parte de su participación del 9,1%, que está valorada en más de 90.000 millones de dólares”, apuntaba ayer en un comentario Ben Laidler, estratega de mercados globales en eToro.

Los títulos del fabricante de vehículos eléctricos han perdido más de un 12% este martes, cayendo hasta los 876,42 dólares.

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El temor está fundamentado. Sin contar SolarCity, la red social será la cuarta compañía que competirá por la atención de Musk y “como su nuevo juguete, Twitter será la mayor distracción de todas. Y eso pone en peligro la ejecución”, escribe Ed Harrison en Bloomberg´s Markets.

Además de por sumar otro gran proyecto a su lista, los inversores se preguntan cómo va a cubrir los 21.000 millones de dólares que pondrá de su propio bolsillo para comprar la plataforma. El CEO de Tesla ya reveló que 12.500 millones los obtendría de bancos como Morgan Stanley o Bank of America, y los otros 12.500 gracias al respaldo de su participación en Tesla, pero apenas dio detalle en su papeleo con la Comisión de Mercados y Valores de EEUU sobre la parte restante.

La fortuna de Musk está valorada en 257.000 millones de dólares y, de acuerdo a los cálculos de Bloomberg, el multimillonario solo tiene unos 3.000 millones en efectivo y activos líquidos. Salvo que sea más rico de lo esperado y sus inversiones en bitcoin, dogecoin o ether puedan cubrir el monto faltante.

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De no ser así, Musk tendría otras opciones. ¿La primera? Conseguir el apoyo de otros accionistas de Twitter para que se queden, como podría ser el caso del ex CEO de la plataforma Jack Dorsey, cuya participación asciende a los 1.000 millones de dólares.

Pero incluso si no consiguiera reunir a un número suficiente de inversores, seguiría teniendo un as bajo la manga: Tesla. Tras los préstamos, Musk aún conservaría 21.600 millones de dólares no comprometidos en acciones de la compañía, que podrían venderse y financiar el resto de la compra de Twitter.