Más lío en Colonial: ING Real Estate y Realia entran en la puja por la inmobiliaria

Dos nuevos nombres se suman a la lista de las inmobiliarias que se han interesado o están estudiando entrar en la puja por Colonial. Según ha podido saber este diario, la holandesa ING Real Estate, filial del banco naranja, y la española Realia estudian pujar por la compañía que preside Mariano Miguel y de la que Luis Portillo es el máximo accionista con el 40%.

La operación más avanzada es la de ING. De acuerdo con las fuentes, el banco naranja se ha visto con Portillo, con Mariano de Miguel y con otros accionistas de la inmobiliaria para calibrar sus posibilidades de éxito. “No hay oferta concreta, pero se han reunido con ellos”, aseguran fuentes conocedoras de la operación. Fuentes de Colonial han asegurado desconocer esas reuniones. “Lo único que hemos hecho con ING ha sido venderle un edificio el año pasado”, indican estas fuentes. Ayer, nadie de ING respondió a las llamadas de este diario.

ING Real Estate es una de las divisiones más fuertes del banco naranja y España es su segundo mercado, tras Holanda. La firma holandesa desarrolla en España importantes promociones de viviendas, de centros comerciales (punto fuerte de Riofisa), y parques logísticos. Su negocio es, por tanto, complementario al de Colonial.

El interés de Realia por Colonial es menor. Según las fuentes consultadas, la compañía ha estudiado en su último consejo la situación de la inmobiliaria de Portillo y no ha decidido lanzarse a hacer una oferta. “El interés de Realia por Colonial ha bajado de intensidad”, aseguran a este diario en fuentes bien informadas. Portillo ya ofreció hace meses a Esther Koplowitz la fusión de ambas empresas, a lo que se negó la dueña de FCC en redondo.

Operación verde

Pese al goteo de empresas interesadas, fuentes del sector aseguran que no es fácil que la operación salga adelante y que, en realidad, todo está mucho más verde de lo que parece. “No se trata sólo de llegar a un acuerdo con Portillo o con la familia Nozaleda. Es que cuando Portillo llega a un acuerdo o fija un precio, llegan los bancos acreedores y no le dejan vender a ese precio. Y en medio de todo eso, los otros accionistas enfrentados al sevillano, Domingo Díaz de Mera y Aurelio González, buscando apoyos para su opa. Y encima, Joaquín Rivero y Gecina moviéndose por su parte… No es fácil resolver esto”, asegura una fuente del sector.

El máximo responsable de uno de los cuatro bancos acreedores de Colonial insiste en esta idea. “No es noticia que alguien se interese por Colonial porque es una de las mejores inmobiliarias de Europa. Pero todavía nadie ha puesto encima de la mesa una oferta concreta. Es muy fácil, sólo hace falta dinero, pero todavía nadie lo ha hecho”, se queja. “A nosotros nos basta con que el comprador final sea un buen gestor para seguir prestando dinero a Colonial”, asegura.

El mercado, ayer, también dio la razón a quienes creen que la solución a este embrollo podría estar lejos. Colonial movió 28 millones de acciones y subió dos céntimos, hasta 1,52 euros, en un día en el que General Electric confirmó su interés por la inmobiliaria. Un resultado ridículo, pese al comportamiento de todas las bolsas europeas, que demuestra que, también para los inversores, cualquier operación podría tardar.