“No somos como Colonial”: Jesús Ger se encomienda a Dubai para sacar de la crisis a Marina D’Or

“Jesús Ger está en Dubai”, informa el personal de Marina D’Or en el kilométrico stand que la compañía castellonense tiene abierto en el Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA). Un expositor que, por su tamaño, pone en evidencia la ausencia de compradores en esta edición de la Feria marcada por la crisis.

“No somos como Colonial. Jesús Ger no está en Dubai en busca de financiación”, aseguraron ayer a El Confidencial desde la oficina de prensa de Marina D’Or. Sucede que Emiratos Árabes Unidos es uno de los 22 países del globo donde la compañía ha abierto oficina comercial. Además, “actualmente están muy avanzadas las negociaciones para la apertura de oficinas en Bahrein y Arabia Saudita”, aseguran.

“La diversificación geográfica que la empresa ha acometido en los últimos años nos está salvando de la actual situación en España”, aseguran. Marina D'Or pretende hacer frente a la crisis en el mercado español apostando por la puesta en marcha de promociones en países con mercados emergentes como Marruecos, Egipto, Bulgaria, Brasil, República Dominicana o Panamá, y en menor medida también en Ecuador y Argentina. En esos países ya se está proyectando la construcción de apartamentos de lujo, hoteles y viviendas unifamiliares, y en lugares como Marruecos se llevarán a cabo proyectos de obra. Según las previsiones de Marina D'Or, esas promociones fomentarán el crecimiento de la firma y permitirán hacer frente a “la situación de crisis española, que a juicio de la empresa no se solucionará ni en un año ni en dos”.

El salto hacia adelante de Marina D’Or Golf

En efecto, esta semana han trascendido los problemas por los que atraviesa la promotora, que ha reducido a la mitad su beneficio, las ventas de sus apartamentos en España se han desplomado un 60% y se ha visto obligada a despedir a un millar de trabajadores.

Pese a todo, la inmobiliaria tiene previsto seguir adelante con su faraónico proyecto Marina D’Or Golf, un desarrollo que se asienta sobre 18 millones de metros cuadrados entre Oropesa y Cabanes, que constaría de tres campos de golf, seis hoteles y miles de viviendas. Aunque cuenta con la aprobación provisional de ambos ayuntamientos, el PAI se encuentra paralizado sobre la mesa de la Generalitat valenciana. Uno de los escollos principales es la falta de agua para tamaño desarrollo.

Precisamente, la fiscalía de Castellón ha abierto diligencias de investigación debido a que el Ayuntamiento de Cabanes adjudicó a una empresa del grupo el suministro de agua que tenía contratado con otra concesionaria. Además, Ger está acusado de un presunto delito de tráfico de influencias después de que le adjudicaran un desarrollo urbanístico en la zona de expansión del complejo.