Afirma (Astroc) cae a mínimo histórico: el mercado no confía en su salvación

La inmobiliaria Afirma -la antigua Astroc Mediterráneo- no consigue levantar cabeza, pese a los esfuerzos de sus nuevos socios por salir del agujero en que Enrique Bañuelos metió al paradigma de la burbuja inmobiliaria. Hoy ha marcado mínimo histórico en 1,37 (aunque recupera algo de terreno a media sesión), lo que supone una pérdida del 72,6% en lo que va de 2008y del 78,59% para los inversores que acudieron a la OPV de mayo de 2006.

El rescate de Astroc en diciembre por parte de un grupo de inmobiliarias capitaneado por Rayet y Nozar generó cierto optimismo en el mercado: en las semanas previas a la junta en la que nació Afirma como fusión de 19 inmobiliarias, en febrero de este año, el valor llegó a remontar un 140% hasta 4,85 euros. Pero, a partir de ahí, retomó la tendencia bajista que comenzó en aquel increíble máximo histórico de 75 euros marcado en febrero de 2007. Y hasta hoy.

El mercado está lanzando un claro mensaje de desconfianza en la compañía que ahora preside Félix Abádanes y en sus posibilidades de salvación. Un analista especializado en inmobiliarias explica que "Afirma tiene que luchar contra el rechazo generalizado del mercado al sector, contra las malas noticias que constantemente genera (la última, la suspensión de negociación de Aisa y su probable suspensión de pagos), contra un pasado que es una película de terror (Astroc estaba prácticamente desahuciada) y contra un plan de viabilidad complicadísimo y que casi nadie entiende".

En la compañía reconocen que es difícil comunicar todas las medidas que están en marcha. Aun así, hace unos días su consejo emitía una nota en la que consideraba "injustificada" la bajada de la acción, porque "no refleja el valor de la compañía, sus activos y su capacidad de generación de valor".

La refinanciación y la ampliación, frentes abiertos

Afirma tiene abiertos en este momento tres frentes principales. Por un lado, la renegociación (técnicamente es una novación) del préstamo sindicado con el que adquirió Landscape, del que quedan pendientes 667 millones de euros (y 100 millones vencen en diciembre). El problema es que la compañía incumplió una de las cláusulas del préstamo -que la fusión con Landscape se completara en septiembre del año pasado-, lo que significa que todo el importe pasa a considerarse deuda a corto plazo y puede ser reclamado por el sindicato, que lidera Caixa Galicia, en cualquier momento. No obstante, el diciembre sólo fue reclamado el vencimiento normal (100 millones), como si la deuda mantuviera su plazo de vencimiento en 2013.

En segundo lugar, está un proceso paralelo de "optimización" de la estructura financiera, que consiste en unificar todas las deudas de las 18 inmobiliarias que componen Afirma aparte de Astroc, cuyo importe total es de 1.000 millones de euros. La compañía confía en que ambos procesos de negociación concluyan satisfactoriamente en junio, aunque asegura que no tiene ninguna presión y que tiene recursos suficientes para hacer frente a los vencimientos de 2008: ha facturado 80 millones en el primer trimestre, sus activos están valorados en 3.000 millones y sus fondos propios se elevan a 800 millones.

En tercer lugar, está una ampliación de capital de 800 millones anunciada a finales del año pasado. Aproximadamente la mitad de ese importe, 431 millones, ha sido aportada por Rayet y Nozar mediante la capitalización de préstamos participativos. La otra mitad estaba pensada para que los accionistas minoritarios no se diluyeran y pudieran comprar al mismo precio que los mayoritarios. Pero claro, cuando se lanzó esta idea ese precio iba a ser de 5 euros. El desplome en bolsa pone en cuestión, por tanto, que la ampliación finalmente se lleve a cabo, aunque la empresa se considera suficientemente capitalizada sin ella.

Como se ve, un verdadero jaleo que no contribuye a tranquilizar los ánimos en el mercado. Y, más allá de rebotes puntuales, los analistas no confían en una recuperación sostenible mientras no se cierren todos estos frentes y mientras no empiecen a llegar noticias mejores del mercado inmobiliario.