Solbes: "El dinero de los contribuyentes no está para ayudar a determinadas empresas"

Más claro no se puede decir. Más alto, sí. "El Gobierno" -acaba de decir Pedro Solbes- "no está para ayudar a determinadas empresas cuando llega una etapa poco favorable". De esta manera tan clara, el ministro de Economía acaba de cerrar la posibilidad de conceder ayudas de Estado a empresas privadas para resolver los problemas particulares de algunas compañías.

Según Solbes, "son los accionistas de cada empresa quienes han percibido los beneficios en los últimos años, de modo que son ellas, quienes deberán asumir las eventuales pérdidas derivadas de su actividad". Y es que para Solbes, "no sería ahora razonable que el Gobierno empleara el dinero de los contribuyentes para ayudar a quienes han tomado decisiones empresariales que, ya sea por mala gestión o por mala suerte, han resultado poco acertadas".

Hasta aquí el primer mensaje de Solbes durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados. El segundo mensaje tiene que ver sobre en quién debe caer el ajuste económico. Y, según Solbes, lo que es crucial en estos momentos es que esos costes derivados del deterioro de actividad económica se reparta "de forma equilibrada" entre los empresarios y los trabajadores. O dicho en otros términos, entre "márgenes empresariales y crecimiento salarial".

A Solbes le preocupa fundamentalmente que el crecimiento de los precios se traslade a los convenios colectivos, y de ahí, que pida moderación salarial para evitar que un "repunte transitorio" de la inflación se perpetúe en el sistema productivo.

Solbes espera que la inflación siga creciendo durante algún tiempo más, pero probablemente dentro de un par de meses volverá a bajar debido a que el precio del petróleo se ha moderado prácticamente en 20 dólares en los últimos días.

Reformas que se pondrán en práctica

El vicepresidente económico ha presentado esta mañana las reformas que hará el Gobierno para afrontar la actual situación económica en el Congreso. Ha reconocido la "gravedad de la crisis", aunque ha asegurado a que se debe, sobre todo, al contexto internacional, pero se ha mostrado "optimista frente al futuro", ya que, según ha asegurado, España tiene la suficiente capacidad para afrontar este momento.

Por un lado, porque tiene una mayor dotación de material productivo. Además "tenemos una clase empresarial con acreditada capacidad que facilitará la búsqueda de nuestra oportunidades de inversión y esto generará, entre otros aspectos, más empleo". También aseguró que, en la actualidad, la economía tiene un mayor nivel de flexibilidad que hace años. Los dos últimos factores que tiene España a su favor es la "robustez de nuestro sistema financiero y la solidez fiscal". A esto se suma el dinamismo demográfico protagonizado por la inmigración y el mayor acceso de la mujer al mundo laboral.

Solbes ha indicado que una de las reformas que pondrá en marcha para solucionar la crisis será reducir las cargas administrativas a las empresas. Asimismo, el Gobierno realizará importantes reformas laborales y de la Seguridad Social y continuará incentivando el impulso reformista en sectores específicos, como el de los transportes, el energético, telecomunicaciones y, sobre todo, el de servicios "el más urgente en estos momentos".

El vicepresidente económico ha insistido en que el Gobierno "ha reaccionado con la máxima rapidez" y ha recordado algunas de las medidas que ya están funcionando. Entre ellas, la rebaja fiscal de los 400 euros , la financiación al sector privado a través del ICO -que seguirá hasta 2010 y supondrá una aportación de 50.000 millones de euros- o el aumento del gasto público.